12.- La respuesta

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POV Jamie

Me he tirado casi toda la noche despierto. Apenas he podido pegar ojo. Siento las extremidades agarrotadas y doloridas. Y el cuerpo me pesa. Miro a Dakota, que sigue dormida, curiosamente con la mano cubriendo tiernamente el vientre... qué ironía... Stella está hecha un ovillo en la butaca, también duerme. Miro el reloj. Ya ha empezado el turno de la Dra. Martins. Tengo que ir a hablar con ella antes de que se pase a ver a Dakota. Necesito que me ayude con esto. Como puedo, me pongo de pie y me estiro con una mueca de dolor. Toco el brazo de Stella para despertarla.

- Stella... - le digo en un susurro - Despierta...

- ¿Jamie...? - dice adormilada.

- La Dra. Martins acaba de empezar su turno. Voy a ir a hablar con ella. Cuida de Dakota. Enseguida vuelvo.

- Jamie...

- ¿Qué?

Ella mira a Dakota con pena y tras unos segundos en silencio habla.

- Sólo espero que funcione... pero no hagas ninguna tontería.

- No lo haré.

Stella se pone en pie y me ayuda a sentarme en la silla de ruedas.

- Suerte - susurra mientras me abre la puerta para salir.

- Gracias. La necesitamos - contesto con una media sonrisa.

La consulta de la Dra. Martins no está muy lejos de la habitación. Cuando estoy delante de la puerta, respiro hondo un par de veces para serenarme. Intento poner mi mejor cara, aunque creo que sólo acabo dando más miedo. Toco la puerta y espero respuesta. Casi al momento, la doctora me abre la puerta con una sonrisa.

- Buenos días Jamie, ¿Qué tal?.

Sonrío con sarcasmo ante la pregunta y no puedo evitar soltar un taco.

- Jodido... - digo con sinceridad y suspirando.

- Sabía que ibas a venir - dice de pronto.

- No puede abortar - digo en un susurro.

- Jamie... - dice cansada - Te lo dije y te lo repetiré; la decisión es suya, única y exclusivamente.

- No, no es sólo suya.

-Sí, legalmente.

- Pues la ley es una mierda...

La doctora tiene la decencia de reír. Al menos uno de los dos puede hacerlo...

- Es ella, quien lo lleva dentro. Ella, quien tendrá que aguantar nueve meses que pueden ser malos o buenos. Ella, quien tendrá que dar a luz.

- Y sería yo si pudiera. Es tan hijo suyo como mío - digo intentando mantener la calma.

- Lo sé, Jamie. Pero como he dicho, nosotros no podemos hacer nada - contesta.

- Habla con ella... que entre en razón... - digo a la desesperada.

- Sabes que no puedo hacer eso. No es mi decisión - responde ella muy seria.

- Ya, pero... creo que si Dakota va a escuchar a alguien, va a ser a su doctora.

La Dra. Martins me mira en silencio unos segundos. Y habla después de un largo suspiro.

- Mira, Jamie, hablaré con ella, intentaré hacer lo que pueda; pero no puedo decidir por ella, ni lo haré. - dice zanjando la conversación.

Nuestra propia película (Jamie y Dakota) | #Wattys2016Where stories live. Discover now