| one shoots |

| 017 | Kian Lawley

No voy a negar que estaba un poco intimidada por el ambiente de la sala en la que me encontraba. Todo parecía tan fuera de lo común que me hacía estremecer.

Todos llevaban elegantes máscaras cubriendo sus rostros, así como finos trajes y costosos accesorios. Tome la fina tela de mi vestido rojo entre mis dedos, suave y bonita.

Todos en la pista central parecían coordinar sus movimientos a la perfección. Bailaban con una gracia admirable y eso solo provocó que mi cuerpo se estremeciera de emoción una vez más. Ajuste mi antifaz dorado y me lancé hacia la pista central. La música parecía llevar el tono de todos.

Momentos después fue sustituida por otro tipo de música, música que al parecer era para bailar en parejas; todos en la elegante pista tomaron a una pareja y siguieron moviéndose con aquella gracia particular.

Me asusté.

Me intimide y retrocedí unos cuantos pasos, esto era algo en lo que yo no era buena participando. Pero este era un tipo diferente de baile. La elegante canción tenía un momento en el que se escuchaba más alto y esto parecía ser una señal para que se le diera media vuelta a tu pareja de baile y está fuera cambiada por otra.

Me quede atrás observando todo, pero al parecer nadie se estaba quedando fuera del baile.

Segundos después tuve a un desconocido delante mío, tenía un traje elegante como todos, pero su saco estaba doblado arriba de las mangas, permitiendo exponer los distintos tatuajes que adornaban sus brazos. Su antifaz negro brillaba y cubría la parte de arriba de su rostro sin cubrir sus impresionantes ojos avellana.

El extendió su brazo hacia mi mientras hacía una pequeña reverencia.

— ¿Te gustaría bailar? — fue lo que dijo sin apartar la mirada de mi. No conteste nada, únicamente tome su mano mientras asentía y deje que me llevara a la pista.

La música parecía sonar más fuerte mientras él me sostenía en sus brazos y nos hacía mover por la pista. Yo no era buena en el baile de parejas, pero al parecer el si, ya que nos movíamos con igual o más gracia que las demás parejas.

— Soy Kian, por cierto.— dice y una encantadora sonrisa adorna su rostro. Le sonrió de vuelta y cuando estoy apunto de decirle mi nombre la música cambia y él me gira haciendo que alguien más sostenga mis manos.

Ya no es Kian, es alguien más alto y sus ojos no brillan como los de él; trato de buscar con la mirada donde fue que Kian quedó, pero fracaso en el intento.

Doy aproximadamente cinco giros diferentes con una pareja distinta en cada uno de ellos, estoy apunto de rendirme cuando en otro giro termino sujeta por unos fuertes brazos cubiertos de tatuajes.

— Siento eso. Al parecer es algo que no puedes evitar.— dice sujetando más fuerte mi cintura.

— Soy Gala, por si acaso te vuelvo a perder.— él me sonríe y cuando la música cambia me gira pero no siento sus brazos soltarme.
Cuando la vuelta termina aún veo sus increíbles ojos.

— Supongo que tendremos que hacer un poco de trampa en esto.

— ¿Qué hay de las reglas? — pregunto con una ceja encarnada, él se acerca a mí y siento su aliento en mi oído.

— No me conoces aún, Gala. Pero tengo que decirte que soy alguien que normalmente no las sigue.— se separa lentamente de mí y nos sigue moviendo. Al final le sonrío  y cuando oigo que la música cambia me da la vuelta.

— Que bueno que yo tampoco.— confieso y cuando la vuelta está por terminar cambio de pareja. Observo como él recibe otra pareja pero su mirada expectante se queda en mi.

Al final me sonríe de regreso y trata de volver a tenerme a su lado. Después de varios intentos lo vuelve a lograr.

— Podría estar haciendo esto toda la noche.— dice sujetando mi cintura con fuerza.

—Que así sea.— sonrío hacia él y desaparezco nuevamente esperando que él vuelva una vez más por mi.

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Oui!
Pequeña historia que tenía escrita desde hace muchooooo y solo decidí alargar un poco. Al final si decidí por empezar el zodiaco, es sobre películas de terror, espero que puedan pasarse Ojalá que les guste y no olviden dejar sus comentarios por favor. Gracias por todo.
nos vemos!