Querido Diario: Soy Olivia Black {Harry Potter} [actualización lenta]

Capitulo 30: Miembro oficial de la familia Black.

- ¡ALBUS PERCIVAL WULFRIC BRIAN DUMBLEDORE! ¡Dejame entrar!

La gárgola se movió al instante, y subí casi volando las escaleras. Llegué a la puerta, y sin esperar permiso entré de golpe en el despacho. Albus estaba de pie detrás de su escritorio, junto a fawkes, observaba expectante sobre su percha.

- Buenas noches, Olivia. ¿Qué tal la cena del profesor Slughorn?

- Estupenda, pero no me cambies de tema. Lo he descubierto, sin tu ayuda.

- ¿Qué has descubierto?
- Lo sabes muy bien.

- Pues explicame como lo has descubierto, ¿te parece? Estoy algo cansado... Asi que dime, ¿Cómo has llegado a la conclusión de tu descubrimiento?.- se sentó en su silla, y me invitó a sentarme delante suya.
Así lo hice, y intenté calmarme.

No lo conseguí del todo.

- Bien... Estaba paseando con Harry por los pasillos, de regreso a nuestra sala común. Estábamos hablando sobre la última reunión de la orden, principalmente sobre como les iba a Sirius y a Sarah. Le pregunté a Harry si de verdad la quería, a Sarah digo, y me respondió que sentía que era como su hermana pequeña, y Sirius lo más cercano a un padre en lo que lleva de vida. Yo le dije que sentía lo mismo o más, ya que Sarah es mi prima biológica, y Sirius por lo tanto como mi tio... Ahí es donde caí.
Adler escribió que mi madre estaba saliendo con un chico de su mismo curso, pero de otra casa. Al ser la única mención a un novio en el diario, se puede suponer que ese chico es mi padre biológico. El sombrero seleccionador dijo que mi familia fue mitad Gryffindor, mitad Slytherin. La familia de mi madre fue Gryffindor al completo, a excepción de mis abuelos maternos, que por alguna razon fueron serpientes; y por eso repudiaron a mi madre y a mi tía... A lo que iba, eso nos deja que mi padre fue Slytherin. Era de la misma edad que mi madre, y...

- Y...?

- No tengo más "pistas". Lo preguntaré indirectamente, ¿si?- Albus asintió.- Mi padre... ¿Es parte de la familia Black?

- Sí.

- ¿Y no fue borrado del árbol familiar?

- Correcto.

- ¿Mi padre es... Regulus Black?

La habitación quedó en completo silencio. Lo que antes era un discurso acalorado, ahora era un sonido lejano, casi imperceptible de lo que fue, siendo sustituido por el sonido de las agujas del reloj, nuestras respiraciones, y una leve pero bonita canción cantada por parte del fénix.

- Sí.

Ya no era una chica sin pasado, en parte al menos. Sabía quienes eran mis padres: Regulus Black y Miranda Fox.

- Olivia, ¿sabes qué significa esto?

- No del todo.- susurré.

- Tu padre es Regulus, por lo tanto Sirius es tu tío. Miranda es tu madre, por lo tanto Adler tu tía y...

- Y mis tios estaban juntos, y de alguna forma tienen una hija en común.- finalizé yo por el.- Una gran familia. Los hermanos se juntan con dos hermanas. ¿Quien más sabe sobre esto?

- Solo algunos miembros de la orden: El señor Lupin y la señorita Tonks, los señores Weasley, Kingsley, y por su puesto Sirius. Tu tío hizo un juramento inquebrantable, al igual que los demás. Quería que lo descubrieras por tu cuenta, te creía capaz, y tuve razon. ¿Un caramelo de limon?

- No, gracias. ¿Puedes hablarme sobre mi padre? No es que no sepa nada pero... Ni siquiera sé si me parezco a ellos, a mis padres, digo.

- No hay problema. Tu padre, Regulus, nació en 1961, y asistió a la misma promoción que tu madre. Como ya sabrás, fue Slytherin, y jugó en el equipo de quidditch de su casa. No era muy social, que digamos, pero tampoco es que estuviera solo. Conoció a tu madre ya siendo niño, al igual que Sirius a tu tía, pero ambos no se fijaron en ellas hasta sus últimos años escolares. Fue mortífago y... Murió robando un horrocrux auténtico. En realidad, esto está conectado con al desaparición de tu tía. Toda la comunidad mágica se dió cuenta de ella, pero no de que tu madre se fue junto a ella. Claro que los más cercanos a ellas si, como Sirius, Remus, y los Potter.

- ¿Por qué se fueron?

- A eso voy. Tu madre había descubierto que estaba embarazada de ti, y lógicamente se lo contó a Regulus. Él cambió con la noticia. No quería que su hijo o hija tuviera un padre mortífago, así que decidió robar un horrocrux, y hacer lo que pudiera para librarse de la maldición que lo condenaría de por vida. En el segundo mes de embarazo, tu padre murió intentando destruir el guardapelo que robó, y Kreacher se lo contó a Miranda, por petición de tu padre. Ella entró en depresión, y Adler se enteró de su estado. Tu madre no se creía capaz de tenerte, así que decidió usar un complicado hechizo para viajar a otra dimensión, en la que no haya una guerra como la que hubo. Tu tía no quiso dejarla sola, y alejandose de Sirius (a quien amaba profundamente), y del resto de sus amigos, se fue con ella. Tu madre te tuvo en el mundo en que creciste, un mundo sin magia aparente. Te crió con todo el amor del mundo junto a Adler hasta poco después de tu primer cumpleaños. Voldemort se había enterado de su partida, y consiguió ir a ese mundo, y asesinarla.

- ¿Cómo...?- mi voz se entrecortaba.

- ¿Te acuerdas del diario de Tom?- asentí.- Tu madre fue la victima que utilizó para crear ese horrocrux.

- Desde que era niña... He tenido sueños en los que una chica parecida a mi es... Asesinada, con un haz de luz verde.

- Es un recuerdo. Tu madre te defendió, como hizo Lily con Harry, muriendo en tu lugar. Eres poderosa, Olivia. El recuerdo de Tom Ryddle mató a tu madre, dando poder al diario, pero no pudo contigo. Por tus venas corre la sangre de dos importantes familias del mundo mágico: Los Black y los Fox. Un ejemplo de ello es el color de tus ojos, por ejemplo. Son parecidos a los de Sarah, quien tiene los de su madre, pero tu los tienes más verdosos, a causa del característico gris plateado de los Black. Tu cabello es negro, como el de ambos de tus padres, y tus rasgos y tu forma de ser es una mezcla de las de ellos. Eres más parecida a ellos de lo que te puedas imaginar.

- ¿Por qué Adler no se quedó conmigo después de la muerte de mi madre?

- Porque ella sabía que no estarías a salvo con ella. Te dejó en ese horfanato con la mayor pena del mundo, pero te controlaba desde lejos. Cuando tuvo a Sarah, a causa de una violación, a su pesar... Fue un verdadero regalo del universo. Un milagro, por así decirlo. Quiso recuperarte, pero ya era tarde.

- Entiendo... Gracias, Albus. Creo que de momento me basta con eso.

- No hay de qué, Olivia. Por cierto, a partir de ahora, si lo aceptas, serás Olivia Black Fox.

- Por supuesto.

Salí del despacho con la cabeza alta, mirando al frente. Ya tenía un pasado, una familia... Al fin.

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Y el gran momento ha llegado. Felicidades a maria22- por adivinarlo.

Besosss y difuuu