Phantom [h.s] •Completa•

treinta y siete

Escucho ruidos a mi alrededor, pero no estoy segura de qué sea, ¿Qué más se describe como múltiples sonidos juntos en un coro? ¿La risa, la voz, un poco de música? Mi visión es problemática, pero rápidamente vuelve al punto.

Estoy en casa, pero no está decorada como mi casa. Miro el entorno, muebles desconocidos con personas alrededor, llego a la conclusión de que estoy en la casa de Harry, en su hogar, bajo el candelabro. Esta no es mi casa, esta es la mansión Cadence, como era antes.

¿Por qué estoy aquí?

Empiezo a subir las escaleras, y siento como si una fuerza invisible me empujara. Esquivo a la gente en las escaleras, casi tropezando con mis propios pies cuando alcanzo el segundo piso de la casa, y comienzo a caminar por el vestíbulo.

Y algo me golpea.

Harry entra en el vestíbulo, con uno de sus brazos alrededor de Ava y el otro sobre Max. Los tres ríen, Harry lleva una camisa negra y Ava un vestido negro. Max lleva una camisa azul oscuro y una copa en su mano.

Ellos dejan de caminar cuando me ven, mis pies se sienten pesados ​​como si me estuviera sosteniendo algo. Ava y Max miran hacia el espacio delante de mí, pero los ojos oscuros de Harry miran a mi derecha. Los otros dos se van, dando un paso a mi alrededor por el pasillo.

—¿Qué haces aquí?—maravilla Harry.

—No sé—le digo.

—Tienes que salir de aquí—dice, pero su tono no es urgente. Sino casi neutro.

Separo mis labios para contestar, pero de repente se ha ido y estoy sola en la habitación.

—¿Harry?—llamo, encontrando que mis pies ya no están pegados más al suelo, y empiezo a caminar. Giro la esquina al final del pasillo, pero me encuentro en la misma habitación de antes. Confusa, doy vuelta en la esquina, pero sucede lo mismo. Comienzo a correr, la ansiedad está creciendo dentro de mí y llamo a Harry, sin tener respuesta.

Cuando giro la esquina del pasillo de nuevo, me paro y vuelvo a ir de donde vengo. En vez de seguir por el mismo camino, entro en una habitación.

Escucho un ruido que comienza lentamente pero luego aumenta en un fuerte grito, sin embargo las palabras incoherentes que emiten son graves. Es la voz de un hombre y una mujer, y casi me tiemblan los dientes al oír el tono brutal en sus voces.

Está oscuro y luego emerge la luz, miro el marco del espejo vacío, con la sangre alrededor de éste. Una pieza de vidrio está fuera del marco, lo suficiente para que yo pueda ver mi reflejo. Me veo en el mismo vestido que Ava y cuando miro hacia abajo a mis manos, están llenas de sangre.

No es mi sangre, como la última vez.

Giro la cabeza y veo algo en el suelo. No, no es algo, es alguien.

Harry. No puedo ver su rostro, se aleja de mí, pero su camisa negra ha cambiado por el suéter blanco que tanto es familiar para mí, y cuando giro alrededor de su cuerpo para mirar su cabeza, sus ojos están vacíos.

Está muerto.

Miro a mis manos y todavía están cubiertas de sangre, y siento cada vez más pequeña la sala, cerrándose sobre mí.

Quiero gritar, pero mi voz no sale. Trato de respirar, pero el aire parece haber sido evacuado de la habitación y todo lo que puedo hacer es mantener los ojos cerrados.

(...)

Me despierto temblando. Mi pecho se exhala cuando intento recuperar el aliento y mi habitación se encuentra frente a mí. Las luces se mantienen encendidas, y cuando miro mi reloj despertador es pasado de las once.