Capítulo 18

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Martina.

Entro en el piso con una sonrisa, dejo el abrigo en la entrada y me dirijo al salón donde veo a Alaska y a Renata pintándose las uñas.

Ellas al verme se giran y me instan a sentarme con ellas.

Me pongo el pijama y me dirijo al sofá junto a mis dos amigas.

Antes de que pueda decir nada, Renata retira parte de mi pelo del cuello dejando ver el hematoma que me ha formado Jesús.

-O sea que, ha habido tema, pillina- me codea de manera cariñosa
-Si- asiento -dos veces- Alaska abre la boca sorprendida y después me abraza
-Como me alegro por vosotros- dice la morena
-Al ver que por la noche no llegabas ya nos imaginamos que tardarías- la pelirroja eleva continuamente sus cejas
-Fue perfecto todo- suspiro con una sonrisa boba instalada en mi cara
-Va, cuenta cuenta- me insta la morena de ojos verdes
-Pues empezamos tomando unas cervezas, una cosa llevó a la otra, y acabamos en la habitación de un hotel. Esta mañana me he levantado muy bien al ver que no se había ido y seguía a mi lado, y dice que va a dejar a Lara- relato todo lo ocurrido, entusiasmada
-¿Quién es Lara?- cuestiona Alaska
-Su futura exmujer- contesta Renata y yo asiento concordando.










******










Me tumbo de nuevo y ambos tratamos de regular nuestras respiraciones.

Estamos en el piso y por suerte Renata está en casa de Gonzalo y Alaska en la de Marco.

Han pasado ya, dos semanas, casi tres, desde que Jesús y yo empezamos lo nuestro a escondidas.

Su mujer volvió hace poco de Badajoz y dentro de poco Jesús le pedirá el divorcio.

Besa mi sien y yo le abrazo.

En esta ocasión, en vez de quedarme dormida, me giro y le miro.

-Me gustaría que conocieras a mis amigos-
-A mi me gustaría que conocieras a mi hermano y a su mujer- aparta un mechón de pelo de mi cara y yo sonrío
-Perfecto entonces. Comemos aquí los seis juntos pasado mañana y ya me dirás cuando vemos a tu hermano- beso sus labios y él hace lo mismo.










******










Antes de sentarnos en la mesa para cenar, procedo a hacer las presentaciones.

-Bueno, chicos, él es Jesús- sonrío y él está algo cohibido
-Encantado de conoceros- dice el rubio
-Ellas son Renata, Gonzalo, su pareja, Alaska, y Marco, mi mejor amigo y novio de Alaska- los chicos le dan la mano y las chicas le dan dos besos.

Hechas las presentaciones, nos sentamos en la mesa y nos disponemos a cenar.

Pasamos un rato agradable los seis juntos.

Gonzalo y Jesús se llevan ocho años de diferencia, pero parece que se han caído bien.

Marco también es partícipe de sus conversaciones y me alegra mucho que se lleven bien entre ellos.

Alaska y Renata también parecen haber congeniado muy bien con mi pareja.

Supongo que en parte es por mi, ya que somos mejores amigas.

Pero aun así, Jesús es un encanto.

Al acabar la cena, recogemos todo y después de quedarnos un rato hablando ya es hora de despedirse.

-¿No te quedas?- murmuro sobre sus labios en la puerta, donde ya está listo para irse
-Sabes que me encantaría, guapa, pero tengo que ir a ver a Gaby- pasa su pulgar por mi labio inferior
-Entiendo- hago un puchero
-Te lo voy a recompensar. Te lo prometo-

Me besa y después se va.










******










Entrelazo mi mano con la suya y él toca el timbre de la casa de su hermano.

-¿Y si no les caigo bien ni a tu hermano ni a tu cuñada? ¿Y si no les gusta mi vestido?- pregunto agitada debido a los nervios que tengo
-Tranquila- trata de calmarme -les vas a encantar. Y con respecto a lo del vestido- se acerca a mi oído -a mi me gustas más, sin él- susurra con voz seductora
-Animal que eres- le doy un suave puñetazo en el hombro y después le beso
-Te encanta- me mira directamente a los ojos
-No Jesús, no me encanta- me acerco a su oído -mas bien, me pone-

Besa mis labios y al separarnos muerde suavemente el inferior.

-Como sigas asi, no respondo- hace que ría.

Al fin se dignan a abrirnos la puerta.

Me encuentro a un hombre mas o menos de la edad de mi padre, alto, rubio, de ojos azules y con la tez algo más morena que la de Jesús.

Sonríe y abraza efusivamente a mi pareja.

Al separarse, el otro rubio, repara en mi y sonríe más ampliamente.

-Tu debes de ser Martina- deduce mirándome de arriba a abajo y yo asiento -encantado de conocerte, soy Antonio, el hermano de este elemento que tienes por novio-
-Encantada- sonrío y nos damos dos besos en las mejillas
-No os quedéis ahí, pasad-

Se hace a un lado de la puerta y ambos entramos en la casa.

Tiene un salón precioso en el que veo a un chico de unos quince años jugando con una niña de cinco.

Una chica de unos treinta y algo de años hace acto de presencia en la habitación en la que nos encontramos ahora.

Me ve, sonríe y se acerca a mi.

-Soy Alicia, la mujer de Toni- sonríe y me da dos besos
-Encantada- contesto.

Ella sonríe de manera sincera y eso me gusta, me hace sentirme menos incómoda.

-Ellos son Lucía y Eduardo, nuestros hijos. Chicos venid a saludar-

Ambos se levantan de la alfombra en la que estaban sentados y se acercan a Jesús y a mi.

-Tío Jesús- dice la niña pequeña y le abraza
-Lucía, pequeñina ¿cómo estás?- se agacha y queda a la altura de ella
-Muy bien, mira, se me mueve un diente-

Todos sonreímos enternecidos por la pequeña.

Se acerca el chico más mayor y abraza al rubio.

Después se acerca a mi, más tímido y me da dos besos.

El rato de la comida es bastante ameno gracias a las bromas que hacían Jesús y su hermano.

Y me alegro porque me han acogido como a una más de la familia conociéndome de a penas dos horas.










******










Entramos en su dormitorio y yo le quito la camiseta negra que lleva hoy.

Él me quita a mi, la sudadera granate y después se encarga de la otra camiseta que llevaba.

Estamos en su casa.

Como la primera vez que nos besamos.

Pero esta vez estamos en su dormitorio.

Seguimos besándonos hasta que llegamos a la cama.

Mi espalda hace contacto con el colchón y él queda encima de mi.

Me besa el cuello sabiendo perfectamente que ese es mi punto débil.

-¡Jesús!- oigo en la puerta.

Rápidamente nos separamos y veo a Lara recostada en el marco de la puerta.

Dieciocho años no son nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora