Capitulo 19. Guerra

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Cuando se trata de amar el corazón pierde la paciencia.

Materia Prima.

Cualquiera pensaría que trabajar de forense era desagradable y asfixiante, pero para Karina era el trabajo ideal porque a su criterio la única constante que tenía la vida era la muerte, y en aquel lugar ante sus ojos habían pasado prácticamente todas las que una persona podía tener.

Para ella ver a los ojos a la muerte era comprender mejor a la vida, aprender que cada instante era valioso como para perderlo en clases de falsa moral, tristeza, fracasos o pasado... si pierdes en un intento te levantas y sigues adelante, por eso tenía ese puesto, aquella era la misma razón por la que disfrutaba su vida al máximo, no perdía tiempo mirando atrás o planeando para mañana simplemente valoraba el ahora, con todo lo que le regalaba.

Algunos decían que deseaba demasiado que no se medía en ocasiones en lo que buscaba, para ella el método era indiferente para llegar al resultado, su única norma de vida era invariablemente hablar con la verdad de frente. Porque si algo definitivamente estaba perdido en ese mundo era la capacidad de decir la verdad, tiro de la manta blanca que ocultaba aquel cadáver de un hombre de edad avanzada leyó el apellido antes de mirarlo con profundidad siempre les decía la misma frase antes de empezar su estudio "espero que a la hora final estuvieras satisfecho con tu vida" porque de no estarlo a su criterio entonces había vivido en el infierno.

A sus cuarenta años podía afirmar que no se arrepentía de nada en su vida, que toda experiencia vivida le había regalado una invaluable lección, cada persona con que compartió un momento en el tiempo le regalo algo de sí misma que simplemente la enriqueció, cada paso de su camino estaba marcado con firmeza nunca regreso sobre sus pasos siempre avanzo, siempre disfruto de cada una de sus decisiones... y eso sin duda era vivir.

Escucho al puerta abrirse dejando pasar a una mujer de treinta y cinco años de cabellos negros que le miro unos instantes esbozando una sonrisa divertida_ Los análisis toxicológicos de tu amigo dicen que lo envenenaron_ noto como le movían el informe_ tendrás que dejárselo a los forenses periciales.

_ Siempre eres tan aguafiestas_ dejo escapar con suavidad y algo de molestia antes de ver a un pequeño niño asomarse por lo que lo señalo al ver la boquita abierta mientras ella tapaba el cadáver.

_Raúl_ escucho la severidad en la voz de su compañera de trabajo_ te dije que te quedaras en el salón.

_Pero mamá quería ver a Karina_ dejo escapar el niño mostrando en su pequeño porte el hombre que llegaría a ser, cosa que hizo sonreír a la persona a la que iba dirigida su atención.

_ ¿Qué hace la garrapata aquí Evelyn?_ cuestiono sacándose los guantes con elegancia mientras se acercaba al pequeño que la miraba sonriente.

_No tuvo clases hoy, lo que me genera un infinito problema de choque de horarios_ vio la mano de Evelyn enredar los mechones rebeldes de su pequeño hijo con suavidad_ estará conmigo en el laboratorio y se suponía que me esperaría allí.

_Pero mami quería ver muertos_ afirmo el pequeño con emoción.

_Para eso solo debes mirar a las personas a tu alrededor pequeño_ Karina acaricio los cabellos del niño con suavidad_ y hazle caso a tu madre es la mujer más sabia que conozco y mira que conozco muchas...

_Karina_ sintió el suave tirón en su cabello mientras los ojos negros de Evelyn le dirigían una mirada severa.

_Pero si no hice nada_ afirmo guiñándole un ojo al niño.

No me olvides...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora