Capítulo Siete

828K 74.8K 72.4K
                                    


CAPÍTULO SIETE

Bridget me observa por lo que me parecen largos minutos, pero sé que solo se tratan de unos pocos segundos en los que su ojos verdes me miran con intensidad. Sé que mi amiga me está considerando una idiota en este mismo instante, y no la culpo, también me siento idiota, de hecho.

—Me estás diciendo ¿Qué ese pedazo de carne es el chico que te ayudo a dar a luz? —pregunta llena de incredulidad, señalando un poster muy actual de BG.5 de mi hermana. Asiento con mi cabeza en respuesta— . ¡Mi Dios, Kae! ¿Cómo puedes olvidar a un hombre así?

—Yo no lo hice. Es decir, yo no lo olvide solo no... lo sé —tartamudeo como una mojigata que nunca ha practicado sexo en su vida.

—Entonces... ¿Te reconoció? —pregunta Bridget con curiosidad mientras salimos de la habitación de Katherine y bajamos las escaleras de la casa de mis padres.

—Lo hizo. Creo que no lo tenía claro, pero lo hizo. Parecía una colegiala, no podía verlo sin sonrojarme.

—Eso es algo caliente, Kae.

—No, eso es algo patético para alguien que estuvo de piernas abiertas dando a luz delante de un chico que no conocía.

—Y dicho chico está ardiente como el infierno. Tan ardiente como Keith.

—Oh Dios, Brid, ahora no empieces a revelar tus fantasías con mi hermano, por favor.

—Creo que tienes mucha tensión sexual acumulada en tu cuerpo. Antes de embarazarte eras una persona que practicaba sexo continuamente y ahora llevas casi tres años y dos meses en castidad. Quizás deberías comprar uno de esos anillos o collares de "Estoy esperando al matrimonio". Solo que eres una perra sin corazón que no cree en los compromisos.

Bufo mientras tomo lo que necesito de la casa de mis padres y, tras cerrar la puerta, me dirijo a mi auto. Espero a que mi ardiente amiga suba al auto para ponerlo en marcha. Enciendo la estéreo y una canción de Maroon 5 inmediatamente se desliza por los parlantes, haciéndome sonreír. Adam Levine de seguro no necesita rogarme dos veces antes de arrojarme a una cama.

—¿Tenía buen culo? —me pregunta Bridget, subiendo y bajando sus cejas oscuras continuamente.

Muerdo mi labio inferior.

—No alcance a ver, pero apuesto mis dos sueldos a que tiene un excelente culo.

—Supongo que es cierto, un hombre con tanto atractivo debe tener un buen culo —me asegura Bridget, pasando una mano por su cabellera oscura—. ¿No lo extrañas Kaethennis?

—¿El qué? —pregunto, enfocando mi vista en la carretera.

Algo en el tono de voz de Bridget no me gusta.

—El ser la chica libre, la chica que gozaba de los placeres de la vida... el alma de las fiestas. Es decir, realmente amo la Kaethennis responsable, pero a veces me pregunto si no estás reprimiendo tus necesidades como mujer... Una parte de ti.

—¡Tonterías! —exclamo, apretando el volante con más fuerza de la necesaria—. Disfruté mi adolescencia, tanto que me embaracé de un bastardo. No necesito pasar por ello de nuevo, Bridget.

—Pero sí necesitas una buena ronda de sexo —protesta Bridget—. ¿Qué tal James?

Yo solo la ignoro, cansada de que todos intenten meterme a mi perfecto y atractivo compañero de trabajo por los ojos.

***

23 de Marzo de 2011.


H de Harry (BG.5 libro #1) Disponible en Librerías.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora