Capítulo Sesenta y Nueve

684K 54.8K 124K
                                    



CAPÍTULO SESENTA Y NUEVE

Oh, Dios, sé que estuve diciendo una y otra vez cuánto deseaba dar a la luz, pero ahora, justo ahora, que me desplazo en una silla de ruedas por los pasillos de alguna clínica ridículamente costosa a la que Harry me ha traído, no estoy tan ansiosa.

Quizás se debe al hecho de que estoy sintiendo que están taladrando mi vientre continuamente, maldición, incluso mi espalda. Además tengo esa ridícula sensación de que si no cierro mis piernas mi bebé podría escaparse de mi vagina.

Estoy tan desorientada mientras Harry da mis datos que no noto cuando una enfermera comienza a trasladarme, pero en cuanto me doy cuenta, doy un gritito aterrado al ver que estamos dejando a Harry atrás.

—Calma cariño, él vendrá en un momento.

Miro a mi alrededor alarmada mientras respiro continuamente, simplemente no puedo estar sola. Mi piel se siente fría y está transpirando de una manera increíble. Cuando siento movimiento a mi lado estiro mi mano inmediatamente, atrapando otra mano.

—Llama a mis padres, a Bridget y busca a mi novio, él ha desaparecido, por favor —imploro, alzo mi vista y me encuentro con los ojos azules de Harry viéndome con incredulidad y asombro.

—¿Será este el procedimiento cada vez que tengamos un hijo? Porque tienes un agarre de muerte, Kae.

No puedo evitar reír un poco aun cuando siento dolor, Harry se inclina hacia mí y besa mi frente, sin importarle que estoy sudorosa.

—Ya hice todas las llamadas nena, todos vendrán.

Asiento con mi cabeza mientras la enfermera retoma el rumbo de mi silla de ruedas y nos guía hacia una habitación, que desde luego no luce como el procedimiento por el cual pasé cuando di a luz a Dan.

—¿Dónde estoy?

—Aun no estás lo suficiente dilatada cariño, te pondremos cómoda y cuando estés lista la doctora vendrá a atenderte.

—¿Cómo se supone que se está cómoda cuando tienes un dolor como este? —cuestiono mientras, con la ayuda de Harry, ella logra depositarme sobre la camilla, que realmente parece una cama.

La enfermera ríe, de seguro está entreteniéndose con mi dolor, aprieto mis labios cuando siento una feroz puntada en la parte baja de mi espalda. Esto duele.

—¿Quieres que él salga para que te coloquemos la bata, cariño?

—¿Bromea? Es por él que estoy embarazada, créame, él ya lo ha visto todo de mí, que me vea una vez más no hace diferencia.

Harry ríe mientras con un pañuelo, que ni idea de dónde lo sacó, comienza a limpiar el sudor de mi rostro. Me doy cuenta que aun lleva la pañalera color lila con patitos bordados alrededor de su hombro y se ve caliente, sexy y hermoso.

—¿Por qué esa mirada? —me pregunta, sacando una coleta del bolsillo trasero de su pantalón y comenzando a recoger mi cabello en un moño alto, lo cual agradezco.

—Porque te ves muy bien con esa pañalera, mi amor.

La enfermera nos sonríe mientras comienza a desvestirme. Me deja completamente desnuda e intenta localizar la bata azul, Harry aprovecha la oportunidad para acariciar mi estómago crecido y luego besar el área.

—Extrañaré esto, pronto ya no estará —luego me sonríe—. Claro, siempre podemos poner con rapidez a otro bebé aquí.

—Claro, siempre puedes ponerte un condón cada vez que decidamos tener acción.

H de Harry (BG.5 libro #1) Disponible en Librerías.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora