Coqueteando Con La Realeza ♔ (Sin editar)

Capitulo 29: Plan

-Vengarte ¿cuántos años crees que tienes?

-Emma me consideras tu amiga.-

-Ehh si eso creo – una almohada me golpeo en mi cara -tu sabes que si entonces que vamos a hacer.

- Primero lleguemos a la clase. – se dio la vuelta y le devolví el almohadazo.

-¿Y cómo pretendes hacerlo? – dije camino a nuestra clase.

-No se la verdad, algo se me ocurrirá – miro hacia arriba.

-En serio Dylan me has hecho venir a clase con resaca para que me digas eso.

-Si ese look despeinado y gafas negras, te hacen ver regia. – suelta una carcajada que mantiene hasta la entrada de nuestra clase.

La clase de hoy no pudo ser más aburrida, el profesor no sabía ni siquiera de que hablaba, se la paso leyendo las diapositivas. Y para agregar yo estaba sentada en la primera fila, con dolor de cabeza, los focos apagados, pero sin poder dormir, por mi ubicación.

¡Bendita suerte la mía! que el aire me adormecía, juntos con los susurros de la teoría y poco a poco yo caía.

-BOOM- se escuchó como el profesor dejaba caer algunos libros en su escritorio, y me pregunte en que momento, me había entregado a los brazos de Morfeo y en que instante comenzó a llover.

Aunque en realidad eso ya no importa porque ya la clase había terminado, pero por la lluvia la mayoría había decidido no abandonar el aula. Muchos tenían dos horas libres entre esta clase y la siguiente, pero nosotras no, así que nos dirigimos al aula de historia universal – yupi! - Sarcasmo a nivel máximo.

-¿Emma que celebras? – Dylan con cara de desconcertada total.

-Ni yo sé – me detengo un segundo a mirar al pizarrón de noticias – sabes cuando uno piensa algo y dice otra cosa.

-Mnnn si –

-Bueno creo que esta es una de esas veces – dicho esto reanudamos nuestro camino hacia el salón.

- ¿Qué te parece poner su número en una página para homosexuales?

- ¿De qué me hablas? –

-¿De la venganza de que más?

-Ah todavía con eso pensé que ya lo habíamos superado, en fin no te parece demasiado–

-En realidad no, eso está bien para que lo piense dos veces antes de esposarme a la cama-

-Espera ¡que! ¿Amarrada? ¡Dylan! no sabía que lo del pseudomasoquismo era lo tuyo.

-Baja la voz y por favor Emma borra todos esos pensamiento pecaminosos de tu mente, no es lo que parece- me muestra sus palmas de la manos como diciendo detente.

-A no- alzo mi ceja - si a mí me esposan a una cama no creo que se precisamente para ehh hablar –

-Lo sé que suena mal pero no fue malo-

-Ya me imagino- me miro, como queriendo matarme.

-Emma ponte seria si quieres saber que paso entonces calla un momento – alzo mi dedo índice.

-Que quede claro solo por el hecho del chisme te escucho, no te perdonare que un paso tan importante en su relación no me lo hallas contado-

-Relación de qué relación hablas estoy tratando de contarte como...

-Recrearon 50 sombras de seguro-

-Emma trae tu mente devuelta estoy tratando de contarte algo importante. – Hice señas de cerrar la boca y ella prosiguió – prosigo entonces, me la pase amarrada con esposas a la cabecera de la cama toda la noche y con hambre, mientras el muy idiota estaba comiendo pizza al otro lado del salón.

-Como entonces terminaste así – me miro con cara de cálmate

-Bueno pues después de salir del bar paró un taxi que nos dejo en la casa de Santiago. Allá intentó hablar con conmigo pero en realidad no lo quise escuchar intente escapar como tres veces de la casa soy sincera fue exagerado pero eso no justifica lo que hizo después de que llame al 911 reportando un secuestro, fue entonces cuando me amarro al sofá del cuarto de invitados y me tapó la boca con cinta, llego la policía revisaron casi toda la casa para ese momento él ya me había movido a una especie de cuarto de invitados en el ático y amarrado a la cama que había allí. Así que no entraron donde me encontraba, luego simplemente me resigne y me dormí cuando desperté estaba en el cuarto principal y con el abrazándome, las esposas se había ido por lo que sigilosamente salí de sus brazos, llame un taxi y lo demás ya lo conoces.

-Llegaste con un dragón escupe fuego a la residencia. –

-Exacto-

-¿y no intento besarte ni una sola vez? –

-En realidad, si lo hizo, pero lo cacheteé y corrí y llame a la policía-

-Ahh ok –

-Si pero luego lo bese, para tratar de convencerlo de que me soltara que no iba a correr nuevamente –

-¿y que paso?

-Le mordí el labio, corrí y me atrapo así que no sirvió de nada, volvió esposarme. – Nos detuvimos en la puerta del salón - En fin creo que le dolerá más si simplemente lo ignoro.

-Si buena estrategia, la apruebo.

-¡Emma! ¿Qué clase de amiga eres?- ups - tú tienes que decir no Dylan no tienes que vengarte al valer tus derechos. –entró al aula del sr Levy conmigo siguiéndole los pasos

-¿Entonces que planeas? –le dije al sentarnos.

- ¿Que puede hacer rabiar a un hombre?- Susurro ella mientras el sr Levy trataba de proyectar la presentación, me pregunto ¿dónde anda? Miro hacia los lados buscando unos ojos verdes

- Ehhh no sé, ¿salir con su enemigo? – digo sin detenerme a pensar.

-El ni siquiera asiste a la universidad de dónde vas a sacar a un enemigo – sigo recorriendo mi mirado por todo el aula.

-Cierto, aquí no hay ninguno- me mira – que en realidad no lo pensé muy bien, ¿así que abortamos misión?-

-Ni muerta, se las tengo que cobrar. – nos quedamos en silencio como un minuto. - Ya sé cómo vamos a hacerle la vida imposible. Es decir vamos a escribirlo en una línea "caliente" homosexual creo que con eso se enojara más que suficiente. No hay cosa me que le duela a un hombre que sobreestimarle su sexualidad. Esto será épico. – termina diciéndolo con la mirada perdida.

Shhhh - el sr Levy nos mira con cara de amargado.