Mami Ben || BeVin

Secreto

Al llegar la medianoche ambos chicos subieron cansados hasta la habitación del castaño. Después de la confesión las cosas entre ambos se mantuvieron tranquilas, mucho más que antes pero no estaban seguros de exactamente qué más decir o qué más hacer y la verdad era que a esa hora lo único que realmente querían era dormir, estaban cansados.

Por alguna razón Kevin no podía evitar ver a Ben de una forma extraña y no se refiere a nada lujurioso sino por el hecho de la apariencia sumisa del chico. Sabía bien que hay muchas cosas que probablemente Ben estaba ocultando y quería descubrirlas, como lo que había sucedido aquella noche en la que se suponía que Ben se había desmayado y minutos más tarde terminó por levantarse y convertirse en Frío para después marcharse, lo cual le dejaba dos incógnitas; o Ben era muy bueno mintiendo —cosa que dudaba por los tic's en su ojos derecho— o realmente le ocurría algo que le impedía recordar lo que hacía antes, algo así como la amnesia o el sonambulismo.

Recostados bajo las mantas de la cama de Ben, Kevin decidió ya no darle más vueltas al asunto y dormir al lado del castaño quien al sentir el calor que emanaba no dudó en apegarse más a él y por su parte el chico más alto no dudó ni un momento en regresarle el abrazo. La posición les resultaba particularmente cómoda, así que de esa manera decidieron dejar todas sus preocupaciones para el amanecer.

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Al día siguiente Ben se despertó más  temprano de lo que él mismo hubiese querido, simplemente porque de nuevo las náuseas lo estaban molestando y provocaron que saliera corriendo en dirección al baño expulsando con dolor todo lo que pudo haber tenido en su estómago. De manera impresionante su despavorido desastre al levantarse y correr no fue lo suficiente para llamar la atención de Kevin porque al parecer tenía una tendencia de dormitar como un oso en plena hibernación, internamente el castaño agradeció eso, realmente eso le favorecía ahora más que nunca.

Una vez que estuvo seguro de que las náuseas se calmaron, pudo lavar sus dientes sin que sea una acción en vano y salió del cuarto de baño, retomando camino hacia su cama donde se encontró a Kevin aun durmiendo.

Para el alrededor de las 11:30 de la mañana ambos se despertaron ya totalmente dispuestos a levantarse de la cama. Estaban totalmente consciente de todo lo que había sucedido una noche antes, por lo cual no hubo ni un atisbo de pena cuando al despertar lo primero que hicieron sus ojos fue encontrarse con la mirada contraria. Bajaron a la sala de la casa antes de que Ben desviara su camino a la cocina para preparar el desayuno. Para Kevin era extraño que los padres de Ben no estuvieran, pero más extraño aún le era que este último no parecía ni preocupado por ello, a pesar de eso estaba agradecido con su ausencia en esos momentos.

El desayuno pasó tranquilo, no había de qué preocuparse en un día tan cálido y sin misiones heroicas como ese, no tenían mucho que hacer en realidad por lo que decidieron tomarse un tiempo y sentarse a ver televisión acurrucados como la noche anterior. De vez en cuando Ben entrelazaba sus dedos con los de Kevin y daba un ligero apretón que hacía al más alto voltear, sonreirle y darle un beso en la mejilla cosa a la que el castaño se estaba acostumbrando bastante bien para ser de hecho la primera vez que tenían ese tipo de acciones románticas con el contrario. No se sentían extraños ni mucho menos a pesar de no haber aclarado si eran o no algo en ese momento, simplemente habían despertado actuando como pareja y Ben deseaba que eso no acabara en ningún momento.

Por horas todo fue "miel sobre hojuelas". Un día hermoso, soleado y lleno de aire para disfrutar en pareja, parecía que nada, absolutamente nada podría echar a perder tan magnífico momento, más nunca esperaron que fuese la misma Gwen quien llegara a la casa de Ben para arruinar su pequeña burbuja de amor. Ella tocó la puerta de la casa donde Kevin había pasado la noche y Ben seguía en pijama; ni siquiera podría mentir porque el ostentoso auto de Levin estaba aparcado frente a su casa.

Así que apresurado Benjamin trató de subir a cambiarse pero su prima abrió la puerta lo cual lo dejó más que  desconcertado puesto que ella no tenía llaves.

La cara de Gwen, por otro lado fue una de total sorpresa al momento de fijarse en ambos chicos.

—¿Kevin? ¿Qué haces con Ben tan temprano?— Preguntó poniendo sus manos en sus caderas, advirtiendo claramente que estaba molesta y expectante de una buena respuesta.

—Pues... Me invitó a desayunar.—El aludido simplemente contestó moviendo sus hombros de arriba hacia abajo levemente como si le restara interés.

Ben se puso nervioso ante la situación, sin embargo asintió y puso una leve sonrisa en sus labios que tembló cuando la mirada inquisidora de la mujer se posó únicamente en él como si esperara que dijera algo más para recriminarle cualquier cosa. Mentalmente tanto Ben como Kevin estaban rogando que el tic de Ben no arruinara todo.

—Lo siento Gwen, hubiera guardado comida si hubiera sabido que ibas a venir, p-pero como no te esperábamos pues, todo se acabó.— Ben se apresuró a contestar claramente nervioso, aunque en su tono de voz había un deje de molestia que fácilmente era notada por Kevin debido a la tensa expresión de su rostro, de cualquier forma eso pasó desapercibido para Gwen. Levin estaba seguro de que si la situación no fuese esa, ni lo involucrara probablemente se reiría, pero en esos momentos sólo quería que Gwen se fuera.

La pelirroja achicó los ojos con molestia antes de cerrarlos para calmarse un momento y pensar mejor las cosas. Claro que ese tiempo lo ocuparon Kevin y Ben para darse una fugaz mirada cómplice que claramente significaba una cosa: "Esto queda en secreto".

No necesitaban problemas por el momento, aún si lo que tenían no era una relación formal querían mantenerse al margen lo suficiente para aclarar las cosas entre ellos y avanzar poco a poco.

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No olviden comentar y votar si les gusta la historia. Me ayudarían mucho para saber si quieren que continúe.