Capítulo 27

2.5K 228 25
                                    

Ya hace una semana que hicimos el show en Toronto y después fuimos directos a Vancouver. Si, hasta la otra punta del país. En Canadá solo hicimos dos shows pero espero volver pronto de nuevo. Sammy, Nate y Maider se fueron hace dos días. Los dos primeros a Los Ángeles, y mi mejor amiga a San Sebastián. Aunque en unas semanas volveremos a verles de nuevo a los chicos cuando vayamos a Los Ángeles, no sé cuando volveré a ver a la morena. Espero que pronto. Hace apenas unos días que se fue y ya la echo mucho de menos, aunque bueno, no soy la única. Creo que le costó más a Shawn despedirse de ella que a mí.
En serio, esos dos tienen que acabar juntos. Aunque según ellos no se besaron, nadie les cree. Están hechos el uno para el otro.

Por otra parte, todo va "bien" entre Nash y yo. Volvimos a estar en "guerra" pero en el sentido positivo. Siempre estamos haciendo bromas el uno al otro. Por ejemplo, hoy me desperté y tenía la cara llena de pasta de dientes, y después vi en su vine cómo hacia su obra maestra... pero yo tampoco me quedo atrás, sus zapatos preferidos ahora son sandalias jeje. Tal vez me pasé un poquito, por eso voy a comprarle unos zapatos nuevos.

-¡SIII! ¡LLEGAMOS A MIAMI!-Gritaba Matt junto a Hayes mientras iban saltando a recoger las maletas con una enorme sonrisa en el rostro.

-¡HOY VA HABER UNA FIESTA QUE FLIPÁIS!-Gritó Tay emocionado.

-¡GENIAL!-Exclamé sonriente y todos, incluso Matt y Hayes que dejaron de saltar, me miraron seriamente.

-Tú no, Leire.-Hablaron a la vez y abrí la boca indignada.

-¡¿Pero por qué?!

Todos me miraron con una ceja alzada incrédulo.

-Os lo prometo que no beberé mucho. Bueno, vale nada. No beberé nada.-gruñí al ver sus miradas de desaprobación.

-No. Tú te quedas en casa.-Me ordenó Cam.

Sonreí con superioridad y me crucé de brazos.

-No me pueden dejar sola en casa. Soy menor. Y vosotros seréis unos ilegales si hacéis eso.-ladeé la cabeza y todos se miraron entre ellos.

Ellos ya son ilegales, pero bueno.

-Iré a la fiesta.-Aseguré con una sonrisa.

-No. Yo me quedaré contigo.

Miré a Aaron con los ojos entrecerrados.

-No.

-Si-asintió.

-He dicho que no.

-Y yo que sí.-me sonrió con un poco de burla.

Gruñí.

-¡Me sacáis de quicio!-dije antes de comenzar a caminar hasta las maletas.

-¡Pero nos amas!-escuché que gritaban.

-¡Tampoco os creáis mucho!

(.../...)

-Bien ¿qué quieres hacer?-me preguntó el moreno acomodándose a mi lado en el sofá.

-Ir a la fiesta-refunfuñé.

-¿Aparte de eso?

-Nada.

-Oh vamos. Deja de comportarte como una niña-se burló-Si no hubieras bebido tanto la última vez, no estarías aquí conmigo.

Le miré con una sonrisa.

-¿Lo dices como si fuera algo malo o algo bueno?

-Depende por dónde le mires-se encogió de hombros divertido.

Sonreí y sin pensarmelo mucho besé sus labios carnosos.

No puedo creer todo lo que está pasando. Es como si fuera un sueño, y tengo miedo de despertarme en cualquier momento.

Mi vida siempre ha sido una mierda y ahora todo va... tan bien. Es cierto que he tenido alguna que otra problema, pero nada comparado con todo lo que he vivido los años anteriores.

Siento que por fin tengo gente que se preocupa por mí y me quiere tal como soy. Siempre hay alguien que me apoya haga lo que haga, y no me echan en cara cada cosa que hago mal.

-¿Ves?-sonrió contra mis labios-Hasta las peores cosas, siempre tienen un lado bueno.-me susurró antes de volver a besarme.

Esta vez el beso era más intenso y apasionado. Sentía miles de mariposas en mi estómago haciéndome cosquillas.

Aún no somos novios, pero la verdad si me pidiera no lo dudaría ni un segundo en decirle que si.

No estoy enamorada de él. Eso está más que claro. Es cierto que le conozco desde hace varios años por los videos y eso, pero solo son unos meses desde que le vi por primera vez en persona y aunque siempre me llamó la atención, jamás de los jamases pensé que él se fijaría en mí. Digo, yo solo soy una chica normal, no tengo nada especial. Él en cambio, vuelve loca a millones de chicas. Tiene unos ojos verdes preciosos que te transmiten dulzura y su risa... me encanta cuando se ríe, hace de una manera tan natural que siempre hace que te sientas cómoda a su lado.

-Que conste que estás acabando conmigo-me dijo con la respiración agitada.

Me mordí el labio inferior con una pequeña sonrisa.

-Correción. Acabaste conmigo.-dijo e hizo el gesto de que estaba muerto.

-Serás idiota-reí y le golpeé el brazo suavemente para después volver a unir mis labios con los suyos, esta vez de una manera más tranquila y delicada.

_____________________________________

¡Muchas gracias a todas por leer! Lo siento mucho, sé que es super corto, pero hacia una semana que no actualizaba y aunque sea quise publicar uno cortito. La próxima será más lara!

Espero que os haya gustado!

Os amo más que a la nutella personitas!! ♡♡

Y nada volvió a ser igual... MAGCONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora