‹ POV YOONGI ›
« —Cuándo necesites un paseo, llámame y vendré, Yoongi.—dijo mientras se volvía a poner su casco— ¿Lo harías?
Pude ver su sonrisa escondida detrás del visor.
—Depende...—respondí— Nos vemos.—me despedí de él. »
Arrojé el cigarro que estaba en mis labios sobre el suelo y lo pisé, seguí caminando, recorriendo toda la ciudad mejor dicho. Tenía seco mis labios, desde que tuve aquella conversación no he bebido nada de líquidos, ni he comida nada, solamente consumí tabaco.
Me enojé conmigo mismo y apreté mi puño, ¿estoy haciendo una estupidez por esa conversación? No dejaré que esto me consuma.
Decidí irme a mi departamento pero cuando comencé a ver a mi alrededor no conocía nada. No conocía en qué calle estaba, no sabía en dónde estaba parado.
''Vamos en dónde el viento nos lleve'' Y a mí me llevó lejos, o solamente yo caminé sin dar importancia a nada mientras estaba hundido en mis estúpidos pensamientos.
Estoy perdido. La frutilla de la torta. Lo único que faltaba para que este día fuese peor.
Empecé a caminar mientras mis nervios aumentaban, odio perderme.
Esto me hace recordar cuándo estaba en el supermercado, me perdí de mi madre, y casi lloré, pero desde pequeño ya era frío e insensible y me quedé sentado en un juego esperando que me encontraran.
Pero como soy mayor, mi madre ni se molestará en buscarme, viejos tiempos...
Ni siquiera sabía a quién llamar, ¿quién se molestará por mí?
Vi a una chica caminando hacia mi dirección, parecía una estudiante y me acerqué a preguntarle.
—Disculpa, ¿qué calle es esta?—pregunté siendo ''amable''.
—Em, yo no sé como se llaman las calles, disculpa. —sonrió— Pero está cerca del cementerio, allí.—apuntó una esquina— Ahí hay una cementerio, si te sirve como reverencia.
¿¡Estoy cerca de una maldito cementerio!?
—Ah...—miré aquella esquina— Gracias.
—No, de nada.—sonrió y se fue.
Ahora... No sé qué mierda hago.
Caminé hacia el cementerio y allí entré, todas las tumbas eran lujosas, bien mantenidas, una que otras rosas marchitas y algunas nuevas y hermosas a simple vista. Inicié a caminar por ahí, me metí dentro de unos callejones rodeado de tumbas muy bellas cuándo sentí mi celular vibrar y lo agarré.
Era un mensaje de Jimin.
« ¿Estás en tu casa?
Te has olvidado algo en mi motocicleta y quiero ir a devolvértelo. »
« Estoy en un cementerio.» respondí.
« ¿Te hablé en mal momento? »
« No, de hecho creo que es bueno... Me he perdido y entré sin pensar en un cementerio.»
« ¿Sabes cómo se llama el cementerio? »
« Ni siquiera lo sé. Es un cementerio lujoso, creo que aquí entierran a multimillonarios. »
« Creo que sé en dónde estás... Y estás en el otro lado de la ciudad, casi yendo del país »
