23

716 92 14
                                    

— ¿No sabes exactamente quién era?— O'Neal le pregunta.

— La verdad no. Hay tantas personas que quisieran matarme que saber con exactitud quienes son es imposible. Amaya creo que todo esto debería ser trabajo tuyo— me dice enojado.

— Richard, yo misma no sé nada. Está Cristian, Matt, Jhon y quien sabe quienes más.

— ¿No sospechas de tu mamá también? ¿Terra no se llama?— me mira fijo.

— Sí— le afirmo—. ¿Qué tiene que ver ella?

— Me la encontré en el supermercado y me saludó con mucho amor, ¿no que todos en tu familia me odian?

— Richard, si te odian no importa, ¿acaso no es importante lo que sienta por ti?

— Lo dejo solos chicos— Bryan sale de la casa.

— No me importa a la verdad— me contesta cínicamente—. Tampoco importa si siento algo o no por ti.

— ¿Qué te está pasando Richard?— le tomo del brazo y me empuja.

— Me cansé Amaya, ya estoy harto de todo esto. Pienso que tu familia y tú están locas y que solamente me estabas usando para que no sé cuando entregarme y matarme, ¿era hoy no? ¿Hoy era que me iban a matar?

— No sé de qué demonios me estás hablando Richard. Yo me hice enemiga de todas las porquerias que dicen que son mi familia, maté a mi hermana por llevarse a uno de tus amigos, maté a quien fue mi mejor amiga de infancia, ¡POR TI! Y aún así crees que estoy en contra tuya. Richard, yo no te hubieses dejado pasar una noche con vida si estuvieras a mi cargo y lo estuviste pero yo te perdoné, me la jugué por ti, porque sentí algo especial cuando te vi, y cuando me hiciste tuya por primera vez, fue ahí que me di cuenta de que eras la persona con la que debía estar.

— No me vengas con esas estupideces Amaya, cosas sin sentido— se levanta enfadado—. Me iré a recortar.

Estaba confundida, no sé qué demonios estaba pasando por la cabeza de Richard.

Él subió a "recostarse".

En menos de 20 minutos había bajado, aún seguía enojado.

— Me imagino que ya te haz calmado— le digo.

— No Amaya— al parecer si más molesto que nunca.

— Richard, pienso que lo que pasó ahorita fue solo por el susto.

— Ya lo pensé y muy bien, desde que te conocí mi vida ha corrido demasiado peligro, ya me cansé Amaya de que me estén persiguiendo, de que yo sea el enemigo de un sinnúmero de gente narcotraficante y yo sin saber porqué. Resulta que termino siendo secuestrado por una loca de la cual termino enamorandome...

— ¡Richard, ya basta!— mis ojos se empiezan a cristalizar. Por alguna razón todo lo que decía que me estaba doliendo demasiado.

— Amaya, sabes bien lo que está pasando. Perdón pero mi vida contigo corre peligro y sé que si sigo aquí terminaré muerto pronto. Lo mejor que tienes que hacer es olvidarte de mí y yo de ti, si quieres de pues de ésta estúpida conversación vete a los brazos de Jhon y termina casándote con él de una vez por todas.

— Richard, esto debe tener una solución, si en verdad queremos estar juntos no importa Cristian, ni Pedro, ni Matt, ni Jhon, ni Terra; podremos salir adelante juntos, amandonos.

— Como va esto, no tiene ninguna solución. Yo a tu lado, que sólo ha sido un mes, he sufrido tanto que mis años de vida jamás he tenido.

— ¡Esto pasó por ser muy estúpida. Yo no debí fijarme en ti, yo debí matarte desde que Cristian me dio la orden!— le grito llorando.

— ¿No crees que fuimos muy rápido? Ya al segundo o tercer día de conocernos ya tuvimos sexo, ¿qué se puede esperar de una chica tan rápida como tú?

— ¡Idiota!— le pego una bofetada—. Yo al menos sentí algo por ti, se ve que el que estuvo jugando todo este tiempo conmigo fuiste tú. No te importó lo que tuvimos, y por eso no te voy a tener al tanto de algo que tal vez te interese.

— ¿Qué es eso que tal vez me pueda interesar?

— No te voy a decir Richard.

— Deja de ser tan dramática— se levanta y va a la habitación y recoge sus ropas—. Me voy Amaya.

— Richard, por favor no te vayas— no le quería rogar que se quedara pero no lo podía perder, no así no.

— Amaya, ¿no entiendes? Lo nuestro se acabó— me dices mirándome a los ojos—. Terminamos Amaya, para siempre.

Mi Objetivo |Richard Camacho|Where stories live. Discover now