28

814 89 27
                                    

Llegó el día en el que Richard y yo acordamos juntarnos.

— ¿Por qué me dijiste que me levantara tan temprano?— Richard tenía un sueño como si hubiera pasado la noche entera despierto.

— A penas son las 9 de la mañana, Richard— le doy un pecozón en la cabeza para que de avive—. Ayúdame a subir éstas cajas a la camioneta.

Richard sube las cajas a la camioneta de Sebastián.

— Listo amiga— me sonrió con timidez.

— Así mismo, amigo— le devuelvo la sonrisa.

Nos subimos a la camioneta. Sebastián nos llevó a un lugar medio abandonado. Me bajé sin pensarlo, Richard seguía dudando si bajarse o no.

— ¿Me puedes explicar que vamos hacer acá?— Richard queda algo decepcionado por como ve el lugar.

— Hoy es 6 de enero, día de los reyes, donde los padres les dan a sus hijos todo los que estos les pidan pero... Existen niños huérfanos que no tienen quien les de una muñeca ni un carrito. Por eso quiero entretenerlos con tu ayuda, si me lo permites.

— ¿En serio?— se queda sorprendido—. Amaya, haz tenido una grandiosa idea amiga.

— Ya no me digas amiga por favor, que me molesta— le digo furiosa—. No me acostumbro a esto de ser "amigos".

— Perdona, pensé que era una buena idea para olvidarnos el uno del otro.

— Richard, yo jamás te voy a olvidar y menos que ahora sé que estoy llevando en mí vientre un hijo nuestro.

— Tienes razón Amaya... Perdón— se disculpa.

— Ayuda con las cajas— toco la puerta del lugar.

Richard con ayuda de Sebastián entran las cajas, los niños se quedan sorprendidos y emocionados al ver como le dábamos esos pequeños obsequios que para ellos eran grandes.

— ¿Podrían quedarse un rato más?— pregunta la coordinadora del lugar—. Podrían montarles un pequeño show, eso sí se los agradecería.

— Claro— le sonrío y salgo corriendo a buscar a Richard—. Necesitamos entretener a los niños de alguna manera y yo no puedo porque lo único que sé es como cargar un arma y los niños no pueden tener juegos bélicos y otra cosa es porque los niños me ponen sensibles, especialmente los más pequeños.

— No te preocupes, yo les voy a cantar— Richard sube al pequeño escenario a tocar el piano—. Saludos niños. Quiero dedicarle ésta canción a todos ustedes y quiero que sepan que las pequeñas cosas son las que más se valoran cuando viene del corazón, disfruten.

Los niños aplauden y Richard comienza a tocar.

— Como olvidar el día en que nos conocimos. El primer beso después de tanto rogar. Las piedras que nos aventaron al camino y como todo lo pudimos superar. Al fin cumplimos todo lo que prometimos y era envidiable nuestra estabilidad.
Siempre alegres, siempre tan y tan unidos, nada nos iba a separar. Y yo no entiendo, todo parecía tan perfecto,
eramos el uno para el otro, no existía amor como el de nosotros. Y ahora de repente… Tú te me vas (Te me vas). Y me sonríes pidiendo una amistad (Te me vas). Entro al colegio y no me puedo concentrar. Mi corazón se me parte por la mitad de solo pensar que te vas (Te me vas) Tú te me vas (Te me vas) 
Sales corriendo, te rindes y ya (Te me vas). No hay explicaciones, no hay oportunidad. Mi corazón se me parte por la mitad de solo pensar que te vas (Te me vas). Te confieso que sin ti no he podido dormir, tu olor sigue en mi ropa baby yo te siento aquí, cuando en eso no te vi, yo me enamoré de ti y ahora dices que te vas y ya yo no sé qué decir. Dime qué pasó con aquella promesa 
Por favor regresa tú eres la única baby que me interesa. Puse las cartas sobre la mesa te lo juro mi princesa, tú eres la pieza que le falta a mi rompecabezas. Tú te me vas (Te me vas). Y me sonríes pidiendo una amistad (Te me vas). Entro al colegio y no me puedo concentra. Mi corazón se me parte por la mitad de solo pensar que te vas (Te me vas) 

Richard no dejó de mirarme ni un segundo en toda la canción, sabía que me la estaba dedicando, que tenía que ver con nosotros. No aguanté más y subí al escenario.

— Te amo Richard— le digo asustada y bajo de allí.

Salgo a tomar algo de aire.

— Te amo Amaya— Richard se pone detrás de mí—. No puedo soportar ser tu amigo, yo quiero algo más entre nosotros, te amo.

— Yo quiero que estemos juntos amor— le susurro rosando nuestros labios.

— ¿Volverías a ser mi novia?— me besa antes de que le reonda.

— Sí mi amor— le vuelvo a besar—. Novios de nuevo.

Mi Objetivo |Richard Camacho|Where stories live. Discover now