El Artículo del Amor (Camren)

Capítulo 34

Capítulo 34

Lauren POV

Decir que estaba nerviosa era poco. Sentía que mis órganos saldrían por mi boca para que después llegara un Cuervo y se terminará el resto de mi cuerpo, sí, soy extremista pero es que en este momento de mi vida lo extremo va conmigo.

Y es que después de todo el asunto con Austin, la cita que tenía planeada había quedado en el olvido. Mucho fue porque Camila no quería que su loco ex novio provocara una escena de celos frente a todo el cuerpo estudiantil de la universidad.

Mi situación con respecto al imbécil que estaba tras de mí, había apaciguado cualquiera que fuera su plan, puesto que desde el último cometido hacia mí, no habíamos sabido nada de él, así mismo este no había hecho algo extravagante para llamar la atención.

Volviendo a mi tema con Camila, la situación estaba en pausa pero eso no significaba que todo con respecto a ella estuviera de la misma forma. Las miradas cómplices era ahora nuestro sello de garantía, tratábamos que estas fueran lo más discretas posibles sin embargo fallábamos en el intento.

Pero la verdad era bastante obvió el hecho de que yo me moría por Camila, todos lo notaban, todos lo sabían, negarlo sería simplemente una pérdida de tiempo.

¿Cómo negar algo que es muy obvio para los demás?

En cuestión con nuestra familia, los padres de Camila se molestaron al enterarse de la conducta de Austin en cuestión de Camila y por supuesto que se enojaron cuando me habían visto la cara de la manera en la que me dejo, sin embargo todo eso pasaba a segundo plano al recibir los buenos comentarios de Alejandro con respecto al cometido de defender a su pequeña princesa.

Mi madre por otro lado estaba que no la calentaba ni el mismo sol. Ante los intentos fallidos de mi padre tratándola de calmarla, mi madre seguía absorta de ver como un chico había sido capaz de pegarle a una chica pero al mismo tiempo de cómo había defendido a Camila y como me había peleado por ella.

Ambos de nuestros hermanos, habían creado un sin fin de bromas alrededor de nuestra situación, sin embargo y más allá del tono cómico que ambos empleaban, los dos sabían la verdadera situación en torno a nosotras dos.

— ¿En serio, Lauren? —Mire a Lea bastante confundida—Camila es la persona más sencilla en el mundo. A ella no la vas a conquistar con cenas en restaurantes súper finos o paseos en Yates súper elegantes, mi pequeña hermana sería feliz yendo al basurero de Miami contigo, así de simple es mi hermana.

—Ya pero, es Camila—ahora era el turno de Lea de mirarme confundida—Yo quiero que todo sea perfecto, que ella sepa cuanto en vedad quiero esto.

Lea sonrió y me miro- Créeme cuando te digo que Camila es más sobre las pequeñas cosas y los detalles que las cosas grandes y extravagantes.

—Entonces… ¿Un paseo por la playa, una cena, una rosa y de vuelta a casa?

—Una rosa, una cena, un paseo por la playa y de vuelta a casa—término de decirme y yo sonreí.

Tenía que salir todo perfecto

••

Bien Lauren, sólo tienes que tocar la puerta, no es como sí no lo hallas hecho antes. Vamos, Lauren tu puedes, joder me siento como Anna en la película Frozen cuando esta está a punto de ver a su hermana. Siento que en cualquier momento Olaf vendrá y preguntará sí se tocar una maldita puerta.

Ok Jáuregui, tu puedes hacerlo. Allá vamos.

Toqué la puerta tres veces y enseguida fue abierta. Sentí mis mejillas arder por la vergüenza al ver a Alejandro sonriente con su mirada adherida al pequeño ramo de 15 rosas que llevaba en mis manos.