XXVI

6.7K 620 152
                                    


Días después, Louis comenzó a sentirse mal pero lo achacó al cansancio, por lo que hizo caso omiso y aguantó en silencio.

Sin embargo, una madrugada ya no lo soportó más pero a pesar de que intentó localizar a Harry este no le contestó.

Muy adolorido y asustado, finalmente llamó a su amigo Ed, quién estaba dormido profundamente, ya que el pobre se había pasado todo el día de aquí para allá buscando trabajo sin ninguna suerte.

El pelirrojo lo ayudó a meterse en su coche y rápidamente lo llevó al hospital y cuando al fin llegaron, se lo llevaron y le hicieron todo tipo de pruebas, hasta que unas horas después, le dijeron que tenía anemia pero además de eso, este descubrió algo inesperado que lo dejó en shock.

El médico felicitó a ambos cuando los despidió, por lo que Ed que lo había estado esperado fuera en la sala, se quedó muy sorprendido pues no entendió nada.

Camino a casa, ninguno de los dos habló, ya que el ojiazul no paró de llorar y el pelirrojo solo lo miraba por el rabillo del ojo.

Louis estaba muy angustiado y necesitaba a su alfa pero éste no estaba localizable y no sabía que era lo que le había pasado.

De regreso al motel pararon en una farmacia para coger los medicamentos que el médico le había recetado, luego Ed ayudó a Louis a acostarse de nuevo y se quedó a su lado el resto de la noche, hasta que por la mañana se despertó llamando a Harry.

...—Siento que él no te haya llamado en toda la noche pero yo ya me tengo que ir—se lamentó el pelirrojo—… Debo seguir enviando mi currículum y buscando trabajo, necesito ganar dinero o tendré que irme de aquí.

—No, por favor... Tú eres el único amigo que tengo, le diremos a Harry que te dé trabajo en una empresa, seguro que tiene algo para ti pero no permitiré que te vayas... Tú eres como mi familia.

—Louis yo soy profesor... ¿qué voy a saber yo de las temas de una empresa?, no digas tonterías... Anda, desayuna algo y no olvides tomarte la medicina, debes cuidarte muy bien y no te preocupes por tu alfa, seguro que aparecerá.

El ojiazul se quedó muy pensativo sentado en su cama, el resto de la mañana pues por un lado estaba feliz porque no tenía nada grave pero por otro, se le añadía un problema a todos los que tenían.

Además, intuía que por parte de los hijos del ojiverde la noticia no sería bien recibida, ya que era todo muy precipitado.

Mientras en la casa de los Styles, los más jóvenes bajaron para desayunar, mientras que Harry agotado de esperarles toda la noche, intentaba reunir el valor para bajar y contarles lo que tenía atragantado en la garganta desde días atrás.

Este respiró hondo y al fin salió decidido de su habitación, entonces bajó las escaleras y se sentó a la mesa junto a los chicos.

...—Hijos... debo decirnos algo importante pero no sé cómo os lo vais a tomar... La verdad me da mucho miedo pero no quiero que os enteréis por terceras personas, ya que al parecer es lo que puede pasar.

—Tranquilo papá, di lo que sea yo no voy a juzgarte— dijo Anne tranquilamente comiéndose sus tostadas.

—Gracias hija.

—¿Qué es lo que pasa papá?, no nos asustes, ¿Pasó algo en la empresa?, ¿Es por mi culpa?— preguntó Anthony parando de comer su tostada.

—No hijo, no es de la empresa y mucho menos es culpa tuya.

—Habla entonces papá, me estoy poniendo nervioso— habló Adrián también.

—Es que no es fácil y temo que esto que tenemos ahora se esfume.

—Por Dios, habla de una vez papá— Alice bufó nerviosa.

—Quieres callarlle...¿Acaso no escuchas que es difícil para él? —le recriminó Anne a su hermana.

—Está bien...emm, bueno veréis...es que... como habréis comprobado ya no bebo y estoy más contento y activo....emm... e-eso se debe a que alguien ha entrado en mi vida y me hace feliz, a pesar del poco tiempo que nos dedicamos—comenzó diciendo el alfa.

Anne sonreía porque sabía perfectamente que iba a decir su padre y estaba ansiosa de que lo soltase ya y aunque seguro que sus hermanos no lo entenderían, su padre y Louis no se merecían amarse a escondidas, tenían todo el derecho a mostrar su amor.

—¿De qué estás hablando, papá?—preguntó Adrián muy intrigado.

—Bien..emm.., quiero deciros que finalmente ya hemos intimado y hasta lleva mi mordida en su cuello—prosiguió Harry—... Sé que no os hace gracia....emm... pe-pero tenéis que entender que vosotros estáis encontrando a vuestras parejas y pronto os iréis ....y-y yo me quedaré solo y viejo.

—Venga papá… dinos ya quién es la afortunada, ¿Es alguien de tu empresa? —preguntó entonces Anthony.

—No, es...es...es...—balbuceó nervioso el alfa pues ya no había vuelta atrás y estaba aterrado.

—Ay venga dilo ya... mientras no sea Louis y nos avergüences, dará igual—dijo entonces Alice chasqueando la lengua.

Harry y Anne la miraron rápidamente, por lo que los demás pudieron deducir que si se trataba del omega ojiazul.

—¿Qué?, ¿Cómo?, ¿Es Louis?

—Siento que pienses que te avergüenzo, Alice— habló el alfa muy apenado mirando al resto sus hijos y esperando sus duras palabras—… si es Louis... Él es el omega que me hace inmensamente feliz.

—Me alegro por vosotros papá y estoy feliz de que por fin hayas tenido el valor de perseguir tus deseos y luches por tu felicidad—dijo Anne sonriente levantándose y besando a su padre.

Anthony también se levantó y por sorpresa lo abrazó.

—Tienes todo mi apoyo papá y siento no habértelo dado antes.… Tienes razón, tú también te mereces tener el amor contigo.

—Gra-Gracias, hijo—dijo Harry muy emocionado.

Alice y Adrián se miraron uno al otro muy serios como buscando ser el primero en hablar pero finalmente fue el joven alfa, el cual cogió su muleta y se acercó a su padre.

Harry y sus hermanos se esperaban una lluvia de quejas y maldiciones pero en lugar de eso, éste le tendió la mano y sonrió.

—Me alegro mucho por vosotros, papá y perdóname todo lo que te dije... Fui muy egoísta y tú tenías razón, todos merecemos ser felices y encontrar a nuestra pareja, ahora lo sé... Me hago a la idea de lo que sientes por Louis, porque yo también lo siento lo mismo por Shawn.

—G-Gracias hijo, mu-muchas gracias—dijo Harry realmente emocionado.

De repente, Alice se levantó y se acercó a su padre y a sus hermanos bastante molesta.

—Sois unos estúpidos y todo eso del destinado es cuento, ¿Acaso no lo veis?—espetó furiosa—… Esto tan sólo es un calentón y un capricho por un chico que puede ser tu hijo, ¡Yo jamás voy a aceptarlo!.

—————

No olvidéis votar y comentar

6. Mi verdadero alfa.- L.S.-Omegaverse.💗 Terminada.Where stories live. Discover now