Bittersweet

61 3 0
                                    

"Tal vez hubiera sido mejor 

Si no hubiera sido cualquier cosa, desde el inicio" -Super Junior


Un abismo de culpa se apoderó de mi cuerpo cuando desperté a causa del calor producido por toda la ropa que llevaba conmigo y ver a KyuHyun junto mío. Me separé de él yendo a apagar las luces aún prendidas y ponerme algo más cómodo para dormir. Era de madrugada y el cielo yacía oscuro por lo que regresé a la habitación.

Como pude moví el pesado cuerpo de KyuHyun bajo la única cobija que había sobre el colchón y hasta el otro lado me recosté. Sé que no conciliaría el sueño tan pronto mi cabeza tocó la almohada.

Hace siete años que no dormía con nadie más que conmigo misma.

SungMin fue el único hombre que estuvo conmigo en la misma cama; con KyuHyun en cambio, si alguna vez dormí frente de él es porque seguro alguno estuvo enfermo y uno cuido del otro. Me resultaba raro estar en esta posición con mi mejor amigo.

Mi mejor amigo que había cambiado realmente, si antes pensaba que él era maduro para su edad, hoy tenía una nueva opinión de él. De verdad me quería, saber que hizo esas cosas en un intento de hallarme provocaba que lo quisiera todavía más. Es cierto que era la persona más importante de mi vida, estuvo a mi lado cinco largos años y esperarme otros siete años hacía que su importancia aumentara notoriamente.

Me di la vuelta sobre mi mismo cuerpo para observarlo con la poca intensidad de luz que atravesaba de la ventana, la luna nos acompañaba aún.

—KyuHyun ¿por qué lo hiciste? —Susurré más fuerte de lo que pensé— ¿por qué me buscaste? —Mi mano recorría su perfil al igual que mi mirada lo hacía—. ¿Por qué tú y no SungMin?

Era la pregunta que me hice desde que llegué, misma que yo misma podía responder. Siempre tendría la amistad incondicional que KyuHyun me brindaba, al contrario del amor de SungMin, ese lo había perdido rotundamente.

Lo descubrí cuando vi su fría actitud hacia mí en el café y lo confirmé al verlo irse durante la comida. Me odiaba y yo me odiaba por haber conseguido aquello.

Con aquel pensamiento me quedé dormida con mi mano sobre el pecho de mi amigo, necesitaba calor humano desde hace mucho y al parecer al único que tenía era él.

Desperté gracias a la ausencia de alguien junto de mí, resultaba raro decirlo así puesto que había dormido durante siete años sola pero al pasar la mano por la fría cama supe que ya no estaba allí.

Me senté y froté mis ojos bostezando una vez más. Dispuse mi cuerpo a levantarse pero una voz me llamó desde el otro lado de la habitación.

—Al fin despiertas —expresó con un notorio tono de reproche—. Me tomé la libertad de ir por provisiones para tu triste refrigerador y también fui a cambiarme a los dormitorios —explicó con una sonrisa brillante y alegre—. Báñate que el desayuno estará listo en unos minutos.

—¿Estás cocinando?

Él cocinando no era buena idea, una vez casi me intoxica con tanta sal que le echó al ramen, también recuerdo cuando le puso aceite de más al bulgogi y se le quemó la carne. Tenía que ir a supervisar eso.

—Deja, yo lo hago —refuté mientras me levantaba e iba tras de él, sin embargo me detuvo antes de que pudiera cruzar el umbral de la habitación.

—¡Alto ahí!

Tomó mi celular del mueble que yacía allí y me lo tendió en la mano.

—Te llamaron, no sé quién y ni revisé porque no parecía urgente, sólo llamaron una vez. Fue lo que te despertó —reí y asentí pensando en mi sueño ligero—. Haz tu llamada en lo que yo termino acá —me dijo como buen mandón.

« 7 Years Of Love »Where stories live. Discover now