Parte IV: Sexy.

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Omnisciente.

Domingo por la mañana día veraniego lleno de calor y un cielo completamente despejado, oficialmente se cumplía una semana desde la llegada de la familia de Samantha, la prometida de su hermano a la cada Jauregui, una semana que había estado llena de situaciones divertidas, pero también momentos donde la paciencia se perdía, en parte por el futuro matrimonio que habían discutido un par de veces el dia anterior, de hecho se habían ido a dormir totalmente peleados, Camila tuvo que pagar las consecuencias aceptando a su hermana en su cama gritando que no se iba a casar con un cabeza dura como lo era Chris. Lauren celebraba en secreto eso significaba no trabajar como bruta, menos tener que hacer miles de recuerdos a la pareja y por supuesto no aguantar el estrés de su madre, pero esa celebración no duro mucho cuando el Domingo entraron tomados de la mano diciendo que se aman y que no podían pasar ni un dia separado, tendría que hacer miles de recuerdos.

¡¿Quien los entendia!?

Por esa razón nunca se iba a casar, al menos eso pensaba por ahora porque la morena que estaba sentada al frente suyo esa mañana tomando un café donde el vapor golpeaba su rostro luciendo absolutamente perfecta con leve capaz de maquillaje, ojos que resaltaban y esa sonrisa que podía devolver la vida a un muerto, podría persuadir su pensamiento repelente al matrimonio, es que le gustaba bastante Camila, a pesar de su carácter terco, lleno de seguridad pero al mismo tiempo extrovertido que hacia reír bastante cuando ella no estaba cerca, porque al parecer Camila se mostraba dura, terca y pesada solo cuando Lauren estaba cerca, porque todo el tiempo restante era una chica tan agradable como decia Clara Jauregui, sin duda algo tenia Camila con su persona, Lauren estaba segura que la morena sentía atracción por ella, al menos mínima.

-Hermanita linda...- Chris decia con el tono mas tierno que podía intentando persuadir a su hermana.

-¿Que quieres?.- dice sin interés terminando de tomar su café sin dejar de mirar a la morena frente a ella, ¿como no mirarla si era perfecta?.

-Tu podrías ayudarme con...- Lauren lo interrumpe de inmediato.

-No.- dice segura.

-¡Ni siquiera te lo he dicho!.- protesta, Lauren se encogió de hombros restándole importancia. -Yo que te ayudo en todo.- se hace el ofendido.

-Ya he hago mucho con ayudarte en esas cosas pequeñas de recuerdos que la gente botara en el camino a su casa, ademas de cantar o bailar en tu matrimonio, eso si es un suplicio así que no hare nada mas.- dice decidida bebiendo el ultimo sorbo del café, Chris la miro mal.

-Mala hermana, ademas era algo entretenido.- se queja. -Te iba a compensar bien...- intenta persuadir.

-¿Que quieres?.- lo mira por unos segundos, maldito Chris deje de ver a Camila por ti, pensó Lauren.

-Puedes ayudarme construir el marco o el lugar como se llame para sacar las fotos el día del matrimonio, tu sabes de diseño y eres buena construyendo.- la halaga con su mejor sonrisa, Lauren por nada del mundo suavizaba su rostro.

-¿Que gano yo haciendo eso?.- pregunta en su papel de negociante profesional, Mike reía por lo bajo ante la interacción se sus hijos, Chris era tan parecido a Clara, en cambio Lauren era tan parecida a el en lo psicológico, en cambio Taylor era algo diferente a sus dos hermanos, quizás la mezcla entre ambos, ella era única y especial su princesita menor, Lauren era su princesa mayor mientras que Chris... era Chris.

-Un dia con tu hermoso hermano.- intenta negociar con su sonrisa mas tierna.

-Intento deshacerme de ti Chris, eso seria un castigo así que rechazo tu oferta.- vuelve a mirar al frente mirando la hora en su celular.

Light and Love ~ Camren Donde viven las historias. Descúbrelo ahora