Parte XXIII: Feelings

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Lauren

La frase que dice "El tiempo lo cura todo" no hacía efecto en mi vida, en mas era todo lo contrario porque cada día que pasaba mas de menos echaba a esa morena, mas la necesitaba, mas me daba cuenta de lo que sentía, se volvió un ancla en mi vida que no podía sacar ni siquiera ocupando a todos los marineros mas fuertes del mundo, ella estaba inserta en mi corazón, vida y alma, siendo mi primer pensamiento al despertar y el último antes de dormir, incluso en mis sueños no me dejaba en paz, ella aparecía en ellos sintiendo tan real su compañía a mi lado pero todo se disolvia cuando abría los ojos viendo que estaba sola, sin su presencia ni esencia, solo me quedaban los hermosos  recuerdos junto a ella.

¿Por que me sucedía todo eso?

De alguna forma sabía lo que pasaba conmigo, pero me negaba a aceptarlo completamente porque al menos así doleria menos y quizás poder acostumbrarme a su ausencia permanente en mi vida, porque volver a ver a Camila iba a ser mas difícil de lo que pensaba, ella vivía al otro lado del mundo, ella tenía su vida y solo era un recuerdo de verano, aunque deseaba que ella sintiera lo mismo que yo, que esto fuera recíproco pero en el fondo sabía que eso no era así, y una vez mas me decía a mi que solo fue un amor de verano.

¿Que había pasado en mi vida durante este tiempo?

Todos mis planes se habían realizado tal como había deseado, tengo un empleo en la compañía de papá con un horario bastante agradable, entro a las nueve de la mañana para salir a las dos de la tarde, además de lograr mi total independencia, porque sí había logrado salir de mi casa, alquilando un departamento en la costa de mi playa favorita que alcanzaba a pagar con el dinero que recibía mensualmente de mi trabajo, algo que estaba sumamente feliz de tener mi propio espacio.

Aun así no podía dejar de pensar en como sería compartir ese lugar junto a la morena, que a pesar de recordarla cada día solo sabía de ella a través de Chris o Samantha, porque nuestro contacto era nulo siendo lo mejor para ambas, recalcando que solo había sido algo pasajero y que ambas volveríamos  a la normalidad aunque para mi haya sido mucho mas que eso. Por lo que he escuchado es que ella esta bien, trabajando en esa escuela de Miami enseñando la música que tanto amaba, viviendo su vida de lo mas normal era lo que Samantha me había comentado de manera rápida es que no deseaba parecer desesperada, solo con saber que estaba bien era suficiente para mi.

En estos siete meses desde que Camila se fue de Galway no había vuelto a salir con ninguna otra chica de manera formal, tan solo tuve un par de citas el primer mes que ella se fue para borrar su sensación, pero todo era en vano era imposible sacar a Camila de su cuerpo, de tu vida por lo que luego de mi cuarto intento fallido decidí no insistir y dejar de salir al bar donde Camila había tenido su noche de locura.

¡Ven que es imposible no tenerla en cada pensamiento!

¡Me había vuelto una ermitaña por esa mujer!

Ya no sabía que era el sexo con tanto tiempo de abstinencia, había olvidado besar, como se hacia el amor, cuales movimientos ocupar. Estaba exagerando bastante la verdad, pero era cierto, con la única persona que quería hacer todo eso era con Camila pero no iba a ser posible nunca mas, debía asimilarlo pero no podía, porque no quería.

No quería olvidarla.

-Pareces una vieja.- la hermosa de Verónica caminaba por mi casa con los brazos cruzados y un tono serio, llevaba aquí al menos veinte minutos intentando convencerme que debíamos ir al bar.

-Lo soy, tengo casi treinta años.- le digo con una sonrisa irónica para echarme e  el sofá.

-¡Con mas razón debes ir a buscar diversión mujer!- exclama acariciando su sien con sus dedos.

Light and Love ~ Camren Donde viven las historias. Descúbrelo ahora