Capítulo 13

581 57 1
                                    

POV Castiel

Cuando era niño, mis padres nunca estaban en casa. Siempre tenían que viajar de un lugar a otro, es por esto que muy seguido estaba solo en casa y, de alguna manera, me sentía ¿abandonado? Sabía que mis padres lo hacían por que no tenían opción, pero aún así no podía evitarlo.

En la escuela, había un chico bastante violento y temperamental, que a pesar de eso tenía las mejores calificaciones de la clase. De alguna forma, creí que era genial, después de todo parecía tan serio y frío, como si no le importara nada, por eso pensé que quería ser como él.

Cuando lo vi en el parque, tan desesperado y herido, tuve la necesidad de hablarle. Quería saber que pasaba por su mente, quería conocerlo más. Ahora es cuando me pregunto, ¿por qué me atraía tanto? Tal vez porque... Era tan rebelde y solitario, como un pequeño lobo abandonado.

Después de un tiempo, nos hicimos verdaderos amigos. Siempre jugábamos juntos y aunque peleáramos, reíamos todos los días. Al entrar en secundaria, nos alejamos un poco, por alguna razón él prefería mantener su distancia conmigo, como si no quisiera que me acercara a él. Y debo reconocer que sentí herido, después de todas la cosas que habíamos vivido juntos, él decidió alejarse de mí sin ninguna razón. 

Cuando entramos a preparatoria, ya habíamos cambiado totalmente. Él ya se había hecho un lame-botas y yo ya era todo un rebelde quien faltaba a clases y no le interesaba nada. Había logrado lo que muchos no podrían en esta etapa de sus vidas, hacer lo que te gusta, tener una novia sexy, vivir casi completamente solo, disfrutar los pequeños momentos en que no tenías nada que hacer, etc. Pero algo faltaba, algo se sentía vacío dentro de mí, no me sentía del todo feliz a pesar de tener todo lo que cualquier adolescente querría. En ese momento el rostro de Nath vino a mi mente, me encantaba llamarlo así cuando eramos niños, y a su vez él se burlaba de mí llamándome Cass... ¿Por qué lo recordaba en ese momento? Estaba a punto de perder la virginidad con una chica sexy y... ¿Por qué recordaba a Nath? 

Seguro estaba nervioso, eso tenía que ser. Pero el rostro de Nath siguió apareciendo. En el momento en que todo estaba marchando relativamente bien en mi vida, lo vi. No podía creer que estaba viendo eso, Nath con mi "novia" juntos. En ese momento no estaba furioso porque Nathaniel estaba haciendo algo con mi novia, estaba enojado porque... pensé que a Nathaniel nunca le gustaría nadie, creí que estaría... ¿a mi lado? No estaba enojado por que estaba con mi novia, estaba enojado porque creí que él nunca estaría con una chica como ella, después de todo alguien que usaba ese tipo de ropa y actuaba de esa manera, no podía ser ninguna santa. 

No podía creer que le gustara ese tipo de chica, es por eso que me enojé. Me enojé mucho y lo golpeé, aunque intentó excusarse no dejé que hablara, no quería escucharlo, no quería oír como decía que le atraía mi novia. 

Ahora me doy cuenta de que fui egoísta, tenía una novia, pero quería que Nathaniel no estuviera con nadie. No quiero pensar en porqué me sentía así, después de todo él me había "traicionado" y tampoco podía decirle la verdad de como me sentía. Sin embargo, tenía a pequeña esperanza de que viniera a disculparse, o al menos que me dijera algo, que me hablara, que me mirara, que intentara acercarse a mí de todas formas. Pero eso no sucedió, él se alejó aún más y comenzó a tratarme fríamente, como si me odiara realmente, y eso me dolió aún más.

Ahora, creo que las cosas entre nosotros mejoran y empeoran al mismo tiempo. Desde este año, nos acercamos más, pero sigue manteniendo una distancia de mí, como una línea que no debe cruzar o algo así. Realmente nunca lograré entenderlo, a veces es frío y otras es muy agradable estar con él, pero una cosa es segura, aún queda un poco de la atracción que una vez sentí cuando lo conocí.

Intenté levantarme de la cama, pero un fuerte dolor en los músculos de todo mi cuerpo me lo impidieron. Cada vez que intentaba alzar la cabeza, el peso de mi cuerpo me hacía imposible el siquiera sentarme y la jaqueca era otro de los problemas. Al diablo, no pienso asistir hoy a clases. Me quedaré durmiendo para descansar mi cuerpo y mañana llevaré un justificante, es muy probable que si no llevo uno, el delegado se enoje conmigo y tenga problemas. 

Ayer el concierto fue increíble, me encantó la sensación del publico gritando y cantando al son de nuestra música. Aunque debo reconocer que lo que más me sorprendió fue la actuación del delegado, no se comparaba en nada a lo que habíamos escuchado en los ensayos. Se notaba que estaba disfrutando completamente el tocar en nuestra compañía.

Recordar al delegado tocando la batería me hizo sonreía. Mañana definitivamente me vengaré de él por tirarme una baqueta en los ensayos. Creo que iré a la sala de delegados y desordenaré un poco los papeles de su escritorio, seguro que si lo hago se volverá loco.

De pronto un pequeño aullido me sacó de los pensamientos que tenía. Demonio que había estado durmiendo, entró a la habitación para jalar un poco mis sábanas. Sabía que cuando hacía eso, no era por nada más que por comida. 

El día de ayer, logré a duras penas echar en sus pocillos un poco de comida y agua, pero hoy no le había dado nada en todo lo que llevaba de mañana y tarde. Me levanté de mi cama a pesar del dolor palpitando en todo mi cuerpo y en mi cabeza, buscando el lugar donde tenía su comida para luego echarlo en su correspondiente pocillo. 

Al terminar de hacerlo, supe que ya no podía mantenerme en pie. Tanto mi cuerpo como mi mente estaban gritando, y el sonido del concierto aún se sentía en mis oídos. He ido a muchas fiestas ruidosas y conciertos, pero era totalmente diferente de tocar en un escenario, ¡maldición! todo mi cuerpo está gritando.

Regresé a mi cama para cerrar lentamente los ojos, mañana probablemente todos estarán preguntándose porqué falté, pero jamás reconoceré que fue por el cansancio del concierto. Repentinamente pensé en el delegado, me pregunto qué estará haciendo ahora...

Demonio subió a mi cama, acurrucándose a mi lado. Cerré mis ojos para volver a dormir, con una sonrisa en el rostro al recordar que mañana lo volvería a ver. Poco a poco fui perdiendo la noción de lo que pasaba para quedarme dormido por completo.   


Te quiero... ¡Te odio! Te amoWhere stories live. Discover now