EL AMOR DE MI VIDA (Loricoln)

Preocupaciones

2:30 am

Habitación de Lori y Leni.

A la noche de la madrugada del día siguiente una mujer de pelo rubio se encontraba recostada sobre su cama mientras sollozaba sin que despertara a compañera de habitación.

Cuando llego a casa ayer por la noche ni siquiera la rubia ceno, solo se dirigió rápidamente a su habitación, en el pasillo encontró el oso de la pequeña Lily que Lincoln gano para ella aquel día de su salida juntos, la rubia lo cogió y se entró a su habitación a derramar lágrimas de manera muy silenciosa para no levantar sospechas. De igual manera siguió llorando por toda la noche de la madrugada, sin que su hermana Leni se diera cuenta, solo sentía la necesidad de llorar por su amado albino.

Lori no soportaba saber que su amado peliblanco ya había dado el primer paso y que ella no pudo impedírselo, solo se lamentaba derramando lagrimas mientras apretaba sus sabanas culpándose a sí misma de no haber podido estar ahí para salvar a su lindo conejito blanco. La rubia tenía el enorme y gran deseo en decirle al peliblanco que estaba enamorada de él y de cuanto lo amaba como a un hombre, pero todo resulto que el corazón de su amado ya tenía una dueña y era la chica castaña quien se lo gano, para la rubia todo eran como estalactitas que caían del techo y atravesaban su frágil corazón hiriéndole en lo más profundo y se decía palabras muy tristes.

-Lori: *Sollozando* Lincoln mi amor por que me haces esto, pero literalmente no tienes la culpa de nada porque aún no sabes lo que siento por ti. No soporto ver que tus labios sean tocados por los de otra mujer, tampoco que las manos de otra mujer recorran tu lindo rostro *Sollozo* (Snif).... Lincoln..... Lincoln *Sollozo* Mi querido Lincoln..... Mi príncipe..... Mi querido conejito blanco..... Porque tienes que lastimarme inconscientemente. *Sollozo* (Snif)....... Por qué.......

Durante casi toda la noche la rubia hacia todo lo posible para que sus llantos sean muy silenciosos, ella jamás había llorado tanto desde su ruptura con su ex novio, pues continuo derramando lagrimas por más de cuatro horas seguidas hasta que se quedó dormida abrazando el oso que Lincoln gano aquel día que ambos salieron juntos.

Ya por la mañana todo era igual que siempre, pues se preparaban para la escuela, colegio y la preparatoria.

La rubia aún seguía recostada en su cama. Ella no tenía ganas de levantarse, pues aún seguía muy triste y muy dolida por lo que acabo de presenciar el día de ayer, miro como su hermano tomaba por la cintura a la chica castaña y la besaba apasionadamente. Realmente aquella escena la afecto demasiado, con solo pensar que el amor de su vida estaba besando los labios de otra mujer, su corazón volvía s sentir dolor. La rubia no se decidía a levantar, no tenía ganas de comer, tampoco quiso llevar a sus hermanos a la escuela, solo les dijo que no se sentía bien, así que al final fue su madre quien decidió llevarlos.

-Sra. Rita: Hija de verdad no te sientes bien?

-Lori: No mamá solo estoy muy cansada, así que por favor solo quisiera quedarme en casa. Pero por favor te pediría que seas tú quien los lleve.

-Sra. Rita: Esta bien hija, pero por favor baja a desayunar porque tampoco cenaste anoche y no quiero preocuparme por ti.

-Lori: Si Mamá te lo prometo.

Dicho todo eso la madre subió a la van para llevar a sus hijos a sus debidas instituciones.

-Lincoln: Mamá en donde esta Lori.

-Sra. Rita: Hijas, Lincoln, hoy su hermana no se siente bien, es por eso que yo los llevare.

-Luan: Acaso le pasa algo a nuestra hermana?