EL AMOR DE MI VIDA (Loricoln)

La Promesa

Calles de Royal Woods 3:00 pm

Por la tarde un chico de pelo blanco se encontraba en el patio de una casa limpiando el respectivo jardín.

Lincoln trabaja teniendo puesto en sus manos unos guantes de jardinería y sosteniendo unas tijeras de jardinería que indicaban que estaba limpiando y podando aquel jardín, además de estar trabajando con el intenso calor de la tarde.

Nuevamente el peliblanco había sido contactado para sus servicios de limpieza y jardinería.

-Lincoln: (Podando las plantas) Cielos realmente me agota trabajar con este intenso calor (Agitado) Ojalá lloviera hoy.

El joven peliblanco continuó con el trabajo. Luego podo el césped y lo regó, después de igual forma se puso a regar todas las plantas del jardín.

-Lincoln: (Regando con la manguera) Oh! vaya, no. No ya no aguanto más el calor, si continúo así terminaré con un dolor de cabeza.

El chico de pelo blanco se quitó su playera naranja y se la puso en su bolsillo trasero dejándola colgando y acto seguido doblo una rodilla al suelo y se comenzó a mojar la cabeza con la pistola de la manguera.

-Lincoln: Ahhh! Qué refrescante (Sacudiendo la cabeza) Pero sí que fue una gran locura venir de casa sin almorzar. Ni siquiera avise a Lori que hoy trabajaría. Pero tuve que acero por el trabajo. Realmente necesito dinero para esta noche.

Verdaderamente el albino se veía muy atractivo teniendo su torso al descubierto y su cabello blanco mojado. Los músculos de su cuerpo se notaban con claridad y como el agua caía sobre su torso desarrollado y así comenzó a llamar la atención de las chicas que pasaban por aquella calle.

Las chicas se detenían y miraban a aquel chico de pelo blanco que tenía su torso al descubierto, teniendo puesto en sus manos los guantes y regaba las plantas con la manguera adaptada a una pistola de riego.

Las mujeres tropezaban una con otras al ver a aquel tan apuesto chico albino que regaba las plantas. Las chicas se quedaron muy sorprendidas y sonrojadas. Comenzaban a observar detalladamente el lindo cuerpo del peliblanco.

Mientras el chico de pelo blanco continuaba haciendo su labor, una chica de cabello rubio venía caminando con una lonchera térmica en sus manos, viendo en casa por casa en donde pueda encontrar a su querido conejito blanco.

Realmente Lori se sentía como Alicia en el país de las maravillas en buscar al conejo blanco, en este caso su hermano Lincoln.

Mientras que el joven peliblanco iba terminando de regar, se volvió a mojar la cabeza y la sacudió, rápidamente se percató de que muchas chicas lo estaban observando muy Sonrojadas y supuestamente acosando mentalmente, algunas dejaban caer su saliva por todo lo impactadas que estaban presenciando.

Lincoln al ver a aquellas chicas se sonrojo y se levantó tomándose la nuca por el momento que atravesaba. Si bien Lincoln se había prometido nunca revelar su físico a las personas, lo hacía hasta que sus pequeños músculos lleguen a su mejor desarrollo.

También Lincoln había prometido nunca mostrarse así en delante de sus hermanas, ya que él decidió guardar su pudor, además de que tenía hermanas menores en casa y por todo eso dejó de leer sus cómics e historietas en ropa interior.

-Lincoln: (Vaya sabía que esto pasaría algún día, pues es el resultado de haber trabajado con Lynn en sus prácticas matutinas, pero también es porque decidí cambiar mi físico)