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¿Por qué no le parecía extraño?,  Hoseok debería salir corriendo de ese lugar,  pero ahí se encontraba en la noche fría bajo los árboles,  caminando sobre el pasto y matando algunas flores que pisaba al avanzar.

-Es mejor que me digas que esto..... es real- Suplicó Hoseok una vez frente a Jungkook que permanecía inmóvil.  Era difícil para el, no aventarse a abrazar a Jung. 

-No..  hoseok..

Era tanta la curiosidad por parte de Hoseok,  enserio él quería saber si ese chico era real,  en todos sus sueños,  él aparecía, pero después... Simplemente se iba. 

La mano temblorosa subía por el abdomen de Jungkook,  éste suspiro ante el toque y giro su cabeza a la derecha,  era mejor no ver a Hoseok.  Llegó al pecho y sintió el agitado corazón, sonrió,  eso era verdad,  Hoseok sabía que Jungkook si existía, ese chico con el que tanto soñaba,  estaba  frente a el.

-Siempre creí  que eras un simple sueño.. Pero ahora..

Su dedos helados tocaron el pómulo izquierdo de Jeon. 

Esto tenia que parar,  Jungkook debía detener todo de una vez,  si se quedaba sería todo más difícil,  además de que tendría que explicarle a Hoseok qué es el dueño de la Luna.  ¿Y cómo haría eso sin sonar como un loco? 

Los labios del Pelinegro querían formular algo para impedir que esto se volviera más difícil,  por que sí él escuchaba las palabras del Castaño se iba a querer llevar a Hoseok a la Luna y jamás regresarlo.  Y tener esos pensamientos no le agradaba,  así su corazón se estuviera rompiendo. 

-Por qué no dices nada....-Silencio-...Di algo....-Nada-....¡POR FAVOR DI ALGO! - Hoseok alzó la voz,  estaba nervioso, no quería saber que esto, fuera su nuevo sueño,  estaba tan cerca del chico que había estado buscando en todo este tiempo,  y que esto se convirtiera en algo que no existe,  era para él,  algo que no podría soportar. 

Estaba temblando,  tenía miedo,  pero aún así se arriesgo,  su mano cubrió la mejilla de Jungkook,  quien al sentirla cerro sus ojos y suspiro,  volvió a abrir sus ojos al escuchar que Hoseok se inclinaba levemente hacía arriba con sus párpados cubriendo sus pupilas y los labios entreabiertos ,  retomando así el color rosado que fue cubierto por el morado que su sangre formo al estar en el frío,  y se restauró por la cercanía de los dos. 

Jungkook no podía permitirse besarlo,  no podía,  por que sí él lo hacía Hoseok no volvería a la tierra ni por dos segundos. 

Con todo el dolor de su corazón,  y una lágrima cayendo de sus ojos regreso a la Luna. 

Hoseok no quería abrir sus ojos, sabía que Jungkook se había ido,  y no quería aceptarlo,  no quería saber que todo este tiempo se encontraba en su cama con las cobijas al otro lado de la habitación dándole sentido al poco frío que tenía. 

Pero no podía quedarse así, su párpado derecho se levanto para a sí ver la profundidad del bosque.  Alavés sentía alivió,  pero eso no explicaba,  podía haber alucinado con el. 

Sintió un leve cosquilleo porvenir de su mano,  observo aquella que aún se encontraba en el aire tocando una mejilla inexistente.  Una gota de sustancia desconocida callo por su muñeca resbalando al pasto bajo sus pies. 

Eso era real, Jungkook había derramando una lágrima,  de eso estaba seguro. 

Sentía la mirada,  otra vez lo observaban,  levanto su mentón hasta divisar al punto más bello,  la Luna,  la Luna estaba muy opaca,  e incompleta.  Ninguna estrella estaba asomándose por el cielo.

Es real es real es real es real es real es real es real es real.

Solo se permitía pensar eso.  La última vez que observó el cielo,  una estrella brillante iluminó el oscuro mar de arriba. 

Eso fue real.

Esto es real.

Él es real.

 El Dueño De La Luna 🌙 JunghopeNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ