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Su corbata un poco desalineada, acomodó con cuidado de no arruinar nada. Este día era el mejor de su vida y quería que todo fuera perfecto. Suspiró prestando atención a cada detalle de su cuerpo, sus zapatos sin ninguna mancha, el traje negro sin arrugas, su camisa blanca impecable.

Caminó por toda la habitación intentando calmar sus nervios e ignorando la duda en su mirada.

Jimin miró por una rendija de la cortina que había abierto sólo un poco para ver cómo su abuela hacía pasar a los invitados al salón principal.

Habían rentado de rápido, un pequeño lugar lo más parecido a una iglesia, ya que por ciertos problemas las bodas homosexuales no estaban permitidas. Pero ese lugar era acogedor y hermoso, cómo un sueño. En la parte de atrás había un jardín, donde las mesas aún no estaban puestas, salió por la puerta sin que nadie notara su presencia y sin importarle lo blanco de su traje, se recostó en el pasto, acariciando con la yema de sus dedos, el césped bajo suyo.

- ¿Estás triste?.- Jimin lo miró confundido. Negó con la cabeza y suspiró.

-Sólo estoy confundido.- Hizo un puchero desviando su mirada a los dedos que aún tocaban el pasto.

-¿No te sorprende que estoy aquí?-. Yoongi preguntó, nervioso por lo que su chico le iba a decir, la verdad el no era muy bienvenido por Jimin, pero Hoseok insistió tanto, cosa que Yoongi confundió mucho, pero de inmediato recordó lo que Jimin le había dicho cuando minutos antes le entregó la invitación, decepcionado entendió que la boda debía de realizarse sin importal realmente mucho lo que sintiera.

-No, supongo que eres mi imaginación.- Sonrió al enserio tratar de creer eso.

-¿Crees eso?-. Rió algo incrédulo, él enserio se estaba volviendo loco por el chico, además de que le recordaba a cuando Jimin solía creer que él era parte de su imaginación.

-No, pero no quiero otra explicación.- Jimin no iba a asumir todo lo que pasaba, él no quería a Yoongi, no iba a dejarse intimidar por el pasado.

Yoongi sonrió por su respuesta, se acostó igual a su lado y tomó su mano impendiendo que siguiera acariciando lo anterior.

-Eres más difícil.

-¿Estás diciendo que antes era fácil?.- Preguntó indignado por la insinuación y apartó su mano poniéndose de pie, sin mirar al chico triste detrás de el.

Caminó hasta donde era visible el lugar donde Hoseok lo estaría esperando, respiró profundo cuando dio un paso, logrando ver de soslayo a las personas poniéndose de pie al verlo pasar.

"Esto no es posible, ellos acaban de vivir lo primero que pasaron juntos, todo está saliendo mal. Claro que no, ellos sí vivieron otra vez su primer recuerdo, pero Jimin no sentía lo mismo. Así no vale, debe ser un sentimiento parecido, y esto no tiene nada que ver. Tranquilo, eso hace que tengas más posibilidades de ganar."

Hoseok espera tranquilo a Jimin, pero cuando las personas se pusieron de pie por su presencia, los nervios corrieron por todo su cuerpo. Podía ver la hermosa sonrisa que Jimin llevaba en su rostro, pero había algo en su expresión que rápidamente lo relacionó con nervios, pero el chico se veía tan hermoso que solo pudo mirarlo a él y a nadie más, deseando que la boda terminara rápido para poder estar a solas con el contrario.

Esto no era una boda en una iglesia, pero si era una simulación, no se iba a hablar de Dios, pero los botos eran elección de cada pareja, y ellos querían que la experiencia fuera lo más parecida posible a una boda por la iglesia.

 El Dueño De La Luna 🌙 JunghopeWhere stories live. Discover now