CAPITULO 2

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Me desperté para mirar el despertador me fijé que eran las 4 de la madrugada ya no encontré a Keana por ningún lado del departamento, solo que al entrar a la cocina vi sobre el refrigerador una nota que decía "me despido Lauren, he decidido radicar en Colombia solo vine a despedirme, te deseo lo mejor, un consejo el deseo y la pasión pasan rápido pero el amor te deja felicidad eterna, de todo amor deseo que lo encuentres. Besos keana". por algún motivo deje el recado en su lugar, me vestí y tome rumbo hacia mi casa ya que el departamento, aunque era un regalo de mi padre cuando cumplí 18 años lo usaba solamente para mis conquistas.

Recuerdo haber conducido a media madrugada, al ver tan vacía la ciudad me trasmitía tanta tranquilidad la necesaria para dejar escapar un suspiro al recordar lo vivido en esa noche y los recuerdos sobre como llego verónica a mi vida fueron apareciendo en mi mente.

Era compañera de mi hermano en la universidad un día la invito a comer a casa y desde el momento en que la vi supe que habría historia pues ese mismo día con la excusa de que le indicara en donde se encontraba el baño me hizo acompañarla, recuerdo perfectamente que al indicarle la puerta me tomo de la mano, cerro nuevamente la puerta con seguro y me beso tan intensamente que no dude un segundo en corresponderle, la tome por la cintura y la hice sentarse sobre el lavabo, con ambas manos le recorría la espalda, pasando por sus senos y una de mis manos se dirigía en búsqueda del tesoro debajo de su falda, cuando ella dejo escapar un quejito intenso, recordé que las cosas siempre debían ser en el momento y de la forma en que yo quisiera, siempre había manejado de esa forma las cosas y no iba a ser diferente esa ocasión. Me aleje de ella, tome pluma y papel y escribí la dirección de mi departamento, si quieres nos vemos ahí a las 9 de la noche dije antes de salir y dejarla completamente sin habla.

Ya me encontraba cerca de casa, a escasas seis manzana, seguí absorta en mis recuerdos sobre lo bien que me había en tendido en la cama con Keana desde esa primera noche, solo esperaba que encontrara cualquier cosa que ella estuviera buscando, de momento se oyó el rechinar de las llantas de mi automóvil al aplana los frenos a fondo, por el espejo lateral había alcanzado a distinguir una figura corriendo por el parque que se encontraba a un costado de la carretera.

Se trataba de ella Camila corriendo por el parque con un atuendo deportivo en color gris, pero que barbará que hacia esa chica a las 5:30 de la mañana en un lugar tan solitario, no se había percatado de mi presencia, aparque el auto a un costado del lugar, apagué todas las luces y en silencio me dedique a observarla, corría a un excelente ritmo dando vueltas al parque, había en lugar algunas otras personas, pero entre todas solo la observaba a ella, lucia completamente sensual a pesar del atuendo, pasó varias veces a pocos metros de mi auto sin percatarse que era observada, estuve ahí media hora hasta que la vi alejarse del lugar, pensé en seguirla, pero un destello en mi mente me hizo reaccionar qué demonios estaba haciendo espiando a un chica como un delincuente o un amante celoso, ya basta esto no está bien es una mocosa hermosa pero una niña a fin de cuentas, y eso solo significaba problemas.

Así pasaron 2 semanas de mi vida, en las mañanas acudía a la oficina en las tardes a la universidad algunas noches o partes de ellas las pasaba en mi departamento acompañada de alguna chica que conociera y otras me dirigía directo a casa pero mi parte favorita era cuando mi despertador (ahora ya programado) sonaba a las cinco de la mañana, con algunos minutos de anticipación estacionaba mi auto y esperaba pacientemente a verla llegar y hacer lo suyo, su rutina consistía en corres alrededor del parque durante media hora y la mía consistía en observarla desde mi auto.

Me sentía confundida con mi comportamiento, que me pasaba, por qué hacía esto, jamás había hecho algo semejante por ninguna chica, pero esta despertaba en mi algo hasta el punto de hacerme espiarla desde las sombras, era una adolescente con cuerpo de mujer lo que me hacía sentir un deseo inexplicable, tal vez lo único que necesito es acostarme con ella para quitarme las ganas y después nada; no cabe duda Lauren cada día piensas más porquerías, estás hablando de meterte con una niña hija de un socia de tu padre y mejor amiga de tu hermana, acaso te gustaría que a ella le hicieran lo mismo- No verdad, entonces dedícate a tus cosas y deja esto del tamaño que esta.

La Niña que me Robo el Corazón Where stories live. Discover now