I'M SATAN © |YoonMin| #2.

❝E P Í L O G O❞

Un año después...

A pasos apresurados un chico de cabellos color chicle se hizo paso entre todas las personas que estaban cerca de él, llevando en brazos a un pequeño que no paraba de llorar. Algunos ya sabiendo de quien se trataba solo se hicieron a un lado, viéndolo un poco preocupados. Detrás de él, el chico de nombre JungKook caminaba más lento, rodando los ojos por la exageración de parte de su mejor amigo. La puerta de la oficina de Agust se abrió de golpe.— ¡Por favor cariño, ve que es lo que tiene que no ha parado de llorar!. —dijo JiMin, haciéndose paso hasta llegar donde su esposo, quien al verlo alterado y a punto de derramar lágrimas, tomo a su bebé en brazos, revisándolo calmado.

—¿Qué sucede pequeño?. —le pregunto al niño, que solo lloro más al escuchar la voz de su otro padre. Agust estaba en medio de una reunión con sus colegas, quienes al notar que el rubio no les prestaba atención decidieron salir y dejar a la familia de cuatro a solas. JungKook cerro la puerta de la oficina con seguro, asegurandose de que nadie entrara.— Veamos, JiHyun abre la boquita.

El bebé aún entre sollozos hizo lo que le pidió el rubio, dejando que su padre revisara que era lo que lo tenía así de alterado.— lluele~ —dijo el bebé de ahora cuatro años de edad, señalando su boquita y pancita a la vez.

—Ha estado así desde la mañana, me preocupa que haya comido algo que le hiciera mal. —dijo JiMin, mordiendose las uñas.— Soy un mal padre. —se recriminó, al ver como el bebé lloraba cuando su otro padre tocaba su estómago.

—No sé que haya pasado, pero ayer por la noche estaba bien, los dolores y quejas empezaron hoy. —comento JungKook, quien acarició la cabecita del menor.

—JiHyun, ¿Comiste algo hoy en la mañana?. —el bebé negó, para tener solo cuatro años entendía perfectamente lo que sus padres decían.— ¿Te golpeaste?. —volvio a negar.— Bien, creo que se que tiene.

—¿Es algo malo?. Agust dime qué mi bebé estará bien.

—Tranquilo no es algo grave. —dijo el rubio con calma.— JungKook, pásame las pinzas que está en mi escritorio. —el chico pelirrojo asintió, pasándole dicho objeto al mayor.— Háganse para atrás. —les ordenó a lo dos mayores.— Bien, mi bebé, esto va a doler solo un poco pero aliviará el dolor, ¿Sí?.

—Shi. —respondio suspirando y limpiando las lágrimas de sus ojitos color miel. Agust tomo aquel objeto médico, indicándole al bebé que abriera la boca, cosa que hizo confiando plenamente en su padre rubio. Agut sin ningún temor introdujo las pinzas por la boca del menor, JiMin dio un grito ahogado tapándose la boca con sus manos al ver aquella cosa que Agust había sacado del interior de su hijo.

—Eso... ¡¿Eso es una maldita serpiente?!. —gritaron los dos amigos, viendo aquel animal moverse de un lado a otro cuando Agust lo saco.— ¡¿Cómo mierda llegó ese animal a la boca de mi bebé?!.

—JiMin, recuerda que nuestro hijo es mitad quimera, de seguro se comió este animal y ni se recuerda. ¿JiHyun, dijiste que no habías comido nada?. —le pregunto con una ceja alzada al bebé, que solo hizo un pucherito inocente.

—Ijiun tenía ambe y Ijiun se comió a culebita penchando que eya de dullshe. —el rubio solo rodó los ojos por aquello, señalo el animal a JungKook y JiMin, quienes hicieron una mueca de asco.

—Esto no se come JiHyun, mira qué casi haces que papá JiMin le diera un infarto. —bromeo el mayor de todos.— ¿Te sigue doliendo?.

—Ño. —dijo el bebé.

—Ya está bien, no llores JiMin. —el pelirrosa hipeo, abrazándose al mayor.— Ya está bien, no le pasó nada.

—E-Estaba muy asustado, es mi b-bebé Agust.