Capítulo I: Tendencia al Rojo

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~Mundo Real:

Sabes que el día será horrible cuando te aplican examen sorpresa.

Los abucheos en el salón de clases era de esperar. A Todoroki le era indiferente, pero entendía perfectamente el porqué sus compañeros están haciendo un escándalo.

–Guarden silencio–Exclama Aizawa con los exámenes en las manos–A mí tampoco me gusta, soy yo el que debe calificar esto así que todos salimos perdiendo.

–¡Pensé que me habría librado de los exámenes sorpresas!–Grita Mina mientras aplasta sus propias mejillas con sus manos–¡Y no hay ningún listo por aquí cerca para copiar!

–Este será el fin...–Kaminari acompaña la exageración de la escena con lágrimas en los ojos, junta las manos–Te lo ruego, quien sea que esté ahí arriba, no me hagas reprobar...

–No creo que sea para tanto-Kirishima alegra el momento con una voz animada y fuerza en su voz–Vamos, no hay que temer, es sólo una hoja de papel.

–Pero esa hoja también tiene un poder...–Kaminari mantiene la cabeza hacia abajo, su brillante cabello le cae sobre los ojos–...el poder de hacer enfadar a tus padres y hacerte repetir curso.

–Oh...eso no bueno–Al parecer Kirishima tampoco tiene fe en que le pueda ir bien en el examen, pero no parece perder su clásico optimismo–No importa chicos, hay que mantener la calma, mira, Katsuki ni se imuta.

–Un examen no es nada–Kacchan descansa su barbilla en su mano, ni siquiera los mira, tiene la mirada puesta sobre la ventana–No me voy a poner a hacer un berrinche por tan poca cosa.

–Si que vienes confiado–Le comenta Kirishima.

–Pfff es sólo que yo si prestó atención a las clases.

–¡Deku ¿Estás bien?!–Exclama Uraraka, haciendo que todos en el salón volteen.

–S-Si...p-perfectamente...–El peliverde está totalmente pálido, sus ojos muestran miedo, se aferra a la mesa con fuerza, sus rodillas tiemblan y su boca está seca.

–No me digas que te da miedo el examen–Aclara Ochako con una ceja levantada.

–Un p-poco...

–Deku, eres de los más inteligentes aquí, yo sí que estoy jodida pero tú no.

–No es eso...es que... cuando estoy nervioso se me olvida todo, y cuando se me olvida todo me pongo más nervioso aún ¡Es un bucle!

–Vamos, te irá bien ¿Cierto Todoroki?–Ochako voltea a ver al bicolor, es bueno tranquilizando a la gente.

Todoroki no responde. Tiene la mirada pérdida en un cuaderno puesto en su pupitre. Su mano derecha juega con un lápiz; los gritos de sus compañeros están tan lejos de su mente que todo queda en segundo plano, es como si al escribir se hubiese creado una barrera, y Todoroki sólo parece escuchar sus pensamientos.

"...El caballero lleva años de no haber aparecido. No pasará mucho para que le den por muerto.

El príncipe no lo quiere aceptar. Rechaza totalmente la idea de que el caballero se haya ido de su lado..."

–Todoroki–Le llama Uraraka otra vez pero con más fuerza, pero el bicolor no responde–Parece que no me escucha...

–¡¿Acaso... Todoroki también está preocupado por el examen?!–Exclama Momo con tal fuerza de que el salón se queda en silencio.

–¡¿Qué?!–Grita Midoriya–Oh no... estamos perdidos...

–¡Ja! Al parecer el "perfecto" de Shoto Todoroki no es más que un triste idiota–Comenta Bakugou con su clásica sonrisa y tono de voz sarcástica.

Todoroki levanta la mirada. Lo mira fijamente, al otro lado del salón, Bakugou sigue mirando por la ventana, sin darse cuenta de la mirada de su compañero.

Un pequeño resone de tambores comenzó en el pecho de Todoroki. Si de por sí se encontraba tras un muro invisible gracias a su distracción, pues ahora lo está más.

–«Bakugou...»–Todoroki vuelve a mirar su cuaderno, relee las palabras, al hacerlo no puede evitar sentirse molesto–«No...no, no puedo»

–Todoroki ¿Estás bien?–Le pregunta Momo con real preocupación, y no es la única.

Shoto se da cuenta que su mano donde sujeta el lápiz está ahora mismo envuelto en hielo, tiene sentido pues estaba en la mano derecha.

–Todoroki ¿Ocurre algo?–Le pregunta Aizawa.

El bicolor mira a su alrededor. Sus compañeros le observan, todos con preocupación y desconcierto en sus rostros. La única excepción es Bakugou, quién sigue mirando a la ventana, le da igual lo que esté ocurriendo.

Eso le molestó a Todoroki.

–No dormí bien, eso es todo.

Cómo es normal en Shoto, su respuesta fue directa y sin sentimiento alguno. Momo y los demás le creyeron. Aizawa comenzó a repartir los exámenes.
Todoroki usó su mano izquierda para descongelar el lápiz, guardó el cuaderno en su mochila.

–«Hoy será el día en que acabaré con estos estúpidos sentimientos»

Y esta vez fue en serio. Una vez terminado el examen, los alumnos ya podían volver a casa, pues era la última hora. Todoroki fue de los primeros en acabar, por lo que tomó su mochila y se fue.

Camina en soledad por los pasillo de la academia, es raro ver el sitio así, siempre está lleno de ruido, casi siempre alumnos riendo con energía, todos anhelando la misma meta y superando los mismos obstáculos. Eso a Todoroki le gusta, hace que no se sienta solo.

El bicolor se acerca a un cesto de basura común, abre su mochila y toma el cuaderno. Lo mira por unos segundos, está vez es la definitiva.

Lo tira, al oír su ruido al chocar contra el resto de basura se hace la prueba de que en verdad lo ha hecho.

–¿Tirando las pruebas del crímen?

Todoroki se da la vuelta rápidamente. Kacchan camina hacia él con una sonrisa burlona, por lo visto también terminó su examen.

–¿Sugieres que hice trampas?–La voz de Todoroki carece de emociones.

–Claro que no, fue un examen sorpresa, a no ser que tengas el poder de mirar el futuro no será eso.

–¿Entonces de qué crímen hablas?

–Ni idea, eres muy raro así que no sé que esperar de tí.

–¿Sólo querías decirme eso?

–Si, tengo que llegar a casa pronto, es buen día para ponerse a entrenar.

–Bien, en ese caso buena suerte–Todoroki se da la vuelta y comienza a caminar, si sigue hablando con él, los nervios aumentarán y no habrá héroe que le salve de tal incómoda situación.

–«Que presumido»–Kacchan lo ve irse–«¿Qué habrá tirado?»

Bakugou se asoma al cesto de basura, extiende la mano y recoge la libreta. Lo abre y comienza a leer, sólo son apuntes de las clases.

Bueno, las primeras páginas son sólo eso. Pero Bakugou se encuentra con algo más interesante. Una historia.

Una historia que relata el como un príncipe es aprisionado en su propio castillo, y todos los días espera a su joven caballero para que lo salve.

Kacchan lo guarda en su mochila, lo leerá más tarde.

Ahí fue donde comenzó todo. Bakugou se daría cuenta que su compañero de clases, Todoroki, oculta un fuerte sentimiento en su corazón. Un sentimiento que sólo es descrito con sus propias palabras construidas para formar un cuento de hadas.

Pero Bakugou no se daría cuenta de eso a la primera.

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Caballero de Cristal [BakuTodo]Where stories live. Discover now