Caballero de Cristal [BakuTodo]

Capítulo XVI: En mis brazos

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~Mundo de Cristal:

"Tu juicio será mañana a primera hora del día" le había dicho All Migth.

Todoroki no siente miedo, está puede ser su oportunidad de dejarlo todo claro y demostrar que todo esto fue una equivocacion. Es de día y fue Midoriya quien le llevó a la corte.

–Midoriya, sé sincero–Le dice el príncipe mientras van caminando hacia el juicio–¿Te parezco un criminal?

–Independientemente de que lo seas o no, se decidirá ahora–Izuku no quería decirlo, aún con el tiempo en que han permanecido con Shoto, no le parece un mal sujeto, pero no está en su labor el ver eso.

–¿Y qué pasará con Dabi?

–No lo sé, pero aún si lo supiera no puedo decírtelo.

Todoroki lo entendió. Ha sido una noche difícil, nunca creyó que llegaría el día en que dormiría en un calabozo; pero más extraño aún fueron los recuerdos que se le vinieron a la mente. Recordó a Bakugou. Su imagen aún está fresca en su memoria, más que nada el beso. Es estúpido, Katsuki fue la persona que lo arrastró en eso en primer lugar, no merece ser perdonado. Debería ser él quien sea juzgado, no Todoroki.

Lo que no sabía nadie es que el capitán de la guardia real, Eijiro Kirishima, estaba a un paso de encontrar a Shoto. No dió con Dabi pero si dió con algo mucho mejor y es el juicio. Había escuchado que cierto jovencito iba a ser juzgado, lo describieron como "un chico mitad albino, mitad pelirrojo", obvio tiene que tratarse de Shoto.

Finalmente el juicio empezó, Shoto estaba amarrado a un poste en medio de una sala inmensa rodeado de personas. No reconoció a ninguna excepto All Migth, quién veía la escena con su clásica sonrisa, y a Izuku quién lo veía con ojos entristecidos. Y lo peor fue ver a Dabi en el otro extremo, vigilado por un par de guardias, se le ve molesto.

Shoto tiene que admitir que hubiera estado bien el que estuviera Bakugou.

–Shoto Todoroki, el asalto hacia el castillo es uno de los crímenes más penalizados ¿Qué tienes que decir a tu defensa?–Le pregunta el juez.

–Pues...–Miles de ojos posados encima suya, que horror–Hay una equivocación.

–¿Equivocación?

–Yo soy cómplice, lo admito, pero fue en contra de mi voluntad.

–Explícate.

–Mi nombre es Shoto Todoroki, soy el príncipe del reino Invierano, jamás participaría con un criminal.

La sala queda en silencio durante unos eternos y cansados segundos. Todoroki se muestra firme, con seguridad en su mirada, ya no es sólo este juicio, es su dignidad. Desde que fue secuestrado por Bakugou, todo ha sido hechar culpas, está harto, él sólo quiere volver a casa.
Si Katsuki estuviera aquí, vería que Todoroki está determinado.

Pero el silencio es interrumpido cuando la puerta se abre, y Aizawa, otro capitán de la guardia, entra con una carta en sus manos.

–Señor juez, parece que hemos tenido un inconveniente.

–¿Qué sucede Aizawa?

–Al parecer, lo que dice el acusado es cierto, hay un guardia en la entrada que lo está buscando.

–«¿Guardia?»–Se pregunta Todoroki.

La puerta vuelve a abrirse, Kirishima, con una sonrisa mira al acusado. El príncipe está bien y eso es lo que importa.