Capítulo XX: Eijiro Kirishima

2.4K 333 51
                                    

°~°~°~°

~Mundo de Cristal:

El funeral de Kirishima duró aproximadamente toda una noche. Pese a las horas, a Todoroki se le hizo muy poco tiempo para decir lo mucho que ayudó Eijiro al pueblo.

Pero no quiere hablar de Kirishima de uno modo pretencioso. No referirse a él como "el arma que protegió este reino" sino como ese amigo que dió su vida por hacer lo correcto.

Siendo sincero, no recuerda gran parte del funeral. Su mente estaba en totales nubes, no porque no le interesara sino porque estuvo algo preocupado por Bakugou. No lo malentiendan, sigue enojado con él, no cree que la furia se vaya tan rápido.

¿Kirishima lo habría perdonado?

Todoroki comienza a creer que no conocía tanto a Eijiro como le gustaría creer. Quizás por eso no recuerda mucho de su funeral, porque nadie podía decir la gran cosa.

Tras el funeral, Todoroki subió desganado a su habitación. Era un asco estar rodeado de guardias las veinticuatro horas; pero lo entiende ya que un secuestro no es para reírse.

Cayó en la cama únicamente para descansar un rato. Tendría un par de horas para dormir antes de que salga el sol.

Soñar, soñar, soñar, soñar...

Por desgracia para Todoroki, soñó con Katsuki ¿Y si hubiese sido él quien hubiera muerto? No podía negar que lo extrañaba, el contacto de sus labios aún seguían impregnados en los suyos. No podría perdonarlo, no sólo por lo suyo sino por lo de Kirishima.

–«Él se lo ha buscado, nada puede justificar una muerte».

Mientras el príncipe dormía y los primeros rayos de sol se asomaban, Bakugou camina rumbo al cementerio del reino. No había nadie ya. Se logra distinguir fácilmente la tumba de Kirishima del resto, pues está cubierta con miles de flores y una frase de palabras grandes en la piedra:

"Eijiro Kirishima, espada de justicia, amigo de la bondad".

Katsuki se arrodilla frente a la tumba, tiene una pequeña flor naranja en su mano, es un cempasúchil. La colocación entre el resto de flores y posa una mano sobre la tierra.

–Nuestra vida a terminado ¿No es así Kirishima?.

Bakugou no conocía de cerca a Kirishima. Sólo lo básico, que era el líder de la guardia real, la mano derecha de la reina y el protector del reino. Pero una cosa era más que evidente, y fue que Kirishima odiaba los criminales con todo su corazón. Por algo dedico casi toda su vida en capturarlos y hacer que paguen.

Nunca atrapó a Bakugou, pues el reino invierano no es un sitio en la que al rubio le gustaría estar. Pero de haberlo hecho, Bakugou se estaría pudriendo en el calabozo.

–Compañero ¿Cómo debo pedirte perdón?–Dice Katsuki aún con la mano en la tierra–¿Cómo puedo vivir contigo en la espalda?

–¿Quién anda ahí?–Exclama una voz desde detrás.

Bakugou se da la vuelta y contempla a Kaminari. Ambos permanecen un par de segundos en silencio antes de que Denki saque su espada y forme una pose de lucha, listo para atacar.

–¿Cómo te atreves a estar aquí?–La voz de Denki no es muy distinto a un llanto reprimido–Esta vez no escaparas hijo de puta.

–No vine aquí a causar un escándalo.

–¿Qué haces aquí? ¿Has venido a burlarte?

Bakugou se desconcierta un poco por eso último; está convencido de que si da un paso en falso, Kaminari no dudará en matarlo.

Caballero de Cristal [BakuTodo]Where stories live. Discover now