Mercado de esclavos

603 91 22
                                    

The infernal prince

Capítulo nueve

Mercado de esclavos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Mercado de esclavos

"Daisy no te duermas"

Todo estará bien "Me'n nalye".

¿Por qué mamá hablaba así? ¿Qué significa " nalye"? ¿Esto es real? ¿O sólo estoy soñando una vez más? Mamá y papá no pueden estar aquí, junto a mí. Ellos desaparecieron, ¿acaso yo morí?

Los puedo ver con claridad, sólo nos separa una barrera invisible que no me permite avanzar. Una pared que irradia calor, una calidez que reconforta mi cuerpo cansado y frío, pero que al mismo tiempo me aprisiona y no me deja seguir a mis  padres, quienes ya se alejan y se desvanecen en esa bruma luminosa que me ciega repentinamente antes de dejarme sola otra vez. Una pared que me habla y me dice que todo estará bien y cuya voz suena idéntica a la del demonio; en definitiva...

¡Estoy alucinando!

Una fría y pálida luz muy diferente a la de mi alucinación, comenzó a filtrarse entre mis párpados cerrados.

Un largo bostezo siguió a mi conciencia antes de que me despertara por completo. Sentí la boca seca y con mal sabor, pero no se parecía en nada a la visión que poco a poco se materializó frente a mi cara cuando abrí los ojos ya completamente despierta.

Fue toda una sorpresa abrir los ojos y encontrarme tan cerca de mí ese rostro de mármol blanco reposando a mi lado. Claro que no se comparó con el terror que me comenzó a invadir cuando sentí esa mano como serpiente, enroscándose en mi cintura y subir por mi espalda con una lentitud desquiciante para, después atraerme hacia ese cuerpo de piedra que descansaba desnudo junto al mío.

"¡¿Desnudo?!"

Con mi corazón a punto de detener sus latidos. Muy despacio, levanté la polvorosa manta que nos cubría. Contemple con horror mis inquietantes sospechas. ¡Yo también estaba desnuda!

Me removí inquieta tratando de soltarme de su agarre. Mi mente estaba en blanco. ¡¿Cómo fue que terminé así?! Lo último que recordaba era el frío que sentía antes de quedarme dormida.

"¡Esto no puede estar pasando! ¡No puede ser real!".

—¿Ya despertaste? ¡Por fin! Estaba esperando que lo hicieras —el demonio comenzó a levantarse mientras yo me aferraba a la manta cubriendo con ella mi desnudes.

—¡No! —grité sorprendiéndome más al darme cuenta de que mi voz habíaregresado.

—¿Qué? —preguntó él como si nada.

The Infernal PrinceWhere stories live. Discover now