❛0015.❜

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—ricky.

Es final, esa chica ahora es mía y nadie podrá sacármela de la cabeza a no de ser...

Negué rápidamente mientras seguía en mi propio pensamiento, estaría unas semanas viviendo con Jaime habíamos hablado al respecto.

Ella abrió la puerta y al verme sonrió. —Finalmente estás aquí. —dijo y me abrazó con algo de fuerza.

Correspondí el abrazo y aspiré su aroma, un aroma dulce. —Así es, hermosa.

Aún no me saco a Andrik de la mente pero creo que es definitivo, ya no lo necesito, y todo había sido algo de miradas aunque para él sería algo difícil.

—¿Porqué duraste tanto en llegar? —preguntó y rió al final.

Fui a la casa de Andrik, a dejarle una pequeña carta explicando las cosas. No quería dejar un mal entendido entre nosotros.

—Tuve que comprar unas cuerdas para mi guitarra. —mentí.

Ella sintió con una dulce sonrisa.

—andrik.

Abrí la puerta sosteniendo el vaso con el jugo de cereza y el cigarrillo entre mi boca, Dev seguía dormido y no lo molestaría pues esa zorra dormía más que yo en un mes completo.
Caminé entre el césped hasta llegar al buzón, lo abrí pues la curiosidad me picaba la nuca, había un paquete que había ordenado por amazon, dos cartas y un sobre rojo.

Me senté en la orilla de la acera, abrí todos los sobres —dos de ellos facturas.— y finalmente uno que decía "Ricky." mi corazón se aceleró y una estúpida sonrisa de formó en mi rostro.

“no tengo la suficiente fuerza para decire esto de cara. Pero después de esto, me gustaría que tuviéramos la amistad que probablemente ambos queremos.

estoy saliendo con Jaime, desde hace dos días, esa chica es hermosa y no te tomes a mal pero ya no me gustas. Jaime hizo que sintiera algo por ella, lo siento enserio. Espero que sigamos siendo amigos.

Att: Ricky.”

Mi cuerpo quedó paralizado, me levanté con los ojos llenos de lágrimas y bajé la mirada rompiendo en llanto, soltando el vaso que inmediatamente se quebró apenas tocó el suelo.

—An, ¿Qué sucede? —preguntó con voz adormilada saliendo de la casa.

Ahogué un grito en la garganta, entregándole la carta. —SOLO ME USÓ. —grité.

Todo mi mundo daba vueltas, sombras iban y venían mientras sentía que me iba consumiendo en un agujero negro.

—Andrik. —llamó Devin con voz preocupada tomándome del brazo.

Seguí tambaleándome, logrando escuchar a Devin muy lejos. Hasta que finalmente caí al suelo.

ɴᴜᴍʙ┊ʀɪᴄᴋʏ ᴏʟsᴏɴ. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora