❛0026.❜

17 8 0
                                    

—devin.

Toqué la puerta otra vez. —An, vamos sal de ahí. —volteé a ver el reloj.

Eran las dos de la mañana, había pasado bastante desde que la boda había ocurrido.

—Dev, vete. —murmuró en forma de forma a callada con algo de dolor ahí.

Reí desde mis adentros—¿Te la estás…? —abrí la puerta buscándolo con la mirada entre la oscuridad de la habitación.

Estaba bajo las sábanas, me acosté a su lado por encima de estad y comencé a acariciarle la espalda de arriba hacia abajo escuchando como lloraba lo más bajo posible y como soltaba pequeños jadeos

—No pierdas la cabeza. —murmuré de forma tranquila acariciando su cabeza. —No dejes que un amor no correspondido te dañe, porque vales mucho y puedes valer mucho para alguien más.

Destapó su cabeza y volteó a verme algo asustado con su labio capturado entre sus dientes. —¿Me estoy volviendo loco?

Levanté un hombro. —Eso depende de tí, si te vas a quedar tirado en el suelo o te vas a levantar como las veces anteriores.

Sonrió forzadamente bajando la mirada, dejando que su cabello cubriera gran parte de su rostro. Me acerqué a él y en pocos minutos lo besé con lentitud, correspondió al instante aunque más por afecto sabía que lo hacía por necesidad.

Se hizo hacia atrás rompiendo el beso y me miró con esa típica mirada de susto que siempre el llevaba desde que recuerdo. —Te quiero, idiota.

Sonreí. —También lo hago.

Se levantó dejando caer las sábanas de la cama al suelo, observando su pálido cuerpo desnudo y aunque no era lo que más me importaba veía cada herida cuya cicatrización había sido horrorosa entonces habían quedado pequeños bultos en esta.

—¿Estará pasando en mí? —me preguntó en forma de murmuro encendiendo un cigarrillo.

—Es lo que menos debe estár haciendo cariño. —respondí sin darle importancia a dicha pregunta hecha por Andrik.

El menor soltó algunas lágrimas apretando el encendedor que aún tenía entre sus finas manos, mirándome con algo de angustia.

—¿Porqué me dejaste? —preguntó de la nada sin quitarme el ojo de encima.

—flashback.
—andrik.

Cerré la puerta detrás mío preparado mentalmente para lo que me tocaba ver —que no era nada bueno.— pues esos sonidos se escuchaban desde abajo, causándome un asco enorme.

—Pensé que solo podías con uno. —dije apenas abrí la puerta observando a Devin con esos dos tipos, mucho mejores que yo.

Los tres me miraron prácticamente que incoloros.

—Amor.—murmuró Sola.

Negué con la mirada hacia el suelo. —Te di una oportunidad y nuevamente, juegas conmigo.

ɴᴜᴍʙ┊ʀɪᴄᴋʏ ᴏʟsᴏɴ. Where stories live. Discover now