19. El día que disfruté

262 24 9
                                    

Lo tenía aquí frente mío con una rosa blanca en su mano. Me observo y aclaro su garganta —estoy aquí porque...quiero rogar que me perdones, me comporte como un real imbécil contigo; traigo esta rosa como símbolo de paz —me parecía algo tierno y gracioso en especial porque su aspecto hoy era de chico malo, su chaqueta negra, sus pantalones ajustados, su camisa gris y su cabello medio alborotado lo hacían lucir así —¿me perdonas?

—no —intente lucir dolida, aunque por dentro quería reírme —no puedo —bajó su mirada y rasco su nuca.

—supongo que tuve la culpa y ...entiendo. adiós, morena.

Giro para irse. Su paso era lento creo que espera que lo llame, pero lo dejare sufrir un poco más — ¡Jordan! —giró con una sonrisa en su rostro —¿enserió pensaste que no te perdonaría?

—no, nunca lo pensé —me extendió la rosa —esto es tuyo y gracias por perdonarme.

—no agradezcas, eres mi amigo y no quiero perderte —verdaderamente no lo quiero perder, pero la razón no era solo nuestra amistad —si quieres puedes pasar mamá está apunto de cocinar algo.

—suena tentador, pero yo vine por ti. Sé que no piensas ir al baile y por eso vine a invitarte a que te diviertas conmigo hoy.

—me gustaría, pero tengo que acompañar a mamá —su rostro tenía algo de decepción.

Morena deja de ser aburrida, tienes al hombre rogando de tu compañía y tu solo te quieres quedar en tu casa lamentándote como una desgraciada.

Creo que tienes razón

Obvio que tengo razón, recuerda que Jasson te pidió que no fueras aburrida ¿crees que a él le gustaría verte así?

No

¿y qué esperas para aceptar la propuesta de dios Jordan?

¿" dios Jordan"?

Cállate y acepta.

Es raro estar hablando conmigo misma y es algo que estoy haciendo frecuentemente —está bien, acepto solo déjame ir a cambiarme y decirle a mamá.

—esa es la actitud, Morena —levantó su mano para que chocara los cinco, acción que hice —te esperaré aquí.

—olvídalo, mamá se enojaría si te dejo aquí entra no tardo nada.

Entramos a la casa, Jordan espero en la sala y yo subí a mi cuarto a cambiar mi pijama por algo decente. Encontré un pantalón y una camisa de béisbol que compre hace tiempo, cambie mis pantuflas por unos zapatos cómodos y amarre mi cabello en una media cola.

Estaba lista, guardé mi celular en mi bolsa trasera y Salí de mi cuarto hacia la sala – estoy lista podemos irnos – Jordan se despidió de mamá y yo también – eres una gran cómplice Sully Woods, regreso más tarde.

-adiós amor cuídate, dejare tu comida en el refrigerador, diviértete lo mereces.

Salimos de mi casa y trate de buscar la camioneta de Jordan, no la veía por ningún lado – ¿y tú camioneta?

-se la preste a Donna y la chocó hace horas así que nos iremos en el auto de Tony – se hizo a un lado para que pudiera observar un carro color rojo que estaba aparcado al otro lado se la calle – ese pequeño será nuestra carrosa hoy.

-siento pena por tu camioneta, pero me encanta este carrito y su color – realmente era muy bonito este auto – ¿y Donna como esta?

-ella bien, pero no por mucho tiempo tendrá que pagar todos los daños que ocasiono en especial a mi camioneta, olvidemos a Donna y mejor sube.

Las Promesas © ✔Where stories live. Discover now