28. Apuesta de boda

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Año nuevo, no es mi día favorito, pero si un día súper tranquilo en el que te puedes levantar muy tarde, aunque el día se hace corto sientes que lo disfrutas mucho.

mi familia acostumbra hacer un pequeño viaje turístico, viajan a algún lugar que no esté muy lejos y conocen sobre él, siempre me ha gustado esta tradición, cuando Jasson vivía su familia nos acompañaba y juntos disfrutábamos de un inicio de año, luego que Jasson murió algo en mí se sintió extraño y no disfrute para nada el viaje.

este año tampoco lo disfrutare y no porque Jasson esté muerto, más bien es porque estoy tumbada en el sillón de mi casa con un termómetro de vidrio en mi boca -Morenita, tienes 37 de temperatura, no queremos dejarte aquí sola -mi abuela me observaba con dolor y mucha tristeza.

—abuelita, contraté un enfermero que me cuidara el tiempo que ustedes estén fuera —dije sin muchas fuerzas y con la vos casi cortada.

—¿quién es bendito enfermero? —el timbre de casa sonó y alguien fue a abrir—–creo que no debí preguntar porque estoy muy segura que es Jordán

yo asentí dos veces muy lentamente, él se ofreció a cuidarme para que mi familia pudiese disfrutar de este inicio de año, le comente que no quería arruinarles su tradición.

mamá se acercó a la sala con Jordán detrás, mi corazón dio un brinco al ver lo lindo que se ve hoy, desde noche buena no lo he visto y creo que cambio su corte de cabello —cierra la boca hija que estas apunto babear —se burló mi abuela.

Jordán se acercó a mí y se sentó en el sillón donde me encontraba, tome mi manta y me acurruque cerca de él, Jordán tomo mi manta y me cubrió con ella.

el claxon del auto de papa estaba sonando muchas veces —hija, nos iremos ya. por favor cuídala mucho, Jordán —mamá se acercó y beso mi frente—regresaremos pronto mi amor.

la abuela también se despidió besando mi frente y diciéndole algo en el oído a Jordán.

Cuando quedamos completamente solos no tenía ni menor idea de que íbamos hacer durante el día —¿quieres ver alguna película o que te prepare algo de comer? —no tenía apetito, pero si quería ver algo.

—no tengo hambre, pero busca algo en la tele que quiero distraerme un poco -tomo el control de la tele y busco algo que ver en los canales, hice que se detuviera en una película que recién iniciaba y de la cual estoy encantada —deja esa que me encanta.

—¿te gusta guardianes de la bahía? —pregunto incrédulo.

—sí, ¿porque no?

—es por zac Efron ¿verdad? —no sé si es la fiebre o qué, pero escuche algo de celo en su tono de voz.

me levanté levemente y di un pequeño beso a sus rosados labios —no, no es por el —dije todavía cerca de sus labios —es por the rock —reí mientras me separaba de él.

—eres muy cruel, pero yo soy más guapo que ellos los dos.

—si. Sí lo eres —dejamos de hablar y prestamos atención a la película que recién iniciaba

Durante he estado con Jordan he comprendido muchas cosas acerca de la felicidad, obviamente la felicidad no solo es el amor de pareja, pero ellos te dan el mismo sentimiento que las demás personas con un toque más satisfactorio.

Jordan me encanta en todos los sentidos, amo el color de sus ojos y la manera en la que ellos me observan, amo su forma de consentirme, amo sus labios y el sabor que estos tienen, es un sabor a pera algo dulce y jugosa cuando los pruebas, amo su forma de alentarme a ser yo misma, amo sus intentos de ser romántico, pero sobre todo amo que él me ame.

Las Promesas © ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora