Cap. 28: A la cima del mundo (Parte 2)

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—¡Hasta el fondo! ¡Hasta el fondo! ¡Hasta el fondo!

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—¡Hasta el fondo! ¡Hasta el fondo! ¡Hasta el fondo!

Reí desde la cocina, hasta allí se escuchaba el bullicio de la piscina. Todos se estaban divirtiendo, y ¿cómo no? Con Samuel eso es imposible; podrá no parecerlo, pero ese sujeto era tan sociable que nunca faltaba en una fiesta. No encontré a alguien mejor que él para pedir auxilio cuando escuché detrás de la puerta que ese día era el cumpleaños de Lop.

—¿Se están divirtiendo? —Me preguntó el entrenador, sirviéndose un trago mientras yo le ponía un poco de jugo de naranja a los míos.

Amo la naranja y esperaba que a ella también. Samu se molestó por varios minutos —que no teníamos porque estábamos decorando a toda prisa—, para enseñarme como hacer tres tipos de cocteles con hierba buena y frutas. Justo por ello era que todos afueran estaban tan alborotados.

Bueno, más de lo normal.

—¿Oye los gritos? Temo porque tumben la casa —Reímos un poco—. Gracias de nuevo por aceptar esto, espero no tenga problemas con el director por nosotros.

—Nadie dirá nada, ese es el trato —Se señaló con el vaso—. Yo no vi las botellas y ustedes no tomaron más que refresco y gaseosas —Asentí, riendo y negando en mis adentros.

No sé si tengo un mal o el mejor ejemplo a seguir frente a mí.

—Claro, claro —Pasé a ponerle una rodaja de naranja en los vasos y listos.

—Estoy aquí y no bebo mucho, así que los cuidaré. Además —Interrumpió mi festejo interior. Él miraba hacia el exterior—, esa niña lo merece.

Por alguna razón siento que había otro significado en la oración y miré desconcertando al entrenador, quien se encogió de hombros y, sin decir una palabra al respecto, se retiró para vigilar al grupo, dejándome solo con mis dudas.

Pestañeé incrédulo.

Debió ser el alcohol.

Extrañado, vi los cocteles, recordando para que me quedé en la cocina a hacerlos, luego de que todos ya tuvieran el suyo y los hice de último. Dejando mi puesto de barman de lado, los tomé y salí con los demás, admirando un segundo desde las escaleras el festejo.

Distancia al mundo ✔️Where stories live. Discover now