Más que un chico malo

Capítulo 25

Me levante en la mañana con un terrible sentimiento de culpa encina, Iris me habia gritado que me odiaba y Blythe se habia ido llorando de aquí especificando claramente que no queria estar compartiendo el mismo espacio conmigo, ¿por que las mujeres son tan difíciles?
Sali de mi habitación para preparar el desayuno pero no podia realizar ninguna accion en especifico sin dejar de pensar en aquellas palabras de mi hermana, me dirigí a su habitación y toque la puerta un par de veces, entre a su habitación observando el bulto en su cama cubierto por sabanas.

—De acuerdo, se que me odias y esta es tu gran manera de ignorarme pero solamente quiero que ne escuches—dije pero ella no respondio—. Estas molesta, lo se pero tan solo quiero que me entiendas un poco, tu siempre has sido muy lista y un tanto perspicaz así que se que comprenderas que las situación que vivimos no es sencilla. Papá siempre a estado en prision para ti y no quiero que pienses que eso es normal, no quiero que te acostumbres a verlo asi, no quiero que pienses de él de una mala manera, es un hombre bueno y bondadoso que no merece estar en un lugar asi, me hubiese gustado que tus recuerdos sobre papá sean los mismos que yo tengo—le confese mientras me sentaba en la cama
—la de un hombre hogareño que se desvivia por su esposa e hijo, no la de un preso que es consumido por el tiempo.... Si quieres verlo tendras que decirme pero no quiero que involucres mas de lo debido a Prince, ¿que tal si hacemos un trato?—pregunte mientras giraba a verla aun cubierta por las sabanas—. Iris, ya no sigas molesta conmigo, ¿Iris?

Pregunte preocupando, quite las sabanas para observar un bulto de almohadas, me levante de un salto de mi lugar y busque debajo de la cama y incluso en su armario.

—Iris esto no es gracioso.— dije molesto mientras buscaba en el baño, incluso en la habitación de Prince pero ella no estaba. Corri hacia el hogar de Felicity para comenzar a golpear la puerta sin parar.

—¿Que?—pregunto el señor Diaz mientras abria la puerta para despues escupirme el humo de su cigarro en mi rostro.

—¿Se encuentra Iris?

—No—respondio de inmediato.

—¿Donde esta Felicity?

—Fue a ver a su hermana, se marcho desde el viernes.

—¡Maldicion!—Exprese y el señor Diaz solamente me cerro la puerta en el rostro. Volvi al departamento para tomar mi celular que habia dejado en la cocina, en el refrigerador observe la lista de los numeros de emergencia que Blythe le habia escrito a Iris y entre ellos se encontraba su numero de celular por lo que le marque con la esperanza de que me contestara. Sali del departamento con prisa para presionar sin parar el botón del ascensor en espera de que Prince tomara el telefono.

—Hola, ¿quien habla?

—¿Iris esta contigo?

—¿Leslie?—pregubto confusa.

—Si soy yo—respondi mientras entraba al elevador—¿No esta Iris contigo?

—No. ¿Que sucedio?

—Quise hablar con ella en la mañana pero no se encontraba en su habitación.

—¿Como que no estaba en su habitacion?—pregunto con pánico.

—Ahora mismo saldre a buscarla, pero si ella aparece dimelo por favor.

—¿Iris?—la escuche preguntar—. Leslie espera, Iris esta enfrente de mi hogar.

—¿Que?

—Te llamo después.

—Espera, ¿donde vives?—pregunte pero ella ya habia colgado. ¿Por que demonios las mujeres son tan dificiles?