• Epílogo •

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-Sí quiero...

-Entonces yo os declaro unidos en santo matrimonio, podéis besaros.

Un chico peliblanco y un chico rubio unieron sus labios rodeados de aplausos y vítores. Yoongi y Jimin, estaban casados, y por supuesto, llevando el pelo con los colores que llevaban la primera vez que se vieron, todo a modo simbólico.

Poco a poco, fueron separándose, se dieron una sonrisa y fueron a saludar a todos sus invitados.

Había pasado un año desde aquel inolvidable concierto en Seúl, muchas cosas habían cambiado, por ejemplo, Taemin y Minho ya estaban casados, y habían decidido adoptar un bebé, Hoseok y Taehyung formaron su propia fundación para ayudar a niños y niñas con problemas de todo tipo mediante el baile y la música.
Jin dejó la cafetería y se dedicó al diseño, tenía su propia línea de ropa e incluso había creado a un personaje característico de su marca; RJ ("R" por RM y "J" por Jin); una alpaca blanca con un pañuelo rojo, que por cierto, había triunfado, pues había todo tipo de merchandising en cualquier tienda dedicado a la pequeña alpaca. Por supuesto, el pelinegro contaba con el apoyo de Namjoon, que al igual que Yoongi, Hoseok y Jimin, seguía dedicándose a la música.
Por otra parte, Jungkook y Yugyeom vivían juntos en Busan, y ambos, especialistas en artes marciales, habían formado una escuela bastante conocida por toda la ciudad.

Ese día, celebraban la unión entre dos personas que al principio parecían incompatibles, ese día, no pararon de bailar, cantar, reír y divertirse, algo que extrañamente, no abrumó al rapero de piel pálida, pero aún así, llevó a su esposo a un lugar más tranquilo, a la luz de la luna, observando aquellos ojos que tanto amaba mientras agarraba sus pequeñas manos.

-Jimin... Gracias por llegar a mi vida...

-Gracias a ti por no echarme de ella...

Ambos rieron y dejaron sus frentes juntas mientras que Yoongi dejaba sus manos en la cintura de Jimin y este, las suyas en los hombros de su gatito.

-Te amo...

-Y yo a ti...

Sin decir más, puesto que no era necesario, unieron sus labios en un dulce y suave beso, lleno de amor.

Y así, es como dos personas encontraron el amor de la forma más inesperada, así es como el destino jugó sus cartas uniendo a dos personas que parecían completamente incompatibles, por fin, hizo aquel fino hilo rojo tan indestructible como el acero.

Sex Contract 2 • YoonminWhere stories live. Discover now