cap 8

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Aquella conversación estuvo bastante cargada de tensión pero al final Lauren logro convencer a a su novia que Nina solo era pasado y Camila le creyó. Luego vino la reconciliación y se pasaron toda la tarde cocinando y haciéndose mimos.Camila casi se desmayó al enterarse que esa rubia era la famosa Nina. Aquella era la mujer que había llamado Lauren la primera vez que estuvieron juntas. Sintió como una daga atravesaba su corazón y fingió quedar tranquila pero no podía. No podía evitar temer perder a Lauren porque ahora era el centro de su vida. Pensaba que el día que la perdiera, aquel mismo día no tendría sentido seguir viviendo. Se esforzó toda la tarde por demostrarle a Lauren que ella era la única persona que podría amarla más que a su vida y casi se convenció que la visita de la rubia no había afectado a su chica por la forma en que Lauren se comporto con ella. Sin embargo en la soledad de su cuarto al dormir regresaron a su mente aquellas horribles y a la vez hermosas palabras:

- ... te amo... te amo tanto Nina... No Camila, no. Ahora te ama a ti, solo a ti, se repetía asimisma.

Nina no se iba a quedar tranquila e ideo un plan para quedarse con Lauren. Tomó el teléfono y llamo a alguien que sin saberlo la ayudaría.

- Alo? Si me puede comunicar con Ely?

- De parte de quien?

- Nina, Nina Khleb.

- Un segundo.Un minuto después:

- Alo?

- Ely?

- Si, Nina?

- Si! Amiga como has estado?

- Wow! Nina que sorpresa! Cuando regresaste al país?

- Hace algunos días. Dime, podemos vernos?

- Si, claro. Cuando?

- Mañana en...Y dando la dirección de encuentro terminó la llamada y siguió maquinando su plan.

- Esta vez no pararé hasta llegar a Holanda. Lauren, serás mía... para siempre.Y en su rostro una sonrisa de triunfo se dibujo.

Sin duda era un mensaje raro el que había recibido. Calle Trece #123 apartamento 506. Quien viviría en ese lugar?, se preguntaba Camila. Y sobre todo con que motivos le habían dicho que vaya? Tenía un mal presentimiento. No quería ir pero en ese momento sonó nuevamente el celular y al tomarlo vio un mensaje nuevo. Abrió la bandeja de entrada y era el mismo remitente de la página Web de la compañía. Tenía miedo de abrirlo pero lo hizo:

- Vaya a la dirección que le envié hace unos momentos, le conviene si quiere saber en dónde y con quien anda su novia. Se llevará una gran sorpresa, 5pm en punto –otra vez sin remitente.

Eso la terminó de convencer. Qué demonios tenía que ver Lauren en eso? Su corazón pego un salto al pensar que podía ocurrirle algo a su pelinegra amada.Miro el reloj. Cuatro y quince minutos de la tarde. Ya faltaba poco y llegar a esa calle le tomaría media hora sin tráfico. Tomo las llaves de su auto y salió rumbo a la dirección indicada.Al llegar noto que la zona era residencial. La mayoría eran edificios muy elegantes y poca gente en los jardines paseaba perros bastantes bien cuidados. Al buscar la dirección se dio con la sorpresa que ahí estaba el auto de Lauren.

- Qué demonios...?Se estacionó al costado del auto de Lauren y verificó la dirección: era la misma. Aquello no le estaba gustando nada. Nada de nada. Tomó aire y bajo del auto, cerró todo y entró al edificio. Cuando se acercó al portero y preguntó por el número de departamento se sorprendió ante la respuesta:

- Usted es...?

- Camila Cabello.

- Oh, claro adelante. La están esperando.

- Cómo?

- Pase, es el ascensor de la derecha.

- Ehhhh... este... gracias

.- De nada.

El amable joven sonrió y siguió leyendo su diario. Tomó el ascensor e indicó el quinto piso. Al llegar empezó a buscar el número indicado y al hallarse frente a el no supo si tocar o no el timbre. Justo cuando lo iba a hacer se abrió la puerta por si sola. Camila se asustó y espero ver a alguien detrás de la puerta pero no había nadie. Entonces hizo lo que no debió hacer y lo que su cabeza dictaminó. Siguió el camino de lo que pareció un pasillo y al llegar a su fin dio vuelta a su derecha. Todo sucedió en cámara lenta. Volvió la cabeza y vio lo que jamás quiso ver. Lo que hubiera deseado antes morir que contemplar: Lauren recostada en un sofá, encima de ella una rubia besándola y aprisionando a la pelinegra entre el mueble y su cuerpo. Camila sintió su corazón detenerse y su cabeza explotar. 

Sintió como el piso se movía bajo sus pies y algo taladraba sin detenerse en sus sienes. Lo único que hizo fue irse sobre aquella rubia que estaba besando a su Lauren y sacarla de su encima.La rubia al sentir una fuerza tremenda alzarla y separarla de los labios que estaba besando perdió total dominio de su cuerpo y lo único que sintió fue su caída e impacto contra el suelo.Lauren sintió como al fin le devolvían el aire al quitarle a Nina de encima y al fin pudo respirar. Se sentía muy débil y no tenía fuerzas para nada. Los ojos se le cerraban y solo susurró:

- Cami...la... 

estaba dispuesta a irse encima de Nina y matarla. Después pensaba matar a Lauren también pero primero le arrancaría esas exuberantes pestañas a la rubia que ahora yacía en el suelo viéndola con expresión de terror. Pero algo en su mente registro la voz de Lauren. Se volvió a hacia su chica y la vio intentar levantarse pero algo hizo que rodara sofá abajo y se quedara en el suelo.

- Lauren!

Se acerco a ella y al volverla para ver su rostro se asusto: Lauren tenía los ojos semiabiertos pero estaba inconsciente.

- Lauren... Lauren... Háblame... háblame por favor... Qué te pasa?... Amor qué te pasa?

Las lágrimas se anegaban en sus ojos mientras intentaba reanimar a su amada. Pero Lauren no despertó. Toda rabia desapareció y solo estaba ahí el terrible miedo a perder a su amada. Qué demonios estaba pasando? Solo atino a subir como pudo a Lauren al sofá y tomar su pulso.

- Aún está viva...

Sin siquiera prestarle atención a Nina, tomó su celular y marcó un número de emergencia.

- Alo?... si... una ambulancia por favor! Es urgente! Calle...Dio la dirección y colgó. 

La ambulancia llegó en unos minutos y se fue con Lauren. Ella bajó con los enfermeros que ya tenían estable a su amada. Subió a su auto y se dirigió al hospital.

Amarte asíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora