The Duties Of Royalty ©

Parte 19

—Perdón.

¿Perdón? ¿Por qué perdón?

Podía pensar que Charles estaba un poco ebrio, pero tenía sus labios cerca y su aliento no tenía nada de olor a alcohol.

No supe que responder porque no sabía a que se refería, lo único que sabía con certeza es que sin importar lo que haya echo antes, estar acá con él era demasiado bueno y no quería que terminase.

—¿Perdón?

Pregunté esperando que respondiese, pero no lo hizo.

Lo único que hice fue recargar mi cabeza en su cuello y seguir bailando.

La música era muy tranquila y mientras estaba muy cómoda con él, a lo lejos divisé a Dexter, que me observaba con tristeza o con decepción–no lo entendía–en este momento no sabía quién era más mierda con quien. Creo que si tuviese las ganas suficientes para salir corriendo de este lugar y de esta farsa podría hacerlo, sin embargo sé que estar dentro de toda esta mentira es un lugar seguro para estar cerca de Charles. Tal vez lo único que tenía que hacer era actuar antes, cuándo no sentía absolutamente nada por él.

Ya era tarde.

—¿Por qué aceptaste?

Claro que sabía a que se refería.

—Te sonará absurdo—suspiré— pero siento que dependo mucho de ellos, en realidad lo hago y por eso siento que debo hacer lo que me dicen, como una niña.

—No deberíamos.

—Lo sé, pero ya estamos aquí.

Él solamente sonrió cabizbajo.

—¿No estás cansada?

—No tanto.

—Eleanor por favor, solo quiero un motivo para regresar al palacio y dormir.

Empecé a reír.

—Estoy exhausta.

La manera en la que me empezó a ver hizo que estallara algo dentro de mí, emociones, ilusión...

Él tomó mi mano y aviso a su abuela que nos retirábamos, ella al ver que iba conmigo asintió y sonrió.

Todo iba bien, en el camino hasta el palacio la conversación no faltó y aunque era algo no interesante, me alegrase que volviésemos a hablar. Los tacones empezaron a fastidiarme y agradecí estar dentro del palacio, habían algunas personas dentro que saludamos de paso y por fin subimos para cada uno ir a su habitación.

—Nunca pensé que nos llevaríamos tan mal, Eleanor.

Charles y yo nos detuvimos, giramos para ver de quién se trataba, era Hadley.

—¡Vas a casarte!—exclamó— Todos lo saben, menos tú. ¿Podrías respetar un poco a Charles? Y si no eres mujer de un solo hombre, ¿podrías alejarte del mío?

—¿Perdón?

Hadley podría estar ebria, no quería hacer algo que después se malinterpretara, tenía a Charles de mi lado observando todo pero el tampoco entendía nada.

—Solo quiero pedirte un mínimo favor, y es que no te hagas la desentendida—Hadley empezó a acercarse— eres una ofrecida.

—No se de que hablas y tampoco tengo tu tiempo.

Me dí media vuelta con la intención de evitar esta conversación.

La sangre me empezó a hervir cuándo sentí su mano jalándome el brazo, para luego intentar abofetearme.

—¿No sabes de qué hablo? ¡Lo besaste!

No escuche lo que dijo con claridad, me detuve unos segundos antes de asimilar lo que había hecho. No lo pensé dos veces antes de responder fuerte y mandarla a la mierda de una vez, pero el mismo Charles me detuvo.

Me sentí tan humillada en ese momento. ¿Estaba de su lado?

—¿Desde cuando estás con él?—me gritó Hadley, hizo que dejara de ver a Charles con incredulidad.

—No estoy con nadie.

—Te vi como lo tocabas, Eleanor respétate—dijo y noté que sus ojos estaban rojos— ¡Lo besaste! ¿Escuchaste Charles? Tu mujercita besó a Dexter Sabater.

¿Dexter?

¿Estaba haciendo todo esto por Dexter?

—¿Tú y él...?

Válgame por el cielo, no podía ni siquiera hablar. Me había caído como balde de agua helada.

—Y es gracioso que te metas con él para joderme, pero sabes ¿qué es peor? que ambos se presten para algo más bajo, ¿Casarse? ¿Casarse sin amor?

No presté atención a eso, el que si lo hizo fue Charles, pues de inmediato se sobresaltó, que Hadley lo supiese era guerra en contra de la corona.

—Hadley, ven conmigo—Charles la llevo, a fuerzas pero la llevo.
No escuché las razones, y no me interesaba. Solo no podía creerlo.

Dexter y Hadley.

¡Dexter y Hadley maldita sea!

Corrí a mi habitación, me derramé en la puerta después de cerrarla, no podía llorar y quería hacerlo, no podría con tanto coraje dentro, porqué sentía enojo, rabia.

¡Me sentí como la mierda todo este tiempo! Incluso hoy, creí que él estaba mal y no es que lo quisiera así, solamente creí que de verdad sentía algo por mí. No estaba mal, tiene derecho a estar con quien quisiera, pero ¿Por qué se empeñó en hacerme sentir mal? ¿En no responder, en decirle a mi hermano que yo había sido cruel?

No sabía desde cuando estaba con Hadley, pero no era poco tiempo y apenas hoy...

Todo estaba conspirando mal, todo estaba saliendo mal.