The Duties Of Royalty ©

Parte 27

Hadley y Dexter estaban sentados en otra mesa, me alegraba que fuese así. Charles parecía estar feliz, después de dar un discurso de parte de la corona se dió por terminado los protocolos y ahora tocaba "disfrutar".

Ya varios se encontraban bailando, otros; como Charles, estaban en conversaciones muy agradables por las carcajadas que de vez en cuando soltaban.

Este lugar tenía una pinta distinta, la mayoría de los que se encontraban aquí aparentaban mi edad y no la de mis padres como ya era costumbre, esto era más agradable. Suponía que la ausencia de la reina fue motivo de que no hubiese tanta seriedad.

Colton y Charles entablaban una conversación con otros más, se veían tan cómodos que no se habían percatado que ni Zara, ni yo estábamos ahí y reímos por eso.

—¿Te agrada chocolate o arándano?— pregunta Zara.

—No tengo favorito.

—Te aseguro que si pruebas esto—me dió un bocadillo— odiarás los arándanos para toda tu vida.

—No estes tan segura—sonreí— crecí comiendo todo tipo de estos antes que mi abuelo nos dejara comer chocolate dentro del castillo.

—Bien, degústalo.

Zara parecía muy segura, mantenía que esto no me agradaría y lo veía imposible pues solo es arándano, relleno de arándano.

—No es imposible de tragar, pero tampoco es agradable. Cualquiera puede mantenerlo y aceptarlo.

—No te estés justificando.

Ella sonrió.

—No lo estoy haciendo, solo digo que cualquiera lo toleraría excepto si eres Charles Windsor.

—Sé cortes y mándale algunos.

—Pareciera que no lo conocieses.

Le dí una mordida al bocadillo, no me desagrada el arándano al contrario me gusta tremendamente y eso me hace jurar que esto no es arándano puro, esto esta mezclado con algo. Evite hacer gestos malos, y al contrario sonreí.

—No es horrible, pero tampoco pagaría por uno de estos.

Zara se echó a reír.

—Prefiero chocolate.

—Lleva nueces.

Por el cielo.

Me aleje.

—¿Qué?

—Soy alérgica a las nueces.

Zara parecía no creerlo, inclusive pensó que estaba bromeando.

—Todo bocadillo o postre que tenga que ver con la nuez, es gloria para Charles.

Dí una sonrisa pequeña y empezaba a creer que todo estaba contra mía, todo lo que a mi me afectaba resultaba placentero para Charles; inclusive lo que nos llevamos a la boca.

—No es un problema—dije— no me alimento de su boca. El puede comer nuez y yo—levanté el pedazo de bocadillo— ¡esta maravilla!–– dije irónicamente.

Zara río y salimos afuera. Nos sentamos en una de las bancas y divisamos a los lejos que Marie y Nicholas estaban en una de estas, casi de las últimas bancas cerca del lago artificial. Pasamos mucho tiempo conversando y es que si teníamos muchísimo que hablar pues desde que supo que mi compromiso con Charles era arreglado no se había molestado en preguntarme nada hasta ahora. No me medí al momento de decir todo como realmente fue y lo que yo era antes de todo esto, eso incluía a Dexter. Como me sentí cuando lo escuché, cómo me sentí aún después de haberlo aceptado y estaba cayendo en la conclusión que tal vez y si quería hacerlo, pero no aceptarlo.  Como había sido mi vida desde que llegué y lo agradecida que estaba con ella por haber estado conmigo desde el primer día. Mis mañanas, cada que me preguntaba porque lo había echo, la manera en la que había faltado a lo que mi abuela siempre nos repitió a todos.