⚫JUST2⚫

14.- Tranquilo

Hajoon bajó después de una hora, tenía las manos terrozas y las regordetas mejillas de un brillante color rojo.

— ¿Te vas a dar un baño?— le preguntó Dojoon desde su habitación, estaba desdoblando un par de cobijas.
— Si.

— Sobró agua caliente, debe de alcanzarte.

— Sí— asintió yendo a donde ubicaban las toallas y ropa de baño.

Dojoon caminó detrás de él besando su mejilla y diciendo que se apurara porque si no iba a resfriarse.

— Después veremos algunas películas.

El castaño asintió e ingresó a la ducha agradeciendo por la calidez del agua y salió después de un par de minutos.

— Hajoon, ¿entonces esta navidad la pasaremos aquí?— le preguntó Dojoon guardando su ropa en los cajones correspondientes.

— Supongo, aunque talvez tu tía se reponga y para el 24 ya estén de regreso tus papás.

— Eso espero.

Ambos guardaron silencio, el azabache secando su cabello mientras que su pareja buscaba la pareja de un par de calcetines que no encontraba.

— ¿Y bien?

— ¿Uh?

— ¿Mi plan es un éxito? Claro que sí— celebró moviendo sus caderas de manera jugetona.

— Solo llevamos un día— lo calmó Hajoon,— pero es un avance.

Dojoon le sonrió y caminó a él besándolo con cariño, porque eso era lo que buscaba, paz por ambos lados y aunque solo se llevaba un día, era en definitiva un buen comienzo.

—¿Hoy vemos una película?— le preguntó, dejando caer su cabeza en la curvatura del hombro de su novio.

— Claro, mañana podremos ir por las decoraciones para la casa.

— Está bien.

Dojoon ocultó su emoción, porque el amaba decorar la casa cuando era navidad.

***

— Ya terminé de acomodar mi ropa, oppa, ¿ya puedo ver algo en mi celular?

Dojoon asintió y ella rápidamente corrió de vuelta a su habitación.

Hajoon suspiró aburrido, llamando la atención de su pareja, quien de igual manera miró a su alrededor buscando alguna actividad que hacer.

— ¿Quieres ver algún drama?

— No— negó suavemente empujando a Dojoon para que se recostara y él se dejó caer sobre el cuerpo de su novio.

— ¿Dónde crees que deberíamos poner el árbol mañana? ¿Qué color quieres usar?

— Rojo estaría bien, así combinará con los muebles— murmuró.

— Hoy es un día muy tranquilo, ¿no lo crees?

Hajoon asintió, aún recostado sobre su pecho.

—…¿ya no tienes nada que enviar a tu trabajo?— preguntó.

— No, ya les he enviado lo de toda las vacaciones, de hecho— se levantó, recargando ahora sus palmas sobre su novio y este quejó suavemente— Jaehyeong ya terminó las ediciones de todo, solo están esperando a la programación y su impresión.

Dojoon intentó ocultar una mueca ante la mención del otro joven y abrazó a Hajoon con fuerza.

— No me gusta.

— A mí tampoco— el mayor parpadeó confundido— no veo la razón de estar tanto tiempo sin hacer nada, ¿debería darme una vuelta por la agencia?

— No. Quédate conmigo y pasemos tiempo de caridad.— Comentó con un tono diferente, casi coqueto.

— Danhi se encuentra aquí.— Evadió rápidamente.

— Podemos encargarsela a la vecina Min, tiene una hija de creo la edad de Danhi, pueden llevarse bien. Los tres ganamos.— Opinó rápidamente, implorando al menor una respuesta positiva.

— De hecho sería una buena idea, así ella estaría en otro entorno.— susurró para sí mismo.

— ¿Ves? Soy un genio.

Hajoon sonrió asintiendo.

— Uhum, claro que lo eres mi amor.

— ¿Me darás una recompensa por ello Hajoonie?— inquirió besando su cuello.

— Cuando Danhi no esté cerca.

Dojoon entonces se levantó, empujando al castaño quien extrañado de que se alejara repentinamente y le dejara de besar lo vió marcharse por el pasillo.

— …pero oppa no quiero ir.

Hajoon entonces se levantó serio y preocupado.

— ¿Dojoon, a donde llevas a Danhi?

— Debe ir a socializar con la hija de la señora Min.

Dojoon salió con su hermana tomada de la mano, y cinco minutos después ingresó de nuevo, tan tranquilo que a Hajoon le sorprendió.

— ¿Y en qué estábamos?