Capítulo 26

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Capítulo 26:-

Almorzaron en silencio, como nunca antes, cada uno preocupado de su alimento. Beatriz se sentía un poco incómoda, no sólo porque le había contado su más íntimo secreto, sino también porque Daniel no había hecho ningún comentario desde entonces. Sólo se había limitado a prestarle atención a su plato.

"¿volverá al trabajo?" Preguntó Daniel una vez que hubo terminado de beber su refresco.

Beatriz negó con la cabeza, no tenía ganas de volver y enfrentar a Armando Mendoza, eso lo dejaría para el día siguiente. En ese momento su único interés era Daniel Valencia, y ella misma.

"Bien, entonces me tomaré el atrevimiento de retenerla un tiempo más en este lugar" comentó sentándose de piernas cruzadas y mirándola a los ojos. "Señorita Pinzón, creo que aún quedan algunos asuntos pendientes por hablar"

*

Después de haberse tomado medio litro de whiskey y haber dormido más de dos horas, Armando despertó sintiéndose incómodo por la posición en que estaba, luego se sintió avergonzado por su manera de actuar y enfrentar las cosas. Pasó las manos por su rostro para despertar bien y a duras penas se levantó de su escritorio para caminar a paso lento hacia la puerta.

Cuándo salió, se sintió intrigado por el silencio que había en Ecomoda, temiendo que fuera de noche, vio la hora en el reloj que estaba en su muñeca y descubrió que eran a penas las cuatro de la tarde, entonces ¿por qué había tanto silencio en los corredores?

Visualizó a Sandra muy concentrada en su escritorio y caminó hacia ella para salir de sus dudas. Al pasar por el escritorio de Patricia, esta le hizo una mueca con la boca, pensando en lo descarado que era. Todos los que estaban allí habían escuchado los gritos que daba mientras estaba borracho, era increíble que no lo recordara y que saliera con la frente bien en alto de su oficina. Cosas de ricos, pensó mientras finalizaba el trabajo que le había pedido Marcela.

"Buenas, Sandra" saludó despacio una vez que llegó a su escritorio, la nombrada le devolvió el saludo nerviosa, como de costumbre "Respóndame una cosa, ¿Betty ya llegó?" Esa era su mayor duda.

"No, doctor, no ha llegado" respondió sin mirarlo a los ojos, conocía de memoria el temperamento de su jefe y no quería regaños.

Armando sintió el impulso de golpear la mesa y todo lo que estuviese a su alrededor, pero se contuvo. Aunque imaginarse a Beatriz con Daniel, haciendo quién sabe qué, lo amargaba profundamente debía mantener la compostura.

"¿y se puede saber por qué no ha llegado?" Volvió a preguntar en tono calmado, con los brazos apoyados en el escritorio.

"Ay eso si que no lo sé Doctor, la que debe tener esa información es Aura María" le dijo con una sonrisa nerviosa.

Armando asintió desganado,"por favor llame a cafetería y haga que lleven una pastilla para el dolor de cabeza y un vaso con agua a mi oficina", pidió antes de ir al escritorio de Aura María.

"Buenas tardes doctor" saludó cuando lo sintió llegar, sabía a que había ido a su escritorio y no pensaba darle la información que quería.

Aura María había escuchado cómo Armando había tratado a su jefa y no le parecía correcta su actitud. Estaba decidida a estar de parte de su amiga al cien por cierto, aunque eso significase problemas con Mendoza.

"Aura María, dígame porqué Beatriz no ha llegado aún" le ordenó bruscamente, ya que estaba completamente despierto.

"Dijo que no regresaría hasta mañana, doctor" respondió sin mirarle, pues estaba haciendo todo lo que Betty le había pedido.

Yo soy Betty, la fea; Betty × DanielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora