17

11.4K 574 325
                                    


Llegamos al boliche y ni bien pasamos la puerta ya se empezó a sentir el olor a alcohol y otras sustancias.

Entramos todos juntos y fuimos hasta la barra para elegir lo que cada uno quería tomar, una vez que ya todos tenían sus vasos nos dirigimos a la parte VIP que había alquilado Mateo exclusivamente para nosotros.

—¿y enano como la estás pasando?—le grite a mi amigo que se encontraba sentado en un silloncito.

—De diez compa—reí, al parecer no era la única en pedo—¿Vamo a baila?

Asentí y lo agarre de la mano para ir al centro de la pista.

Con las manos de Mateo en mis caderas empecé a moverme de un lado a otro refregando mi culo sobre su entrepierna.

—no hagas eso—hablo como pudo.

—¿Que cosa?—me hacía la desentendida y seguía bailando.

—Eso boluda no te haga la tonta—apretó con sus dedos mis caderas provocando que la pollera se baje un poco y sus yemas rocen mi piel causando un escalofrío en todo mi cuerpo.

—¿Esto?—pregunte mientras refregaba más mi culo por su zona, no se porque lo hacia pero lo estaba disfrutando.

—Vos te la buscaste—me dio vuelta de una manera brusca y enterró su cabeza en mi cuello dejándome en shock.

Empezó a dejar besos húmedos sobre este y fue subiendo hasta mis mejillas, donde dejó más besos, y así hasta que llego a mi boca pero antes de seguir su recorrido se detuvo.

—Es tu única oportunidad para pararme—hablo serio.

Yo estaba confundida, no entendía que era lo que estaba haciendo y porque.

Me quede en silencio mirándolo a los ojos esperando que de el siguiente paso, si bien sabía que ambos estábamos en pedo y que sobrios esto no estaría pasando, no me limite a alejarme.

Quería que siguiera.

—Creo que ese silencio ya contestó—dijo con una sonrisa para luego atacar mi boca.

Era un beso desesperado de ambas partes, como si estuviéramos aguantando las ganas hace mucho tiempo y finalmente había llegado el momento de sacárselas. Nuestras lenguas estaban en una guerra y nuestras bocas parecían que se quisieran comer. El beso cada vez era más fuerte y Mateo llevo ambas manos hasta mi culo apretándolo y haciendo que yo suelte un gemido en su boca.

Ya nos estábamos quedando sin aire así que lentamente nos fuimos separando, ambos estábamos muy agitados.

—Ahora si enana—hablo con una sonrisa y luego se dio la vuelta y se fue dejándome a mi ahí, con el corazón acelerado, mi cabeza confundida y mis sentimientos pata para arriba.

No entendía nada de lo que acababa de pasar, primero me beso como si no existiera un mañana, como si estuviera aguantando las ganas hace mucho tiempo, y luego se fue, se fue y me dejo ahí sola.

Estaba en el medio de la pista sola, estática, sin saber que hacer o a donde ir.
Empecé a caminar por todo el boliche para ir al baño y retocarme el maquillaje ya que el labial se había corrido todo.

Una vez lista hice mis necesidades y salí dispuesta a ir hacia la parte Vip donde estaban mis amigos.

Fui pidiendo permiso y corriendo a la gente para poder pasar hasta que finalmente llegué y al instante me arrepentí.

Mateo y Nicol, otra vez.

Lo que vieron mis ojos me hizo mierda, Mateo sentando en el sillón con Nicky arriba de él besándose desesperadamente, besándose de la misma forma que lo había hecho conmigo.

Aunque no quería esta vez no me pude contener y unas lagrimas empezaron a caer por mis mejillas. Trate de irme lo más rápido que pude para que nadie se diera cuenta pero un brazo me frenó.

—No te merece Mica—dijo Manuel y tiro de mi brazo para envolverme en un abrazo.

El era el único que sabía lo que me pasaba y por eso era el único que podía calmarme.
Me aferré a su cuerpo y empecé llorar con todas las ganas, descargándome, sacando todo lo que venía aguantando desde la primera vez.

Ya no podía más, finalmente había explotado.

—Vamos—dijo tirando de mi brazo y yendo hacia la puerta—hoy vas a venir a dormir conmigo, no pienso soltarte un segundo—me dijo con una sonrisa.

—sos todo lo que está bien Manu—le devolví la sonrisa mientras me secaba unas lagrimas.

Manuel le mando un WhatsApp a los chicos avisándole que nos fuimos porque yo me sentía mal y nos subimos a su auto para tomar viaje hasta su casa.

Llegamos, eran las 4 de la mañana pero ninguno de los dos teníamos sueño así que subimos a su habitación, Manu me prestó una de sus remeras para que estuviera más cómoda y nos acostamos en su cama a hablar.

—No llores más Mica, el es el boludo que no se da cuenta la tremenda mina que tiene al lado—dijo abrazándome y dejando un beso en mi cabeza.

—Manu no puedo más—suspiré dejando caer otra lagrima—el hijo de puta me beso, me beso y después se fue a comerse a la otra—me sentía la peor mierda por dejarme humillar así.

—Está en pedo y se pone boludo, seguramente no lo hizo con intención—sabía que Manuel tenía razón pero de todas formas me dolía.

—Es que no es su culpa, yo soy la idiota que se enamoró de su mejor amigo, yo soy la pelotuda que se dejó besar sabiendo que solo lo hacía por estar borracho, yo sola me lastime—mis lagrimas no dejaban de caer y el dolorcito en el pecho cada vez se hacía más fuerte.

—No Mica, vos no tenes la culpa de nada, nadie elige de quien enamorarse—me empezó a hacer mimos en el pelo—el en algún momento se va a dar cuenta de la mujer que tiene al lado y quizás sea demasiado tarde y vos ya lo hayas superado o quizás finalmente ambos se la van a jugar por lo que sienten—era increíble como este pibe siempre tenía las palabras perfectas para cada situación, me animaba y estaba para mi siempre que lo necesitaba, realmente no se como estaría ahora si no lo tuviera a mi lado.

—Te amo con locura Manucho—lo abrace bien fuerte y le di un beso en la mejilla.

—Y yo a vos mi pequeña—sonreí.

Ya me empezaba a agarrar sueño así que me acomode en su pecho y me quede así hasta quedarme dormida.





"""""""""
Pobre Mica lpm quiero pegarle a Mateo🤦🏼‍♀️🙄

Bueno ahora si último por hoy 🥰

Espero que les haya gustado mucho mucho❤️

Nos leemos mañana!! Gracias por el aguante 💞

Enséñame //Mateo Palacios//Trueno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora