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El despertador sonó 6:30am. Lo apague como pude y me levante para ir al baño, hice mis necesidades, me di una ducha rápida y me puse el uniforme del colegio.

Metí todos los libros y los cuadernos, siempre a último momento, en la mochila y baje a desayunar.

Me serví una taza de café con leche con unas medialunas que habían quedado del día anterior.

—Isabella apúrate que ya nos vamos—grite para que me escuchara mi hermana que estaba encerrada en el baño hacia media hora.

—Para que me estoy maquillando y me falta plancharme—hablo tranquila.

Me revienta que haga todo a ultimo momento porque después terminamos llegando con el tiempo justo y muchas veces tarde.

—Dale que es la hora pendeja siempre lo mismo—me levante, lave la taza y me acosté en el sillón a esperar a mi hermana.

—listoo—dijo saliendo del baño.

Tomo la chocolatada rápido y salimos para ir al colegio.

Como mi viejo se había ido a trabajar más temprano no teníamos otra opción que ir caminando.

Miré la hora, nos quedaban 15 minutos si no queríamos llegar tarde así que nos apresuramos.

(...)

Íbamos por la segunda clase, por suerte solo faltaba una para irnos.

Algo que me sorprendió bastante es que Mateo no había venido, y era raro que faltara por que con los viajes que tiene durante el año falta un montón por eso siempre trata de venir, incluso cuando no se siente bien.

Por la ausencia de mi amigo no me quedo otra opción que sentarme con Agustín, después de todo no es tan pesado y engreído como pensaba, tiene su lado provocativo pero también está su lado bueno onda y divertido.

En esta última hora hablamos mucho ya que la profesora nos dejo un rato libre por hacer todas las actividades así que aprovechamos para conocernos más.

El timbre que indicaba que terminó la clase empezó a sonar, guarde todas las cosas en mi mochila y saludé a Agustín.

—Bueno nos vemos Agus—le di un beso en la mejilla.

—Chau Mica—me giré dispuesta a irme pero me agarro el hombro—¿haces algo hoy?

La verdad es que no tenía nada que hacer más que ver netflix todo el día aunque tenía pensado ir a visitar a Mateo pero no habíamos arreglado nada.

—Eh creo que no—dije dudando.

—¿Queres venir a casa?—y ahora que mierda se supone que tengo que contestar lpm.

—Emm te aviso, si no hago nada voy—asintió y nos despedimos.

Salí del colegio y me quede parada en la esquina esperando a mi hermana, hoy era uno de los pocos días que coincidían nuestros horarios.

Me estaba poniendo de mal humor hasta que veo la cabellera rubia acercarse, al fin.

—Dale nena que tengo hambre—venia distraída chateando con el celular.

—estoy yendo Micaela—rodeé los ojos y seguí caminando.

(...)

Llegamos y prepare unos fideos con tuco para nosotras dos, nuestros viejos estaban trabajando.

Mientras yo cocinaba Isabella ponía la mesa.

—¿Hoy salís?—pregunto llevándose el tenedor a la boca.

Enséñame //Mateo Palacios//Trueno Where stories live. Discover now