°21°

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Martha:

-¿No te fias de ella? -La miró con gesto interrogativo, aquellas palabras eran perfectas para cuando uno no se fiaba.- Es una... Saltadora...

•— A Lo mejor se lo ha inventado y trata de hacernos daño...

Comentó sin mirar a Martha, estaba preocupada

Martha:

Volteó hacia donde se había ido Va.

-¿Qué ganaría haciendo eso? -Quiso saber con suavidad, además de despitarlas...

•— ¡Hasta ella admite que tiene un demonio dentro!

Tembló mientras lo decía, tenía miedo

Martha:

La abrazó con cariño y le acarició el cabello con cuidado.

-Tranquila, si pasa algo, se lo diremos a Bua'Cashr. -Le dijo en un intento de consolación.

•Asintió lentamente, tomó su mano y la acarició suavemente.

— ¿Quieres volver?

Martha:

Asintió antes de corresponder al agarre proporcionado por la contrario, le dio una sonrisa antes de echar a andar en dirección hacia aquel edifico en el cual se hospedaban.

•Ella miró detrás suya, sabía que la extraña las observaba. Suspiró temblorosa y siguió andando, tratando de calmarse. Cuando bajaron, Bai'Rai corrió hacia ellas para abrazarlas.

— Por Saal, ¿dónde estábais?

Martha:

-¿Quién es Saal? -Preguntó confusa, era obvio que se trataría de algo "superior" si lo utilizaban con una expresión.- Estábamos jugando, luego me fui al baño, encontré a Va y luego seguimos a Va.

•— Primero, Saal es una bestia que nos proporcionó luz hace mucho tiempo. Segundo, ¿Va?

Martha:

Abrió la boca para decir el nombre de aquella supuesta deidad pero no se acordó.

-La deidad. -Se limitó a decir.

•— Ah... No recuerdo que haya usado ese nombre... De todas formas, ¿tenéis hambre?

Martha:

Se acarició su propia barriga con suavidad.

-La verdad es que sí. -Dijo con un sonrojo por la vergüenza.

•Sonrió suavemente y le tomó la mano con cuidado, Eli también asintió. Las llevó caminando a su nuevo hogar

Martha:

La siguió mientras miraba sobre su hombro, por donde habían venido. Estaba pensativo sobre lo que dijo Eli, ¿debería de contarles la verdad? ¿O que sigan con esa mentira?

•Las llevó a casa y fue al comedor a buscar algo, dejándolas solas. Eli miró a Martha.

— ¿Deberíamos decirle?

Martha:

-No sé... -Se abrazó a sí misma con suavidad.- ¿Y si al final resulta que Va es buena?

•— Ya...

Miró hacia abajo, Bai'Rai regresó para ver cómo estaban unos momentos, antes de continuar con la comida

Martha:

La pequeña dio un suspiro y miró el techo pensativa.

"La verdad es el deber que debes cometer."

You Can't Escape From InsanityWhere stories live. Discover now