Por pecadora

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Se le informa a mi adorado y estimado ser la de oscuridad, que si eres muy sensible evites leer este capítulo.

Ya que hay ciertas escenas que para algunos serán cosas simples pero para otro muy desagradables.

Si eres de los que les gusta la tortura sea bienvenido y espero te guste el capitulo.

Que no se te olvide votar mi amor de la oscuridad 🖤🖤

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Desconocido#

Siento mi cuerpo muy pesado, no sé si tome mucho alcohol la noche anterior pero, lo que si sé es que este lugar no es mi casa. Es una sala de hospital, estoy en una camilla y vestida con una bata blanca, hay dos grandes puertas de mi lado izquierdo, es una habitación muy amplía y no hay más nada en este lugar, no hay ventana, tv, mesa o algo parecido, solo la ultra-venosa en mi brazos, aún estoy un poco desorientada mi cuerpo está dopado.

La noche anterior me fui a una fiesta, siempre voy todos los fines de semana y llegó a casa el domingo o el lunes en la madrugada. Mis padres no me dicen absolutamente nada, son unos alcohólicos de mierda.

En todas las fiestas que voy tomo licor hasta perder el conocimiento y me drogo, se que no es la gran cosa no nada por el estilo pero, así me gusta vivir. Solo tengo veinticuatro años, estudio en la universidad Fraternidad. No soy la mejor pero, al menos lo intento.

Ya de seguro amaneció así que voy a intentar irme antes de que venga una enfermera y no me deje salir, sin embargo, no puedo. Mis manos están sujetas por correas al igual que mis pies, estoy amordazada y allí empiezo a preocuparme. No es normal que en un hospital tengan a un paciente de esta manera, a cambio que sea un delincuente y que sepa yo... no he matado a nadie o e incumplido alguna ley, quiero gritar pero la tela que cubre mi boca no me lo permite.

Trato de forcejear, gritar o algo para que me escuchen y me saquen de aquí pero, nada. Es como si este lugar estuviera desolado, no hubiera nadie aquí . Sigo forcejeando hasta que alguien abre las dos grandes puertas de la habitación, ha simple vista es solo una persona pero no es así. Tiene la cara de aún angel, una mirada tan dulce y bella que enamora a primera vista.

Se acerca a la camilla y acaricia mi rostro, está vestido de negro. No sé si sigo alucinando o si está persona es real, lo que si sé es que está persona o alucinación es muy, muy pero muy hermosa.

-¿Estás bien, hermosa?- pregunta este angel.

Como yo no puedo hablar solo asiento con la cabeza.

-Excelente. Y dime ¿Tienes hambre o sed, o algo?

No hizo falta que yo dijera algo, mi estómago empezó a sonar lo cual me dió algo de pena. Pero, ¿que se podía esperar? Si no había comido nada desde el día de ayer en la mañana, sería de milagro que mi cuerpo no exigiera comida. El angel me mira y sale por la puerta por la que entró, al cabo de un rato entro de nuevo con una bandeja de comida, mi boca seguía amordazada y como si leyera mi mente me sonríe.

-Estas amordazada porque estabas gritando dormida y no dejabas dormir a los demás, y las correas era porque te novias mucho que casi te caes de la camilla lo cual era un poco peligroso- dijo con sutileza y calma.

ATRAPADA© ✔️ #1 De La Saga (Traumas) (En Edición)Where stories live. Discover now