8.- Charlie

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CHARLIE

No, no, no, no. A ustedes no les puedo hablar de mi hermanito. Pero tengo que hacerlo si quiero sobrevivir. Imagino a mi mamá y papá llorando detrás del televisor. La pérdida de mi hermanito todavía les duele y ahorita tal vez sepan que ya no los volveré a ver nunca.

            -No tuve el coraje suficiente para ofrecerme como voluntario y salvarlo- contesto

            Mis ojos me arden y quiero ponerme a llorar pero me guardo las lágrimas para más al rato. Guill Quiere hacerme otra pregunta cuando se escucha el Zumbido.

            -Lo siento, nos hemos quedado sin tiempo. Te deseo la mejor de las suertes Charlie, tributo del Distrito 6-

            Los aplausos continúan mucho después de sentarme. Miro a Lena y me sonríe tristemente. Las entrevistas continúan y pronto descubro que hay tres personas que tienen cautivado al público con sus palabras.

            Dos chicos y una chica.

            El primero de los chicos es del Distrito 9, Juan. Su cabello es negro y su piel es morena. Juan se dedica a alabar al Capitolio y su enfoque es coquetear con el público. Cuando termina su entrevista, la gente le sigue aplaudiendo hasta que empieza la entrevista del siguiente tributo.

            Distrito 10, Christian. Su enfoque es misterioso pero amigable y tiene el favor del público haciendo comentarios sobre la gente que ha conocido y sobre la suerte que tiene al participar en el Primer Vasallaje de los veinticinco. Es alto y flaco.  Después de que se sienta el público grita su nombre. El chico solo les dedica una sonrisa y la gente se altera.

            La chica del Distrito 11 es atractiva y tiene unos ojos hermosos. Con su vestido Azul y su cabello suelto su enfoque es claro. Su estilista aposto por lo sexy. Karime, logra cautivar al público con su forma de hablar y expresar las cosas. La entrevista de la chica pasa demasiado rápido y regresa a su lugar.

            Después del himno, los tributos nos ponemos en fila para volver al vestíbulo del Centro de Entrenamiento y sus ascensores.

            Después de la cena, vemos la repetición de las entrevistas en el salón. Soy el único que no se ve nervioso, hasta que me preguntan sobre mi hermanito y la cosa se complica. El público esta desconcertado y luego empieza a gritarme. Reacciono unos segundos después y contesto.

            Cuando termina el himno y la pantalla se oscurece, la habitación está en silencio. Mañana al alba nos levantarán y nos prepararán para el estadio. Los juegos en sí no empiezan hasta las diez, porque muchos de los habitantes del Capitolio se levantan tarde, pero Lena y yo tenemos que empezar temprano. No se sabe lo lejos que estará el campo de batalla elegido para este año.

            Sé que Hezel y Marie no irán con nosotros. En cuanto salgamos de aquí, ellos se desplazarán a la sede central de los juegos, donde, espero, reclutarán patrocinadores sin parar y trabajaran en una estrategia para decidir cómo y cuándo entregarnos los regalos. Takeshi viajara conmigo hasta el mismísimo punto desde el que nos lanzarán a la arena.

            Marie nos abraza  a Lena y a mí, pero como no es muy alta su abrazo resulta cómico.

            -Charlie, Lena. Fue un orgullo trabajar con ustedes. ¡Espero que el año que viene me den un Distrito mejor que el suyo!- después nos besa en la mejilla y se aleja rápidamente, no sé si abrumada por la despedida o por la posible mejora de su suerte.

            Hezel cruza los brazos y nos mira.

            -¿Un último consejo?- le pregunto

            -Cuando suene el gong, salgan corriendo. Ninguno de los dos son lo bastante buenos para meterse en el baño de sangre en la Cornucopia. Salgan corriendo, pongan toda la distancia posible de por medio y encuentren una fuente de agua ¿Entendido?-

            -¿Y después?- pregunta Lena.

            -Sigan con vida-

Cuando me voy a mi cuarto, Lena se encierra en su cuarto. Entro al mío, me doy una ducha y me quito el maquillaje y la ropa. Me pongo un camisón grueso de lana y me acuesto. Durante la noche trato de dormir todo lo que pueda porque sé que cada momento de fatiga en el estadio es una invitación a la muerte...

Sin darme cuenta me quede dormido y Takeshi viene por mí antes del alba, me da una túnica sencilla y me acompaña al tejado. Los últimos preparativos se harán en las catacumbas, debajo del estadio en sí. Un aerodeslizador surge de la nada. Pongo pies y manos en el primer escalón y al instante me quedo paralizado. Una especie de corriente me pega a la escalera hasta que me suben al interior.

Aunque me imaginaba que la escalera me soltaría al llegar, sigo pegada a ella y una mujer vestida con una bata blanca se me acerca con una jeringuilla.

-Es tu dispositivo de seguimiento Charlie- me explica.

Sin embargo, eso no evita que no sienta un dolor agudo cuando me introduce el dispositivo metálico debajo de la piel del antebrazo. Ahora los Vigilantes  podrán localízame en todo momento. No les gustaría perder a un tributo.

En cuanto al dispositivo está colocado, la escalera me suelta. La mujer desaparece y recogen a Takeshi del tejado. Un chico Avox se acerca y nos acompaña a una habitación donde han servido el desayuno. A pesar de la tensión que notó en el estómago, como todo lo que puedo.

Los Juegos del Hambre (Primer Vasallaje)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang