Spain RP y tu

- Capítulo 25 -

=== Tu ===

Y ahí estaba yo, delante de su puerta pérdida en mis pensamiento. Sacudí un poco la cabeza despertando de ese trance y arranque la moto en dirección hacia mi casa. Al llegar entre y me senté en el sillón, me quite todo lo que cubría mi cara y lo deje en la mesa. Me cruce de brazos hasta que por la puerta apareció Black.

- No se suponía que haríamos el bien? - le pregunte molesta.

- Hay algo que no te he contado - dijo él.

- No me digas, enserio? - le dije molesta.

- (__) no puedo controlar la ciudad solo haciendo el bien, además en ningún momento hemos echo daño a alguien inocente. Yo controlo a algunas mafias, hago tratos con polis haciendo una especie de tratado de paz. Porque aunque lo parezca esos chicos no son malos del todo, simplemente defienden lo que es suyo. Si que es cierto que trafican con drogas, armas y se meten con alguna que otra mafia. Pero si no controlo el bien y el mal a la vez, se desequilibrara y eso causaría un caos - me dijo mientras se sentaba a mi lado.

- Es decir que eres el Don de esa mafia? - le pregunte yo.

- No sólo de los Verdes, también hay algunas más, otras con más poder y otras que menos - me respondió.

- Entiendo, pero a que te referías con lo del "tratado de paz" - le pregunte.

- En este caso los Verdes odian a los maderos y fue por eso que yo fui a hablar con los policías una noche, para pactar de que no daríamos problemas si ellos no se metían en nuestros asuntos - me respondió mientras cogía un poco de aire para continuar hablando - pero como pudistes observar tanto ellos como nosotros rompimos nuestra palabra, aunque claro está que ellos la rompieron primero - me respondió.

- Es por eso que mañana tú irás a hablar, no? - le pregunte de nuevo.

- No, yo no, iremos ambos - me respondió él.

- Cómo que ambos? - le dije yo.

- Necesito que valla aprendido porque llegará el día en el que... - dijo buscando las palabras adecuadas - bueno olvida eso de momento, necesito que vallas porque debes de ir cogiendo las riendas de nuestro trabajo tanto el bien como el mal, entendido? - me dijo él.

- Entendido - le respondí.

- Bien, ahora descansa mañana iremos a primera hora a hablar con los policías - me dijo mientras salía por la puerta - Por cierto, buen trabajo - dijo mientras montaba en su moto para luego perderlo en la noche.

Yo me quedé parada en el sillón, no pensé que esto fuera a ser así, pero había aceptado y ya no había vuelta atrás. Mire mi móvil y era casi las cinco de la madrugada, no tenía sueño, encendí la televisión para ver si había algo interesante y nada. La apague y me volví a cubrir la cara y salí. Me fijé en que a unos metro había una moto abandonada, yo la cogí y me dirigí a la fabrica que anteriormente habíamos estado. Subí las escaleras y me puse vigilar a la ciudad. Estaba todo bastante tranquilo, me quedé un buen rato arriba observando pero seguía sin ver ninguna cosa extraña. Cuando empezó a amanecer baje y me volví a casa. Después de llegar, subí me quité lo que llevaba y me vestí como Bianca, espere unos minutos y apareció Ralph por la puerta. Salimos fuera y él miro su reloj.

- Si mis cálculos no fallan, en tres, dos, uno... - dijo apareciendo de la nada un deportivo negro sin conductor.

- Tu tampoco ves al conductor, verdad? - le pregunte yo.

Él soltó una carcajada y habló - Solamente he hackeado su sistema operativo a través de vía satélite, para luego mandar unas ondas reflectoras que vincularía al coche y de esa forma teniendo el control mandar una ubicación en la cual se vería en su GPS, haciendo que venga a nuestra posición - me dijo él haciendo parecer lo más sencillo del mundo.

- Alta tecnología militar - dije sentantome de copiloto. Él se sentó delante y arrancó. Marco en el GPS la comisaría y nos dirigimos hacia allá, al llegar, aparcó el coche en el parking delantero, y nos dispusimos a bajar pero él cerro él coche por dentro.

- (__) esta vez te recomiendo que no hables ya que estos tíos te conocen, así que intenta no hablar y si por algún motivo, cual sea intenta modificar tu voz. Pero eso, intenta no tener ningún contacto, entendido? - me pregunto Ralph.

Yo asentí y luego salimos del coche, la verdad es que al entrar en comisaria me sentí muy nerviosa, en el fondo sabía que me estaba arriesgando, pero haré todo por no cagarla. Me fijé en que no había nadie atendiendo y en que Ralph me dijo que me sentara y esperará ahí.
Habían pasado unos veinte minutos, pero seguía sin aparecer nadie.

- Pero es que de verdad, parece que no trabaja nadie en esta pvta comisaria o qué? - dijo Ralph impaciente y gritando a la vez. Y como si magia se tratase a pareció un agente por la puerta, que pasó de largo a la armería. - Será broma, no? - dijo Ralph enfadado.

- Disculpe caballero, necesita algo? - pregunto el agente.

- Al fin, al fin, si, necesito hablar con el viejo - dijo haciendo referencia a Conway.

- Déjeme un momento que pregunto si esta - dijo alejándose para hablar por radio. Cuando término se acercó nuevamente hacia nostros y volvió a hablar - Ahora mismo se encuentra en su despacho ocupado - dijo el agente.

- Oye chico, no se si te abras enterado de lo que pasó ayer? - le preguntó Ralph.

- Si se refiere a lo de que secuestraron a Volkov, si lo sé - respondió el agente.

- Bien, pues mira tú que casualidad de que si nos le dices a Conway de que hable conmigo ahora mismo, ordenare yo mismo que te secuestren, pero esta vez no los detendré, dejaré que mis chicos se diviertan contigo - dijo Ralph como un psicópata.

Yo me asuste un poco, nunca lo había visto hablar así, pero o era eso o que nos esperaramos todo el día.

El chico tragó saliva y se volvió a retirar para hablar por radio de nuevo, cuando término se volvió a acerca - Bien, síganme - dijo guiandonos al despacho.

Yo me sabía el camino, de la otra vez que estuve con Ivanov, pero no dije nada por dos motivos. Número uno echaría a la mierda la tapadera y número porque cada vez que estaba más cerca de la puerta aumentaban mis nervios, Conway era un tío listo, muy difícil de engañar y como se enterasé de que soy yo me iría a perpetúa con todos los cargos que tengo. Al llegar nos paramos un momento y el agente se retiró yo mire a Ralph y él me miro a mi intentando calmarme con la mirada. Después de eso, entramos sin tocar.