¿Seguirá el juego largo? [Joshaya au]

"Tómalo o déjalo" [30]

"Aiden sí se merece a Maya, no yo" 

"Él podrá hacerla feliz, cosa que yo nunca hice cuando pude"

Los pensamientos atormentaban a Josh por dentro, sentimientos que no sentía desde ese momento que había decidido desaparecerse.

You said you cared
And you missed me, too
And I'm well aware I write too many songs about you
And the coffee's out
At the Beachwood Café
And it kills me 'cause I know we've run out of things we can say

Se lamentaba en silencio el chico de ojos cafés, mientras estaba sentado sólo en el restaurante del pueblo, con la canción "Falling " de Harry Styles sonando por los altavoces del lugar.

What am I now?
What am I now?
What if I'm someone I don't want around?
I'm fallin' again
I'm fallin' again
I'm fallin'

What if I'm down?
What if I'm out?
What if I'm someone you won't talk about?
I'm fallin' again
I'm fallin' again
I'm fallin'

And I get the feelin' that you'll never need me again

Josh pasó sus manos por su cara y luego por su cabello castaño, esperando que algo bueno se le pueda llegar a ocurrir para no volverse a sentir como lo hizo tres años atrás. esa canción representaba a la perfección lo que él había sentido en ese entonces, escucharla sólo le traía recuerdos  lamentos. Pero esta vez él quería hacer las cosas bien, pero ya no sabía como.

Luego de haber pasado la tarde a solas, el chico decidió regresar a la cabaña. Pensó que lo que peor le estaba haciendo en el momento era dejarse hundir en sus penas y pensamientos negativos sobre hechos de los cuales no conocía la verdad de lo sucedido. Al entrar a Ski Lodge se encontró con Riley leyendo sentada en los sillones de la ventana junto a la entrada principal de la cabaña. El sonido de que alguien había cerrado la puerta llamó la atención de la castaña, haciendo que alce su mirada para encontrarse con su tío, quien tenía una cara que no hacía falta ser un experto para deducir que había tenido un mal día... O mejor dicho, una mala tarde.

Él miró para donde estaba su sobrina y ella con un gesto le digo que se acercara y se sentara a su lado. Riley ya no entendía en qué andaban las cosas entre su mejor amiga y Josh. Nadie lo sabía con exactitud, ya que nadie estaba al tanto de la historia completa hasta ahora. Josh se sentó a su lado y se quedó en silencio. La chica de pelo castaño rodeó los ojos sonriendo, puso un separador rosa en la página que estaba del libro antes de cerrarlo y ponerlo sobre su regazo para dirigir su mirada de vuelta a su tío.

—¿Ya buscaste a Maya para terminar su conversación? —le preguntó ella y el chico suspiró mientras tenía su mirada fija en la nada misma.

—Ni se si molestarme en ello— él alzó su mirada y tragó grueso.

—Para que gastarme en que ella sepa una vez más que quiero estar con ella si después me entero que tiene planes con Aiden para hoy en la noche. 

—¿Qué importa si ella "tiene planes con Aiden"? —ella hizo las comillas al hablar porque sabía que lo de su mejor amiga y el otro chico no sería una cita como Josh creía, sino más bien una salida a la que todos estaban invitados, incluyéndolo a Josh. Pero ella no se lo diría aún.

—¡Vos viniste a recuperarla! ¡A decirle lo que sientes y saber si su promesa sigue en pie, por amor a dios! —agregó la chica.

Él se quedó en silencio, sabía que su sobrina estaba en lo cierto y no tenía que argumentar en contra pero aún no estaba convencido de seguir con ese plan. Al fin y al cabo lo que más quería él era la felicidad de Maya, sin importar si era con o sin él. 

Ese silencio fue un modo de respuesta que hizo que Riley deba pensar algo más para decir respecto al tema.

—¿Recuerdas la charla que tuvimos la vez anterior que vinimos acá? —preguntó ella.

—"¿Cuándo es que empiezas a entender tus sentimientos?" —se citó a ella misma, recordando esa conversación.

—"Necesitamos experiencia para entender quienes somos". —agregó ella citando la respuesta del chico en ese entonces, mientras imitaba una voz grabe para también lograr cambiar la cara triste de Josh, cosa que logró porque él soltó una pequeña risa.

—Lo recuerdo. 

—Sé que sonaré muy mi padre diciendo esto pero... dime ¿quién eres, Josh? —preguntó ella y el la miró extrañado.

—Porque el Joshua Matthews que conozco, no se daría por vencido.

—¿Qué decis que haga entonces?

—Bueno mira, eso de hoy en la noche de Maya y Aiden que vos pensas que es una cita entre ellos, en realidad es una noche de karaoke a la cual estas invitado al igual que todos nosotros. —ella alzó una ceja y continuó.

—Yo digo que aproveches esta noche y dejes todo claro con Maya, terminen su conversación de hoy en la mañana y no dejen que siga pasando el tiempo, ese es mi consejo. Tómalo o déjalo tío.

—Tenes razón, las vacaciones están por terminar.

—Aún les quedan cuatro días.