INESTABLES (EN EDICION)

Capítulo 10

Lesly

Tres semanas han pasado desde la muerte de Ángel, su ausencia todavía afecta a algunos mientras que otros actúan como si el nunca hubiera existido, creo que muy rápido se les olvidó todo.

Pero que se puede hacer, la muerte es así, simplemente te mueres y si te creíste excepcional lamento informarte que te olvidarán en menos de lo que canta un gallo, el mundo sigue girando mientras estás en una tumba siendo comido por los gusanos, sin sentir, sin saber nada, solo ahí estático, con tu cuerpo pudriéndose mientras todos intentan superar tu pérdida.

Camila ya volvió a sonreír y aunque a veces llora por las noches yo sé que ella está mucho mejor, Christian actúa normal y aunque siempre viste de negro él no ha dejado de ser quien es.

Yo por otro lado nunca tuve una relación cercana con él ya que sólo tengo un mes aquí, pero bueno, el mundo sigue su curso y yo no soy nadie para andar llorando por todos los rincones cuando ya todo el mundo lo supero .

Sigo caminando por los pasillos del campus y me asombro por el tamaño del lugar, es gigantesco y aunque ya he pasado por aquí cientos de veces todavía no me acostumbro, me siento fuera de lugar así como un pez fuera del agua, y supongo que es normal ya que yo nunca he durado tanto tiempo en un mismo lugar.

Llego a la habitación de Elizabeth y lo pienso dos veces antes de tocar la puerta, Elizabeth y yo estamos juntas desde que recuerdo y por más que quiera no puedo estar separada de ella, es la única persona cercana que me queda y no me puedo dar el lujo de perderla, por eso le voy a pedir perdón, yo no soy de excusarme por mis actos pero ahora más que un querer es una necesidad.

—Vas a tocar o te piensas quedar ahí toda la noche.

Me volteó y veo la hermosa figura de mi amiga, no me aguanto y la abrazo fuerte, la siento tensarse pero luego corresponde al abrazo débilmente.

— Yo también te extrañe mocosa— dice acariciando mi pelo.

Ella se separa y abre la puerta de su habitación, entramos y yo me siento en la cama.

—Eli lo siento— hablo — sé que te preocupaste mucho por mí y te juro que no lo volveré a hacer, cuándo vaya a salir te llamaré para avisarte — le digo apenada.

—No te preocupes Les, déjalo así— responde  restándole importancia.

—¿Eso quiere decir que me perdonas? — pregunto dudosa.

—Si.

Yo me levanto y vuelvo a abrazarla mientras le repito muchas veces gracias, de verdad yo pensé que iba a ser más difícil que ella me perdonara.

—Te quiero— digo susurrándole al oído.

—Y yo te amo— responde de la misma forma.

                         ***
Así pasamos la tarde completa poniéndonos al día con todo y ella va contándome de todos los chicos con los que ella ha estado en estas dos semanas, no le he dicho lo de Christian y es mejor hacerlo ahora para que después no haya mal entendidos.

—Eli— la llamo para que me preste atención.

—¿Mmm?.

—Estoy enamorada.

Ella se levanta mirándome con los ojos bien abiertos.

—¿Que?

—Que estoy enamorada Eli— vuelvo a repetir.

—¿De quien?— pregunta seria.

—De Christian— respondo sonrojándome.

Ella se queda callada mirándome incrédula, abre la boca y la vuelve a cerrar.

—Di algo— insisto.

—¿Ese no es al chico que golpeaste?— pregunta mirándome incrédula.

Yo asiento con la cabeza y sigo mirándola para ver su reacción, se queda tranquila y me alivia saber que ella no lo ve de mal forma.

—Tienes unos gustos horribles— dice dándome la espalda y agarrando unos libros.

—Pero tu misma me dijiste que el era lindo— le digo acordándole lo que dijo en día que llegamos aquí.

Ella se voltea con el rostro inexpresivo.

—Eso lo dije porque no lo vi bien— responde .

«Pero que dice, Christian es hermoso»

—Bueno él me gusta así— sentencio.

Ella respira profundo y el cuerpo se le tensa por segunda vez en la tarde.

—Ok, lo acepto— dice— supongo que algún día tenía que ser.

—Si Eli, sabes que yo nunca he tenido novio pero este me gusta de verdad— le digo soltando un suspiro cuando terminó la oración.
—¿Y mi hermano? ¿No fue tu novio? —cuestiona mirándome.
<Ese señor fue todo menos mi novio>
—Tu más que nadie sabe lo que pasó — Bufo — él no es digno de ser llamado mi novio, ni siquiera sé  para que lo mencionas.
Ella se levanta y recoge algunos libros.
—Lesly me tengo que ir a la última clase de hoy— dice terminando de arreglar todo.

—Bye, que tengas suerte con la clase— digo. Le doy un beso en la mejilla y salgo de su habitación.

Me encamino a mi habitación dando pasos rápidos y largos, a mi nunca me ha gustado andar sola y me da un poco de miedo porque siento que me están observando siempre.

Llego a mi habitación más rápido de lo normal y me siento sofocada, me siento como que si corrí un maratón.

Me tiro en la cama ignorando a Christian que está solo en bóxer.

El calor llega a mejillas y me tengo que tapar la cara con la almohada para que no se de cuenta, ¿Ya dije que el chico está para comérselo?.

—Hola Maleducada— dice Christian acercándose a la cama.

Me levanto un poco la almohada y la vuelvo a bajar al ver que aún no se tapa el cuerpo.

—Ponte ropa ¿Si? — digo en un susurro ahogado por la almohada.

Él le da un tirón a la almohada y me obliga a mirarlo, el corazón me late fuerte y la boca se me vuelve agua.

«Malditas hormonas alocadas»

Respiro hondo tratando de normalizar mi respiración, cosa que se vuelve un intento fallido cuando el se muerde los labios y baja un poco el elástico del bóxer.

—¿Que.... ha- ces?— pregunto en medio de jadeos.

Él se ríe y me vuelvo a sonrojar cuando veo sus lindos hoyuelos.

—Baby, sólo me estaba acomodando el bóxer— dice tan cerca de mí que su aliento choca con el mío.

Trago grueso y asiento.

«Funciona cerebro, por favor»

Se me acerca al oído y la piel se me eriza mientras una ola de electricidad viaja por todo mi cuerpo hasta llegar a un lugar exacto.

—¿Te molesta si me cambio el bóxer en frente de ti baby?— pregunta él con voz ronca y sexy.

Las neuronas no me funcionan correctamente y terminó hablando incoherencias.

—Calma era broma — dice él muerto de la risa.

El calor vuelve a invadirme y río con el para calmar la tensión.
Cuando las risas se acaban nos quedamos mirándonos fijamente hasta que él se voltea quedando despaldas.

—Te quiero regalar algo—habla.

Él busca algo dentro de los cajones y me quedo mirando su hermoso trasero, o sea tiene más que yo, él sigue buscando algo y me muerdo el labio extendiendo las manos al aire para simular como que las estoy tocando.

—Lesly te estoy mirando por el espejo— dice Christian sin dejar de buscar en el cajón.

«Bendita Virgen de las verguenzas ¿por que me tratas así?»

Yo no sé ni en donde voy a meter la cabeza, tierra trágame y escúpeme en otro mundo por favor.

Quiero disculparme pero las palabras no me salen simplemente me quedo ahí sin moverme y con los ojos cerrados esperando que cuando los abra yo este en otro universo paralelo.

Siento algo frío en mi cuello y me obligó a abrir los ojos, tengo a Christian tan cerca de mi que puedo sentir su calor corporal, las manos me sudan y no es la única parte del cuerpo que está mojada por su cercanía.

Me doy una cachetada mental y me obligó a volver a la realidad, miro mi pecho y tengo una cadena tipo militar colgada del cuello con el nombre de Christian, sonrío para mis adentros y lo miro a los ojos.

—¿Que es?— le pregunto tocando la cadena.

— Es algo para que me recuerdes siempre, si no estoy, si me voy, si estoy lejos por cualquier cosa solo mírala y me tendrás cerca— dice él acercándose más a mi.

—Y quiero que nunca te la quites, quiero que la lleves cerca de tu corazón para siempre...

No lo dejo terminar y lo beso apasionadamente como si el mañana no existiera, y por un momento solo somos él y yo, dos personas que se quieren y que estarán juntos para siempre, él  y yo contra el mundo.